Alisado orgánico, uno de los mejores tratamientos para eliminar el encrespamiento

Para muchas, el encrespamiento es el principal problema a combatir cuando se trata de nuestro cabello. Lo intentamos con acondicionadores alisadores y otros productos de cuidado. Pero, cuando ya lo hemos probado todo, quizás el alisado orgánico sea el tratamiento al que tenemos que recurrir. Se trata de un tipo de alisado que transforma la melena para ofrecer un efecto antifrizz.

Aunque, por supuesto, tiene sus diferencias con otros de la misma categoría. En este caso, no es de esos que daña el cabello al contener una serie de ingredientes químicos agresivos. Todo lo contrario, está diseñado para reponer la salud capilar por completo. Así que, si tu melena necesita un rescate y no tienes forma de controlarla, te explicamos qué es el alisa de pelo orgánico, cómo se hace y todo lo que debes saber sobre él antes de pedir cita en la pelu.

El alisado orgánico es un tratamiento capilar con el objetivo de conseguir un cabello sin encrespamiento, más pulido y sedoso. A diferencia de otros alisados, esta técnica no es agresiva para el cabello, todo lo contrario, ya que más allá del alisado natural que proporciona, ofrece la reconstrucción de la salud capilar.

También conocido como taninoplastia, utiliza ingredientes naturales y orgánicos para conseguir que el pelo quede hidratado, brillante y más suave. Además, trabaja desde el interior para ofrecer propiedades al cabello sin alterar su condición natural, por lo que es apto para todo tipo de pelo. De las mejores opciones para conseguir mejoría a todos los niveles.

Este tratamiento cuenta con una gran variedad de propiedades. La principal, como ya hemos mencionado anteriormente, es su capacidad para suavizar la cutícula y reducir el encrespamiento . Además, estos efectos se hacen visibles de inmediato y necesita de mucho menos mantenimiento o cuidado que otros procedimientos de este estilo.

Tampoco rompe los puentes internos al no contener componentes químicos ni otros agresivos, por lo que no cambia la estructura y respeta la fibra capilar natural. Por otro lado, reconstruye, fortalece e hidrata debido a sus propiedades antioxidantes y regeneradoras. También despierta el brillo de la melena. Y, su resultado es de larga duración.

Por supuesto, cabe tener en cuenta la característica de que es apto para todo tipo de cabellos, al ser el alisado orgánico personalizable. Esto no es común a todos los métodos del estilo. Y, funciona tanto en cabello natural como en teñido. Pero, para realizarlo de la manera correcta, exige de un diagnóstico previo por los profesionales.

El procedimiento para realizar este tipo de tratamiento requiere de varias horas, ya que conlleva múltiples pasos y la necesidad de un trabajo profesional experimentado de gran exigencia. Lo primero es lavar el cabello con un champú especial que dilatan la hebra para que mejore la absorción del resto de productos.

Se continua con una crema alisadora cargada de ingredientes vegetales beneficiosos, entre los que se encuentra el tanino. Estos penetran hasta el interior y rellenan hasta el exterior, para conseguir los beneficios que ofrece el tratamiento. Esta fórmula se reparte con un peine de manera uniforme y se masajea.

Necesita de un tiempo de espera, de más o menos media hora, para que actúe con eficacia sobre toda la melena. Y, cada tanto, hay que estirar y volver a peinar para que se absorban los taninos como técnica de mejora de la penetración. Incluso hay casos en los que se requiere el empleo de un gorro térmico.

Una vez concluida la espera, se retira todo el producto, se seca y se cepilla. Para terminar, se usan planchas para el pelo que activen el tratamiento aplicado, pasándolas varias veces por cada mechón y a la temperatura correcta para planchas el pelo. Por lo general, el acabado de la taninoplastia suele durar de entre 4 a seis meses, pero puede prolongarse siempre que tengamos un buen mantenimiento.