Hibisco, el activo efecto bótox que difumina arrugas y reafirma para obtener una piel 10 años más joven

Astaxantina , ácido poliglutámico , retinal ... Actualmente se han popularizado este tipo de ingredientes super potentes y de rápidos resultados que son todo innovación y última tecnología en cosmética. De este modo, nos dejamos encandilar por esos nombres impronunciables y fórmulas avanzadas de alto rendimiento creyendo que, de esta forma, nuestros problemas de la piel tienen solución definitiva.

Y sí, estos activos son tan buenos como dicen, pero nos hacen dejar de lado y menospreciar a otros que se llevan empleando desde hace décadas e incluso siglos y, cuya eficacia se equipara a la de cualquier otro componente vanguardista. Si bien cada vez recibe más atención y mejor reputación la categoría de belleza natural, aún falta para que se la valore como se merece y por eso, hoy te convencemos de sus beneficios con uno de los ingredientes vegetales más poderosos que se incluye en todos los tratamientos de las famosas: el hibisco.

El hibisco es definido en la industria 'beauty' como el bótox natural. Casi milagrosa, esta planta tropical cuenta con una gran capacidad reafirmante y sus componentes son los mejores para tratar los signos de la edad.

Repleta de vitamina C, previene el envejecimiento al combatir los efectos perjudiciales de los radiales libres a la par que estimula la producción de colágeno para una piel más elástica, tersa y firme. También cuenta con altos niveles de otros antioxidantes como antocianina (un flavonoide que favorece la estabilidad del colágeno, potencia la elastina y promueve la renovación celular), betacaroteno (reparador de tejidos y reductor de inflamación) y miricetina (reduce el daño oxidativo y detiene la degradación de colágeno).

Básicamente, conserva la elastina en la piel al inhibir la elastasa, al mismo tiempo que restaura el colágeno, porque la piel se ve más rellena, firme y alisada sin arrugas, con mayor capacidad para la recuperación.

Entre otro de sus componentes se encuentran los alfahidroxiácidos (AHA), que exfolian suavemente la superficie del cutis para una textura aterciopelada, un tono uniforme y más claro, sin rastro de pigmentación o cicatrices, así como el control y prevención de brotes.

Aunque, los beneficios continúan, ya que el hibisco tiene magníficas propiedades hidratantes debido al mucílago, un poderoso emoliente que mantiene la humedad en las capas internas del rostro, aumentando la luminosidad y el aspecto relleno y jugoso.

Apto para todo tipo de pieles, incluso las más sensibles porque no tiene efectos secundarios, casi nunca provoca reacción alérgica y se puede emplear en las zonas más delicadas de la piel como es el caso del contorno de los ojos.

A esto se le suma su carácter polifacético por ser también un genial ingrediente para tratar el cuero cabelludo, cargado de aminoácidos, que regula la producción de grasa, elimina las acumulaciones, fomenta la salud, fuerza y elasticidad de los folículos pilosos y maximiza el brillo, mientras protege del daño y calma la irritación.

A partir de ahora, procura que este excelente y potente activo esté en las fórmulas que empleas para tu rutina de cuidado de la piel. Notarás la diferencia.