No hace falta explicar que Ibiza es, sin duda, mucho más que sus playas, sus fiestas y sus discotecas. Pero para descubrir su esencia y conectar con su auténtica identidad isleña, una de las mejores opciones es explorar su costa norte. A unos pasos de la playa de Port de Sant Miquel y situado en una privilegiada ensenada, el nuevo resort de lujo Cala San Miguel acaba de abrir sus puertas para los visitantes que quieren escapar de las emociones fuertes y prefieren descansar y explorar la zona menos masificada de la isla.
Rodeado de montañas y senderos por los que perderse y literalmente a un paso del mar y las aguas cristalinas del Mediterráneo, el resort está emplazado en un lugar estratégico: a apenas 22 km del centro histórico de Ibiza y Santa Eulalia ; a 10 minutos de Benirrás y apenas 28 km del aeropuerto. Cerca de todo, pero al mismo tiempo alejado del Ibiza más fiestero, intenso y ruidoso. En esta parte de la isla, el tiempo avanza definitivamente más despacio.
Perteneciente a la cartera Hilton Worldwide, esta nueva opción de alojamiento es sinónimo de tranquilidad, privacidad y lujo. Un tratamiento VIP y cinco estrellas en uno de los entornos más privilegiados de Ibiza: muy cerca de las Cuevas de Can Marçá, pero también de los mercados de artesanía ibicenca, las calas del norte y de pueblos con encanto como Santa Agnés de Corona o Sant Mateu d'Albarca.
En realidad, el resort es un innovador dos por uno. Dos hoteles solo para adultos en el mismo entorno privilegiado: The Club Cala San Miguel Hotel Ibiza y el Cala San Miguel Hotel Ibiza. El primero, frente a la playa y con unos estupendos jardines interiores, dispone de 96 habitaciones y es un establecimiento boutique de cinco estrellas tan moderno como perfectamente integrado en el paisaje.
Su oferta gastronómica lo tiene todo y para todos los gustos: desde un magnífico bufé hasta un food truck pasando por un gastrobar mediterráneo, un bar en su piscina o un restaurante japonés con alma ibicenca.
El Cala San Miguel Hotel Ibiza es un poco más grande (196 estancias) con vistas a la montaña, la piscina o el mar, un bufé en el que se sirven cenas temáticas, un restaurante italiano, dos bares (uno en el lobby y otro en la piscina) además de un gimnasio o un centro de wellness con una amplia carta de tratamientos.
Si además de relajarte en la piscina o disfrutar de la oferta gastronómica del resort tu plan incluye empaparse a fondo de la cultural local para conocer la Ibiza más tradicional y mística, también estás en el sitio adecuado. El Cala San Miguel propone talleres para esculpir el cuero, tejer cestos o sombreros de paja y otros para aprender las propiedades de las hierbas ibicencas o descubrir el trabajo de los artesanos y alpargateros locales.
Además de visitar las calas más cercanas en llaüt, el barco típico de la zona, o practicar paddle surf o kayak, también organizan visitas a viñedos como el Ojo de Ibiza o fascinantes proyectos de agricultura regenerativa como Juntos Farm.
Su oferta de actividades va desde las más relajantes, como el yoga , las sesiones de reiki o los masajes con aceites esenciales, a la música en directo y las sesiones de DJ por las tardes. Si, además, celebras algo especial te ayudan a organizar un concierto privado en tu propia habitación. Más lujo, imposible.
20 de enero-18 de febrero
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