¿Cómo debe ser realmente un brownie?

El brownie es un postre que enamora tanto a adultos como a los más pequeños. Para los amantes del chocolate será siempre la primera opción, pero hay muchas maneras de hacerlo.

Algunos añaden nueces, otros toffee crujiente, pero la receta original no tienen ninguno de estos dos ingredientes. Es recomendable comerlo caliente y si se acompaña de helado (el sabor más famoso es el de vainilla) crean una mezcla perfecta al contrastar las temperaturas de ambos.

Moncho López, de Levadura Madre , nos da algunas claves que neceitas saber para obtener un brownie perfecto. El primer consejo siempre será cocinar con ingredientes de calidad y el chocolate (el protagonista), es mejor que sea de al menos un 70% de cacao puro y sin azúcar.

Primero se derrite el chocolate junto con la mantequilla y se deja templar. Después, se añaden los huevos uno a uno y cuando está todo incorporado se añade la harina tamizada. La temperatura del horno debe estar fuerte, mínimo 200-220 grados, y es un postre que no hace falta que repose. Para obtener un brownie jugoso es mejor no que pasarse con el horneado.