¿Qué caracteriza a las más emprendedoras?

Montar tu propia empresa no solo es una cuestión de dinero, también lo es de actitud e impulsividad. Es más, en realidad casi todos tenemos 'sangre de empleado', o lo que es lo mismo, preferimos trabajar por cuenta ajena en lugar de crear nuestra propia empresa para emplearnos. Según un estudio alemán publicado en 2013, existe una gran diferencia entre las personas que prefieren ser empleadas y las que tienen alma de emprendedoras: Mientras un empleado suele ser un experto especializado en un tema, un emprendedor suele haber tocado muchos palos y haber probado suerte en ramas profesionales diferentes, aparentemente no conectadas entre sí. El icono de este rasgo es Steve Jobs, el fundador de Apple.

Otro estudio realizado en la Universidad de Zurich indica que los que deciden fundar su propia empresa, aunque no les salga bien a la primera, suelen ser personas con un arsenal completo de habilidades empresariales que ha ido adquiriendo sobre la marcha.

Por su parte los que prefieren ser empleados suelen estar centrados en un tema y su talento necesita ser complementado con el trabajo de otros especialistas. Una cuestión de la que se encargan los de alma emprendedora. El estudio alemán analizó una base de datos de más de 2.000 estudiantes universitarios que mostró que las personas con un curriculum más amplio y diverso tenían también más disposición a montar una empresa.

Lo que prefieren ser empleados tienen cierta aversión al riesgo y no están dispuestos a arriesgar demasiado. Entre las cualidades que se identificaron como contrarias al espíritu emprendedor estaba el deseo por tener un trabajo o un ingreso fijo, o tener un master o un estudio de post grado muy especializado y específico en algún asunto.

La teoría de quien es aprendiz de muchas cosas tiene más probabilidades de crear una empresa viene de la escuela de negocios de la Universidad de Stanford, una de las más caras y elitistas del mundo. Allí observaron que los estudiantes que se matriculaban en asignaturas muy variadas, y a veces sin aparente lógica, tenían más probabilidades de ser empresarios que empleados.

Otra ventaja de estas personas es que su red de contactos también es más diversa: amigos, familiares, conocidos de profesión … mucha gente a la que pedir ayuda a la hora de montar un negocio. Según parece una red social más variada es altamente beneficiosa a nivel creativo, ya que si alguien está expuesto a perspectivas y visiones diferentes del mundo sus ideas serán más globales y eficaces.

Muchas experiencias y versatilidad en sus contactos. Esa es la doble diversidad que define a las personalidades emprendedoras. Ergo, cuando veas a alguien que no se centra en una sola cosa no trates de que cambie, igual tiene delante a una buena empresaria.