Acude a el hormiguero

El lado familiar de Karra Elejalde: una infancia peligrosa, una discreta historia de amor y una hija actriz

El protagonista de Ocho apellidos vascos ha combinado una carrera llena de premios y éxitos en taquilla con una vida personal lejos del foco mediático. Descubrimos el perfil más íntimo de Karra Elejalde.

Karra Elejalde tiene una hija que también se ha dedicado a la actuación. / gtres

Jorge C. Parcero
Jorge C. Parcero

Haciendo pareja con otro de los actores más carismáticos del cine español como es Luis Zahera, Karra Elejalde visita una vez más el plato de El Hormiguero para presentar la nueva película de ambos: Tierra de nadie. Este título, que llega a los cines el 28 de marzo, es un thriller basado en hechos reales y ambientado en Cádiz, que nos muestra cómo un grupo de amigos se enfrenta a una situación extrema que pondrá a prueba su amistad.

Karra Elejalde, cuyo nombre real es Carlos Elejalde Garay, nació hace 64 años en Vitoria. Hijo de un músico y un ama de casa, este acérrimo hincha de la Real Sociedad sudó lo suyo para alcanzar el reconocimiento que le llegaría en películas como Airbag y sobre todo con el tremendo bombazo que fue Ocho apellidos vascos.

Antes de poder presumir de tener dos premios Goya y una Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, durante sus comienzos en compañías de teatro vasco independiente, llegó incluso a robar en varias ocasiones en un conocido supermercado de Vitoria y estuvo a punto de ser electricista. Por aquel entonces estudiaba arte dramático, escribía canciones para grupos de rock radical vasco y también realizó varios cursos de pintura y escultura en una escuela de arte, antes de encontrar su vocación definitiva en la actuación.

La complicada infancia de Karra Elejalde

Aunque ahora lo veamos hecho un hombretón con sus cinco apellidos vascos, lo que le convierte, según sus propias palabras, en «vasco al 70 %», de pequeño fue «un niño triste y enfermizo». Así lo recordaba precisamente en otra visita al programa de Pablo Motos junto a su pareja en la ficción, Carmen Machi .

«Tenía prohibido jugar y correr porque había unas corrientes de aire que cuando había sudado cogía asma y me ponía a morir. Y para prueba, un botón», recordaba el vitoriano mientras sacaba del bolsillo un inhalador de salbutamol. «Así que he sido un niño infeliz al que tenían prohibidísimo correr, jugar a la pelota, jugar al hockey... Podía ir a jugar con las niñas a las cocinitas».

Karra Elejalde durante una visita a El Hormiguero. / atresmedia

Su condición física estuve a punto de pasar factura al actor, cono confesó él mismo en El Hormiguero. «Estuve a punto de morirme en varias ocasiones», recordó ante la sorpresa del público. «Luego en la adolescencia me vino la picardía y me puse muy chulito, muy subidito«, dijo para zanjar la cuestión.

Hablando de sus abnegados padres, también rememoró una anécdota de su infancia en la que rellenó unas almejas con las perlas de un collar de su madre, usando unas pinzas de depilar, lo que le costó una buena bronca en casa.

Quién es Silvia Bel, la ex mujer de Karra Elejalde

La única relación sentimental que se la ha conocido a Karra Elejalde fue con su compañera de profesión Silvia Bel. Ambos se conocieron en el rodaje de la película Año mariano, se mudaron a Cataluña, se casaron y dieron la bienvenida a su única hija en común, Ainara. Su historia de amor fue tan discreta que no se conoce la fecha de su separación.

En una entrevista en 2014, el intérprete vasco mencionó que llevaba años viviendo en Molins de Rey para estar cerca de su hija. A la joven la vimos acompañar a su padre a recoger su segundo premio Goya por Ocho apellidos vascos . En su discurso le dedicó unas tiernas palabras diciendo: «Mi hija es el proyecto más bonito en el que he trabajado nunca. Hay cosas que a veces salen bien y otras no tanto, pero a mí esta niña me salió muy bonita·».

Ahora Ainara Elejalde ha seguido los pasos profesionales de sus progenitores y ya ha debutado en el cine con Els Encantats, junto a la ganadora de un Goya, Laia Costa. Hablando para TVE sobre si sus padres la habían animado a ser actriz, reconocía que «me dijeron que a ellos les había ido bien, por suerte, pero que era una cosa muy dura. Y lo sé bien, porque me ha tocado acompañar muchas veces a mi madre a la cola del paro».