La gran mayoría de los expertos coincide: no es bueno lavar el cabello muy a menudo. Y a pesar de que lo recomendable es hacerlo entre dos y tres veces a la semana, con la llegada de la temporada de playas y piscinas, esto se complica.
El cloro, la exposición solar, la sal marina, la humedad… Nuestro cabello sufre mucho en verano. La cutícula se abre con facilidad, el pelo es mucho más vulnerable y, si no tenemos cuidado, nuestra melena se vuelve opaca y sin brillo. Sin hablar del encrespamiento.
Por esa razón es importante protegerla con productos adecuados para su correcto mantenimiento. Durante los meses más estivales, el protector térmico y los protectores solares capilares se vuelven todo un imprescindible, ya que nos ayudarán a proteger el cabello de las radiaciones solares y de cualquier agente externo físico que pudiera debilitar su aspecto.
Si aumentas el número de lavados, escoge un champú de uso diario, ya que limpian con más suavidad sin ser tan agresivos con el cuero cabelludo. Busca aquellos que no contengan sulfatos y que incluyan ingredientes naturales como la avena o el aceite de oliva.
Sin embargo, existe un debate cada vez más polémico que gira en torno a si es mejor usar mascarilla o acondicionador. En este caso, cualquier experto coincide: lo mejor es combinarlos. «Partiendo de la base de que es importante no aumentar demasiado el número de lavados, la mejor opción es usar de forma alternativa el acondicionador y la mascarilla. Si te lavas el pelo cuatro veces a la semana, utiliza un buen acondicionador tres veces y la mascarilla una», nos explican los expertos de Llongueras.
Lo más importante en estos casos es asegurarte de que la cutícula está sellada para evitar que se parta o se rompa. «La hidratación de tu cabello es lo más importante. El acondicionador se recomienda para un uso más diario, y no es bueno abusar de la mascarilla porque deja de ser eficaz o su efecto se nota menos. Lo mejor es usarla una vez a la semana», comentan los expertos.
Por otro lado, recuerda que es bueno incluir otros productos y tratamientos que nos ayuden a proteger nuestros capilares y que eviten el encrespamiento al secarnos el cabello al aire o con la ayuda de un secador, como este tratamiento (casi) mágico que sella puntas. En verano y con nuestro cabello, más es más.
Mascarilla Suavizante de Moroccanoil. Enriquecida con ácidos grasos derivados del coco y manteca de argán, esta mascarilla suaviza, hidrata y controla el cabello rebelde y encrespado, mejorando su elasticidad.
Densifique Fondant Densité Acondicionador de Kérastase es un acondicionador especialmente diseñado para aportar densidad, hidratación, textura, cuerpo y mayor resistencia al cabello fino y debilitado. Contiene ácido hialurónico y un complejo de minerales exclusivos que fortalecen la estructura del cabello desde el interior.