Famosas como Amelia Bono han incluído el running en su rutina diaria consiguiendo, no sólo un tipazo, sino mantenerse sanos y en forma. Y no nos extraña, ya que correr tiene múltiples beneficios para el organismo, como adelgazar, tonificar los músculos y mantener el corazón y los pulmones fuertes. Si vas a empezar a practicar running seguro que te asaltan muchas dudas, como por ejemplo ese mito tan extendido que dice que correr en ayunas te hará adelgazar más y con más rapidez, ya que el cuerpo tirará de la grasa acumulada en el organismo, al no contar con la energía que le ha dado el alimento.
¿Es verdad que correr en ayunas te hará adelgazar más rápidamente? Respuesta corta: NO. Respuesta larga: no, PERO. Vamos a explicar ese pero. Es verdad que, cuando corres en ayunas, el organismo recurre al uso de grasas, ya que tus niveles de carbohidratos estarán bajo mímimos. Estas reservas son limitadas, ya que duran entre 2 y 3 horas en el organismo, mientras que las grasas son un sistema de almacenaje ilimitado. Pero no sólo de grasas vive el hombre, y no es posible eliminar sólo grasa, siempre vas a necesitar una cantidad mínima de carbohidratos de forma simultánea.
Correr en ayunas significa entrenar tras llevar al menos 8 horas sin consumir ningún alimento, lo que no es demasiado recomendable para aquellas personas que no estén preparadas ya que podrías padecer nauseas, vómitos y, si tienes un nivel bajo de glucosa en sangre, pérdida de conocimiento. En definitiva, sí, podrías quemar más grasa al correr en ayunas, pero deberías seguir un entrenamiento de muy baja intensidad, por lo que la diferencia en cuanto a pérdida de peso es casi imperceptible.
Otro de los falsos mitos a la hora de correr en ayunas, es que te hace perder masa muscular porque, al no haber comido, al cuerpo le faltarán carbohidratos y glucosa (azúcar) por lo que tirará de la proteína de los músculos para obtener la energía que necesita. En teoría esto es así, pero la mayoría de runners acaba su entrenamiento antes de llegar a este punto, ya que antes de comenzar a perder masa muscular, sentiría debilidad, fatiga e incluso mareos.
Si quieres probar a practicar running en ayunas, has de empezar poco a poco y jamás sobrepasar los 40-60 minutos. La intensidad de la carrera debería ser baja y siempre comenzar el ejercicio estando bien hidratada. Además, lleva encima algo de comer por si comienzas a sentir mareos y, al terminar, añade proteínas e hidratos de carbono a tu desayuno para mejorar la recuperación muscular.
Entonces qué, ¿salimos a correr en ayunas o no? Depende de ti. Correr en ayunas tiene ciertos beneficios, pero son más mentales y de organización de tu día a día que físicos. Practicar running nada más levantarte te hará sentirte más ligera y tu cerebro y sistema nervioso se activarán, por lo que es posible que te sientas con más energía a lo largo del día. Pero si lo haces para perder peso, vete olvidando, porque tampoco vas a notar la diferencia.