Ya hemos hablado en otras ocasiones de la importancia de limpiar el rostro correctamente. Sin embargo, esta tarea puede resultar inútil si no limpias también tus brochas y pinceles de maquillaje. La manera más sencilla y económica es lavarlas con agua y jabón. Rosa Rosello, directora de formación de Druni, nos da las claves para hacerlo de la forma adecuada.
En primer lugar, pon un poco de jabón en un guante exfoliante o una toalla y ponlo bajo el grifo hasta que salga espuma. En su lugar, también puedes utilizar unas hojas limpiadoras. Una buena elección son las Dissolvable Brush Cleansing Sheets de Ecotools (5,45 €), que te permitirán utilizar menos agua.
A continuación, frota tus brochas haciendo movimientos circulares. Una vez hayas eliminado la suciedad, aprieta las brochas con un papel seco para minimizar la humedad y, por último, deja que se terminen de secar boca abajo. Eso sí, asegúrate de que la parte metálica se mantiene seca.
Si quieres acelerar el proceso, puedes utilizar un limpiador de brochas eléctrico como el de Beter. Solo tienes que echar agua y jabón y luego darle al botón. Tiene un precio de 20,95 €
Esta es una limpieza básica que deberías hacer al menos una vez por semana (si te maquillas a diario). Pero de vez en cuando es importante realizar una limpieza más profunda. Para ello, necesitas un producto específico como los que te traemos hoy. Solo tendrás que aplicar cualquiera de ellos sobre tus utensilios y luego secarlos igual que en el caso anterior.
El primero es el Brush Cleanser de Maiko. Se trata de un spray que retira el maquillaje y desinfecta las fibras de la brocha. Esto, además, prolonga su vida útil. Cuesta 5,95 €.
Otra opción es el Blendercleanser de Beauty Blender. Es un limpiador en formato líquido que elimina hasta la suciedad incrustada. Su precio es de 13,50 €.
20 de enero-18 de febrero
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