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Si los rollitos de la espalda te traen por la calle de la amargura, tranquila, ¡hay solución! Con frecuencia, solemos enfocar nuestros entrenamientos a conseguir unos brazos firmes y tonificados al estilo de Letizia o un abdomen plano –e incluso algunas persiguen el six pack-. Para otras el foco está en la cara interna de los muslos, ganar glúteo o conseguir unas piernas más estilizadas.
¿Pero qué pasa con los pliegues de grasa que se acumulan en la espalda? Que, a menudo, nos olvidamos de ellos. Por eso, si tú eres de las que los considera poco estéticos y está buscando una solución, ¡la tenemos! Y está disponible en todos los gimnasios que tengan un mínimo equipo de máquinas.
Paula Suárez (@pa.suarez), una de las instagramers del mundillo fit que más nos inspiran, recordaba en sus stories que para conseguir una espalda atlética en la que no haya ni rastro de rollitos tenemos que trabajarla con fuerza, carga, intensidad y técnica.
La máquina en la que aparece haciendo el ejercicio es la famosa dorsalera. Es una máquina de poleas con la que podrás trabajar la zona media de la espalda. Para hacerla correctamente asegúrate de que la altura del asiento es la adecuada para ti (tus plantas deben estar apoyadas en el suelo), levántate para coger la barra, en el caso de que no llegues de la posición de sentada –no pasa nada-, y vuelve a tomar asiento llevando la barra hasta el nivel de la barbilla o un poco más.
En cuanto al peso, no pongas demasiado al principio, deberás ir subiendo de manera progresiva. Piensa que un buen peso es aquel que te permita hacer entre 10 y 12 repeticiones. Y para terminar, agarra la barra con una apertura de brazos similar a la del ancho de tus hombros y recuerda que la espalda debe estar con un leve ángulo, tal y como has visto en el vídeo. Con paciencia y constancia le dirás adiós a los rollitos.