La costa Amalfitana es uno de los paraísos más bien valorados y caros del mundo pero también se puede disfrutar sin gastar mucho. / PEXELS

Cinco trucos baratos para disfrutar de los mejores planes en la costa Amalfitana como los millonarios

La costa Amalfitana, conocida como uno de los paraísos más caros del mundo, también se puede aprovechar sin gastar mucho. Te contamos los planes más baratos y divertidos para disfrutar de un viaje único.

Uno de los destinos donde pasan las vacaciones las influencers y celebrities es sin duda la costa Amalfitana. Un paraíso que derrocha elegancia y en el que sacar fotos es un verdadero gusto. Pero además de ser muy bonito, también destaca por ser muy caro. Y no caro de 10 euros más, sino de los que pica y mucho.

Pero esto no significa que se puedan encontrar planes únicos, originales y para aprovechar al máximo el viaje. Solo es cuestión de indagar un poco más y descubrir planes low cost. Y los hemos encontrado.

Capri, Anacapri, Positano, Ravello, Amalfi y Furore. 50 kilómetros de franja junto al mar Tirreno que se pueden descubrir en profundidad y sin gastar mucho dinero. En otras palabras: planes bonitos, baratos y muy divertidos. Este territorio, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, esconde secretos que una vez encontrados se convierte en un destino de postal. Toma nota de los cinco trucos de cómo recorrer la costa italiana Amalfitana en modo low cost.

La costa Amalfitada es un destino de postal en el que disfrutar de unas vistas de ensueño. / PEXELS

1. Alojamiento bonito, barato y cómodo en la costa Amalfitana

El truco por excelencia para empezar tu viaje con el modo ahorro puesto es seleccionar el mejor sitio para hospedarte y acertar. Para ello es vital saber que nunca hay que alojarse en los lugares más caros y transitados. Entre ellos: Positano y Amalfi son los dos por excelencia. Descartados totalmente.

Hay localidades menos famosas pero igual de bonitos y mucho más baratos donde encontrar alojamiento va a ser fácil y a precios asequibles. El golfo de Salerno, por ejemplo, está repleto de pequeños pueblos baratos y bien conectados entre ellos. Cetara, Maiori, Minori, Atrani...

2. El transporte público es la opción más barata y fácil para moverse

En el momento de decidir el mejor hotel para alojarse, otro punto a tener en cuenta es que tenga cerca transporte público para ir de un lado a otro. Los pueblos de Salerno más aislados, por ejemplo, aunque sean muy bonitos, no son muy recomendables porque solo se puede llegar en taxi. Y, mejor gastarse el dinero en un buen Aperol que no en transporte para ir y volver, ¿verdad?

SITA es el bus por excelencia de la costa Amalfitana, ya que que pasa por todas los pueblos. En general, no hay mucha distancia entre un sitio y otro por lo que no va a sacar mucho tiempo. Otra buena opción es la moto: más peligrosa pero perfecta para disfrutar de las vistas y alquilarlas no suele ser caro. Y otra son los ferrys, un poco más caros pero por regla general efectivos y sobre todo, más puntuales.

La costa Amalfitana alberga playas mágicas para desconectar del mundo y conectar con uno mismo. / PEXELS

También hay la posibilidad de alquilar un coche, pero si se quiere realmente apostar por un viaje barato no es una opción viable. Incluso los autos más pequeños siguen siendo caros y por la poca distancia que hay entre los pueblos no es para nada rentable. Y no solo deja de ser aconsejable por el precio, sino también por el tráfico que se genera (sobre todo en verano) a lo largo de la ruta. Sin olvidar, que se trata de una carretera con muchas curvas y contracurvas muy cerradas.

3. Apuesta por las panaderías, la opción low cost pero deliciosa para comer

Los restaurantes, por regla general, ofrecen platos pequeños, de poca cantidad y caros. Hay realmente muy pocas opciones (por no decir ninguna) de restaurantes buenos, de calidad, y a precios asequibles. Y tampoco es cuestión de comer mal y luego no poder disfrutar al máximo del viaje. ¿La solución? Las panaderías, una verdadera maravilla. Bocadillos, pizzas, ensaladas, tartas, postres e incluso helados. Opciones baratas y al mismo tiempo gustosas. Una verdadera delicia y muchísimo mejor que los supermercados.

Vistas de lujo, platos pequeños y poca comidad son lo que ofrecen la mayoría de restaurantes de la costa Amalfitana. / MIREIA NOGUER

4. No te limites a las playas, hay mucho más por descubrir

Aunque la costa Amalfitana es un destino para disfrutar de sus maravillosas playas, también hay mucho más por ver. Excursiones diarias en las que no hace falta gastar mucho para disfrutar de unas vistas de infarto. Un buen ejemplo son la ruinas griegas de Paestum (visita museo y zona arqueológica por 12 euros) o el sitio arqueológico de Pompeya (22 euros la entrada).

5. La mejor época para viajar en la costa Amalfitana

El verano es sin duda la época estrella para visitar la costa Amalfitana, pero nada recomendable si no se quiere gastar mucho. ¿El motivo? Los precios y los turistas se multiplican. Sin olvidar, el intenso calor que no deja ni un minuto de tregua. Un buen momento para ir y aprovechar igualmente el viaje perfecto es en junio, cuando aún no es temporada alta del todo y las temperaturas ya empiezan a elevarse.