A veces sentimos que no somos felices aunque lo tengamos todo. / Foto de Guilherme Almeida en Pexels.

FELICIDAD

Los motivos por los que no eres feliz aunque lo tengas todo, según los psicólogos

Los profesionales de Avance Psicólogos han detectado siete factores que pueden influir en esa sensación que te hace pronunciar la frase: «No soy feliz».

No puede haber un objetivo más perseguido y más abstracto que el de ser feliz. La felicidad es algo que ansiamos sentir todos, pero tenemos ese concepto tan tergiversado que, en ocasiones, con cualquiera de los cientos de baches que podemos encontrarnos en nuestra vida, sentimos que ya no somos felices.

« La felicidad es una emoción transitoria, al igual que cualquier otra emoción que exista«, aseguran desde Avance psicólogos. Todos queremos sentirlo la mayor parte del tiempo, pero estar triste y enfadado en ocasiones no significa que no estés siendo feliz. »Una de las cosas que más nos ayudan en terapia es comprender que las cosas que en un principio son incompatibles pueden convivir. Es decir, puedo sentir alegría y tristeza al mismo tiempo«, comentan los expertos.

La felicidad no es un rasgo de la personalidad, no hay personas felices todo el tiempo. Este estado emocional depende de muchas variables, como lo que ocurre a tu alrededor, tu gestión emocional, tu forma de afrontar los problemas... Y el sentirte triste en ocasiones no te convierte en una persona triste, sino en humano.

Los motivos más frecuentes por lo que no eres feliz

Según comentan desde Avance psicólogos, el no sentirte feliz significa que no estás del todo satisfecho con tu vida, pero no consigues detectar qué es lo que te chirría. Han identificado siete aspectos que pueden ayudarte a identificar de dónde viene esa insatisfación para que consigas ponerle solución:

1. Desilusión y apatía

Existen momentos en los que sentimos que nada nos hace ilusión, por lo que dejamos de hacer ciertas cosas. Pero, ¿qué ha ocurrido antes? ¿Hemos dejado de hacer las cosas porque no nos hacían ilusión o no tenemos ilusión porque no hacemos nada? A veces, esa sensación de apatía hace que dejemos de realizar lo que antes nos gustaba, por lo que es difícil volver a ilusionarte por algo.

2. Baja autoestima

«Uno de los grandes motivos de la insatisfacción es no estar a gusto con uno mismo», dicen desde Avance psicólogos. Para acabar con esto, nos invitan a preguntarnos qué estamos haciendo que no nos gusta o plantearnos si estamos siendo demasiado autoexigentes y tratándonos con poca autocompasión.

La baja autoestima puede ser uno de los factores que influyen en tu sensación de infelicidad. / Foto de Andrea Piacquadio en Pexels.

3. Falta de sentido

Otro de los motivos que nos genera más infelicidad es sentir que nuestra vida no tiene ningún propósito. Tener objetivos en la vida es positivo, pero lo es mucho más tener valores, entendiéndolos como lo que valoras en tu día a día. El hecho de no conseguir un propósito no tiene por qué hacerte sentir infeliz si valoras lo que tienes en la vida.

4. Falta de conexión con lo demás

Según un estudio de Harvard, las relaciones son el factor que más peso tiene en nuestra felicidad. Por tanto, sentir que no conectas con tu entorno puede hacer que te sientas infeliz o insatisfecho con tu vida. Es importante generar una red social fuerte que te sostenga en los momentos más débiles.

5. Expectativas altas

Quizá uno de los factores más determinantes a la hora de sentirnos infelices sean nuestras altas expectativas en lo que debería ser la felicidad. «Desde la psicología tenemos claro que es una emoción que, a veces, se tiene y que otras, no. Debemos perderle el miedo a dejar sentir las emociones de vacío y tristeza», observan desde Avance psicólogos.

6. Creencias rígidas

Todos tenemos ciertas pautas por las que nos regimos. El problema comienza cuando esas pautas no nos dejan ver otras opciones y actuamos en base a unas normas demasiado rígidas. «El pensamiento de «no soy feliz» suele venir cuando estos esquemas son demasiado rígidos y, sobre todo, son esquemas o creencias interiorizadas que no hemos elegido o que, si hacemos un ejercicio de honestidad, con las que ni siquiera estamos de acuerdo«, dicen los expertos.

7. Incongruencia entre lo que valoramos y lo que hacemos

Los valores no son objetivos, sino la dirección en la que quieres ir para que tu vida te reporte satisfacción, felicidad y alegría. Pero a veces no actuamos en base a estos valores, normalmente por el qué dirán o porque según las creencias que nos han inculcado tenemos que actuar de otra manera. Esto genera un choque en tu interior que te hace no sentirte satisfecho.

«Ahora bien, si crees que no sabes cómo gestionar las emociones desagradables que no hay forma de quitarte esa sensación de vacío, de falta de ilusión o de que nada te satisface, lo mejor es que pidas ayuda psicológica», aconsejan desde Avance Psicólogos. Porque a veces no hace falta afrontar todo sólo. Y no pasa nada.