Casada con Juan Abelló
Ana Gamazo fue una de las mejores amigas de Ira von Fürstenberg. /
Ana Gamazo es uno de esos nombres que lleva toda la vida asociado a la élite empresarial y aristocrática de Marbella. También de Madrid, donde reside. Pero la Costa del Sol siempre ha estado ligada de forma muy íntima a su familia. Su abuela Piedad de Yturbe y von Scholtz-Hermensdorff nació en la ciudad malagueña, y su madre, Francisca Hohenlohe, conocida como Pimpinela y fallecida en 2007, vivió allí gran parte de su vida.
Además, el abuelo y tío de Ana, Maximiliano y Alfonso de Hohenlohe, respectivamente, fueron los principales promotores de Marbella como centro de veraneo de la jet set internacional. Ana Isabel Gamazo de Hohenlohe-Langenburg , más conocida como Anna Gamazo, es la esposa del empresario y millonario Juan Abelló y es una de las mujeres más elegantes de la alta sociedad. La pareja tiene cuatro hijos –Juan Claudio, Alejandro, Christian y Miguel– y ocho nietos.
También millonaria por herencia familiar, en 2001 creó la Fundación Humanitaria Anna Gamazo Hohenlohe (AGH) para llevar a cabo proyectos solidarios en África. Junto a su marido posee una de las colecciones de arte más importantes de España y hace unos días acudió en Roma al funeral de la princesa Ira von Fürstenberg , fallecida el 19 de febrero.
Ana Gamazo y Juan Abelló se casaron el 1968 en la finca familiar El Queixigal, en Cebreros (Ávila). La novia escogió un precioso vestido en organza suiza bordada del modisto Miguel Castillo, que entonces tenía taller en París. Y llevó la tiara de los Hohenlohe , una corona de oro blanco con perlas, que han lucido todas las mujeres de la familia Hohenlohe.
Es una de las mujeres más ricas de España y una de las más elegantes en las bodas de mayor abolengo. Y junto a su marido posee la colección Abelló, de las más importantes del mundo en manos privadas. Pionera en el interés por la producción de artistas con pocas obras presentes en España, como Francis Bacon u otros pintores clave de las vanguardias históricas, sus fondos incluyen un valioso conjunto de dibujos del siglo XVI al XX, único en España.
Además Ana Gamazo creó su propia fundación en 2001, dedicada a los proyectos solidarios en distintos lugares de África, especialmente en Tanzania. Sus cuatro pilares de actuación son la educación, la salud, el medio ambiente y la protección jurídica a menores y otros grupos vulnerables. Y ha llevado a cabo trabajos en países como Camerún Chad, Egipto, Etiopía o Mozambique.
La aristócrata es prima de Hubertus de Hohenlohe , hijo de la recientemente desaparecida Ira von Fürstenberg y Alfonso de Hohenlohe, fallecido en 2003. Su madre Pimpinela y el mítico promotor de la Marbella de los años 60 y 70 eran hermanos, y siempre ha mantenido buena relación con esta parte de la familia.
De hecho, Gamazo fue una de las destacadas presencias en el funeral de Ira von Fürstenberg, celebrado en Roma el pasado 23 de febrero. Allí acompañó a su primo Hubertus –el otro hijo de Ira y Alfonso, Christoph, falleció en 2006– en la despedida de su madre, fallecida el pasado 19 de febrero.
Ana Gamazo, en el funeral de ra von Fürstenberg. /
La aristócrata será, además, la IV marquesa de Belvís. El título le llega tras la muerte de su hermana Alexandra, Sandra para la familia, en 2021. Al no haber estado casada –tuvo a su hijo Sandro tras una breve relación con el alemán afincado en Marbella Christian Bremme–, el título no pasará a su vástago, quién sí lo ha reclamado, sino a su hermana.
Un marquesado que destaca en esta familia aristócrata y muy próxima a la Familia Real. Tanto que los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia fueron los padrinos de boda de sus abuelos, Piedad de Yturbe y Scholtz y el príncipe Maximiliano Eugenio de Hohenlohe-Langenburg, quienes se casaron en 1921 en el Real Monasterio de la Encarnación de Madrid.
El pasado verano se supo que Ana Gamazo y sus hermanos Germán, marqués de Soto de Aller y conde de Gamazo, y Clara, dueños de un basto y millonario patrimonio, habían puesto a la venta un edificio entero ubicado en la calle Padilla, en el barrio de Salamanca de Madrid. Planteada como una estrategia para atraer inversores de lujo, el precio de salida rondaba los 80 millones de euros. Una generosa cifra que aumentará aún más la ya abultada economía de la familia Abelló-Gamazo, ya que la fortuna estimada de Juan Abelló, quien se convertirá también en marqués, está estimada en 2.800 millones de euros.
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