La sorprendente historia de amor de Paul Rudd que comenzó con unas maletas extraviadas y una tragedia compartida

Los fans más jóvenes quizá conozcan a Paul Rudd como 'Ant-Man', un pequeño pero poderoso miembro del Universo Cinematográfico Marvel. Quizá también le recuerden por su cómica aparición en la última temporada del 'true crime' televisivo 'Solo asesinatos en el edificio' . Los más mayores le recordarán también como el novio pianista de Phoebe en 'Friends', pero a sus 54 años, el actor lleva siendo una presencia constante en Hollywood durante más de la mitad de su vida.

Rudd estrena ahora la película 'Cazafantasmas: imperio helado' junto a la estrella de 'Stranger things' Finn Wolfhard, pero su primera gran oportunidad le llegaba hace casi 30 años con el estreno de 'Fuera de onda' en 1995, donde compartió protagonismo junto a Alicia Silverstone o Brittany Murphy. Después vendrían otros largometrajes en los que el actor sacó a relucir todo su potencial cómico como 'Wet hot american summer' o 'El reportero'.

Aunque le conozcamos desde hace años como Paul Rudd, el intérprete es técnicamente Paul Rudnitzky. Nacido en Passaic, Nueva Jersey, sus padres son londinenses y descendientes de inmigrantes judíos que se trasladaron a Inglaterra desde Rusia y Polonia. El apellido Rudnitzky fue cambiado a Rudd por su abuelo.

Como curiosidad familiar, en un episodio de 2017 del programa 'Descubriendo tus raíces', Rudd se enteró de que sus padres eran en realidad primos segundos. El actor respondió al descubrimiento con su humor habitual: «Lo que explica por qué tengo seis pezones», aseguró entre risas frente a las cámaras. También se preguntó qué significaba la noticia para su propia familia. «¿Esto hace que mi hijo sea también mi tío?», se preguntó.

Como datos para aportar color a su faceta más personal, el intérprete se declara fan de los Kansas City Chiefs, el equipo de fútbol americano donde juega Travis Kelce, el novio de Taylor Swift y cita como modelos en su vida a dos personas: Paul Newman y el rockero inglés de los años 80, Adam Ant. Por cierto, no le busques en las redes sociales porque no tiene ninguna cuenta oficial.

«No necesito cosas en mi vida que me distraigan de lo que me importa», dijo en una entrevista con la revista 'Elle' en 2018. «A medida que mi mundo se hace más grande, trato de mantenerlo más pequeño. Realmente no quiero hablar con la gente que conozco. Y mucho menos con la gente que no conozco», dejo caer con su ironía característica.

Durante su ya dilatada carrera laboral, el actor ha sido calificado con términos como amable, autocrítico, afable o trabajador, además de un sin fin de artículos que destacan que aparentemente ha encontrado la fórmula para seguir aparentando tener 25 años rebasado el medio siglo de vida. Así que él asegura que fue el primer sorprendido cuando en 2021 la revista 'People' le nombró como 'el hombre vivo más sexy del mundo'.

Al unirse a este selecto club del que también forman parte Brad Pitt , Patrick Dempsey o Idris Elba , el actor declaró: «Soy lo suficientemente consciente como para saber que cuando la gente se entere de que me han elegido para esto, dirán: '¿Qué?'. No se trata de falsa humildad. Hay tanta gente que debería recibir este premio antes que yo...».

«Ahora espero que por fin me inviten a alguna de esas cenas tan sexys con Clooney y Pitt«, añadía con humor. «Y me imagino que estaré en muchos más yates. Me entusiasma la idea de pasar más tiempo en los yates. Y probablemente intentaré mejorar mi forma de reflexionar bajo una luz muy tenue. Me gusta reflexionar. Creo que esto me ayudará a ser más introvertido y misterioso. Y eso me hace mucha ilusión».

A pesar de este reconocimiento a su belleza, Rudd mantenía los pies en el suelo asegurando que nunca es más feliz que cuando pasa tiempo en su casa junto a su mujer, Julie, y sus dos hijos. «Cuando pienso en mí mismo, pienso en mí como marido y padre, como si fuera solo eso. Paso el tiempo con mi familia cuando no estoy trabajando. Eso es lo que más me gusta», confesaba el actor a 'People'.

La publicista Julie Yaeger, la mujer que en sus propias palabras se quedó «estupefacta» cuando le contó antes que a nadie que había recibido el galardón de 'hombre más sexy', lleva a su lado más de dos décadas. La suya es una historia que desafía lo efímero en muchos casos de las relaciones en Hollywood y además tiene un origen de lo más curioso.

Paul y Julie se conocieron cuando el actor terminó el rodaje de 'Fuera de onda'. Fue entonces cuando la directora de la película, Amy Heckerling, le sugirió que viajara a Nueva York y contratara un publicista. Al llegar con prisa a la oficina de la Gran Manzana donde le habían citado, el actor dejó sus maletas bajo el cuidado de una empleada, que terminó llevándoselas al apartamento de una amiga.

Esa decisión terminaría desencadenando una conexión entre ellos. Pocos días después, Paul invitó a Julie a comer y comenzaron a salir. Ambos se dieron el 'sí, quiero' en 2003. «Ella fue la primera persona con la que conecté en Nueva York. Empezamos a hablar y había una madurez con ella... Había experimentado alguna tragedia en su vida, yo también, y la impresión que tuve fue, guau, esta es una mujer. No es una chica. Me impresionó mucho quién era y cómo estaba superando las adversidades de su vida. Tenía y sigue teniendo una perspectiva del mundo que no se adquiere fácilmente; se gana y la mayoría de la gente no la tiene a una edad tan temprana», aseguró sobre ella en una entrevista en televisión.

Desde entonces su relación no solo ha dado como fruto dos hijos, también le ha servido como inspiración para el guion de dos de sus películas más exitosas: 'Lío embarazoso' y 'Si fuera fácil'.