Isabel II en 1952. /
Nos encanta saber a qué huelen algunos rostros conocidos. Y es que, un perfume dice mucho más de nosotros de lo que pensamos y muchas veces es un claro reflejo de cómo somos. Es por ello, que nos encantan fichar las fragancias favoritas de personas influyentes. Y sí, entre ellos están las mujeres de la realeza.
Hemos descubierto ya qué perfume usa la reina Letizia o el de la reina Sofía , pero hoy queremos hablarte de una opción con mucha historia, de una fragancia que enamoró a mujeres con mucho nombre como es el caso de la mismísima Isabel II.
Nos referimos a algunas de las fraganicas de Guerlain, una firma que a mediados del siglo XIX era el proveedor oficial de las cortes europeas y que desde entonces no ha dejado de conquistar los sentidos del gotha. Todo comenzó cuando en el año 1853, Pierre-François-Pascal Guerlain creó la mítica L ́Eau de Cologne Impériale en exclusiva para la emperatriz Eugenia.
Las abejas eran el emblema oficial de Napoleón Bonaparte y cuando Eugenia de Guzmán Palafox y Kirkpatrick llegó al altar el 30 de enero de 1853 lo hizo con un vestido de novia que llevaba 20 abejas bordadas. El mítico frasco de abejas fue diseñado por la casa Guerlain ese mismo año como un guiño a la recién casada y nació bajo el nombre de L ́Eau de Cologne Impériale. Sus notas de limón, bergamota y romero pronto viajaron por todas las cortes europeas y Pierre-François-Pascal Guerlainascendió a «Perfumista Oficial de su Majestad».
Eau de Cologne Impériale, que se creó como encargo especial de la emperatriz Eugenia (114 euros)
Pero no fue la única, la reina Victoria de Inglaterra también se enamoró de las fragancias de Guerlain, quin creo para a joven reina un delicado bouquet floral bautizado como Bouquet de la Reine Victoria con motivo de su ascenso al trono en el año 1837.
Sissi, la emperatriz De Austria también mantuvo una estrecha relación con la Maison. En su caso, encontró en la Crème à la Fraise la solución a los estragos que las 8 horas diarias al aire libre dejaban en su piel. Esta crema fue creada por Guerlain en 1840 e hizo las delicias de la burguesía europea en una época en que la simple aparición de una peca o atisbo de bronceado en el rostro estaba muy mal vista. Su fórmula se servía a la acción antioxidante de las fresas para aclarar la piel y prevenir las manchas.
Isabel II descubrió uno de los aromas de Guerlain más míticos y lo incorporó para siempre a su tocador para pulverizarlo en sus momentos más íntimos y familiares. El perfume hace referencia a ese momento mágico que se produce entre el crepúsculo y la noche. Anís, bergamota, clavel, neroli, lirio, vainilla, benjuí y haba tonka son las notas que componen este perfume irresistible.
El perfume de Guerlain que usa Rania de Jordania y Máxima de Holanda.
Las reinas Rania de Jordania y Máxima de Holanda también figuran en la lista de royals fieles a los perfumes de esta marca. En este caso, ambas usan desde hace tiempo Samsara, creado en el año 1989 por Jean Paul Guerlain. Oriental amaderado y con un toque de vainilla, es un aroma sofisticado que abre con notas de bergamota y se asienta sobre notas de limón, melocotón, jazmín, rosa, ylang-ylang e iris.
Es de bien sabido que Kate Middleton utiliza Orange Blossom de Jo Malone London. Una fragancia en la que la flor de la clementina brilla sobre un corazón de azahar y lirio de agua, con cálidos matices de orris y vetiver balsámico. Una pura delicia. Meghan Markle, por su parte, también recurre a esta marca aunque ella prefiere Wild Bluebell.
Mary de Dinamarca se diferencia del resto de royals utilizando uno de los perfumes más clásicos de la historia: Chanel Nº5. Se trata de una fragancia conocida como la esencia de la feminidad, un bouquet floral aldehído sublimado por un frasco emblemático con líneas minimalistas.