memorias malditas Espartaco Santoni, el playboy que arrasaba en Marbella: matrimonio atormentado con Tita Cervera, peleas de folclóricas y amantes en la ruina

Espartaco Santoni escribió un controvertido libro de memorias en el que contaba detalles nada edificantes de su vida en común con la baronesa Thyssen.

Espartaco Santoni y Carmen Cervera. / / GETTY

Juanra López
Juanra López

Espartaco Santoni fue un personaje con algunas luces y muchas sombras, a quien algunas de las mujeres que pasaron por su vida, como Carmen Cervera , ahora baronesa Thyssen, seguramente querrían olvidar. Pero lo que no se le puede negar al playboy y productor de cine es que gastó la vida a pasos agigantados. Cuando murió el 3 de septiembre de 1998, en Marbella, a consecuencia de una enfermedad del páncreas, dejó poco margen para lo que pudo haber hecho y se dejó en el tintero.

«He luchado contra la muerte y he perdido». Esto es lo que, según Jesús Gil, ex alcalde de Marbella y del Atlético , declaró que le había confesado Espartaco Santoni poco antes de morir, a la prematura edad de 61 años, aunque IMDB, la base de datos online de cine más importante y fiable del mundo, apunta a que tenía cinco más. Un pequeño detalle que puede considerarse una metáfora sobre su propia biografía, en la que se mezclan realidad con alguna que otra leyenda urbana.

Espartaco Santoni pareció poner más esfuerzos en construirse una leyenda que en otras facetas en las que destacó mucho, como la de productor de cine: fue esencial, al igual que Emiliano Piedra, para que se llevara a término la emblemática Campanadas a medianoche de Orson Welles, por poner solo un ejemplo, aunque también estuvo detrás de películas con menor valor artístico como Pena de muerte, Infamia o Las melancólicas. Como actor tampoco es que brillara especialmente y su último papel podemos encuadrarlo en lo mitómano que es Santiago Segura , que le brindó una oportunidad en Torrente, el brazo tonto de la ley poco antes de su muerte.

Un libro de memorias nada elegante en el que habla de sus artes de seducción

No hay nada mejor para desarmar a tus detractores que ir con tu verdad por delante. Por eso parece una genial ocurrencia que titulara su libro de memorias No niego nada. Quizás llevó la sinceridad, a veces sobrevalorada, a terrenos pantanosos como los detalles tan poco caballerosos que dio de su relación con Carmen Cervera , con quien estuvo casado entre 1975 y 1978.

La baronesa Thyssen afirmaba que su matrimonio no fue válido porque él continuaba casado con la actriz y modelo mexicana Tere Velázquez, quien falleció con solo 55 años a consecuencia de un cáncer de colon el 7 de enero de 1998. Esta dejó en su haber títulos tan populares como Sube y baja con Cantinflas, Azahares rojos con Paco Rabal y El pecado de una madre al lado de la gran estrella Dolores del Río.

Nieves Herrero habla sobre este matrimonio en su libro La baronesa (Penguin) y esta es su impresión, que comentó en una entrevista con Mujerhoy: «Espartaco es una vida que hubiera querido borrar, pero está ahí. Dice que cuando él murió se le saltaron las lágrimas, pero es una persona que le hizo vivir una vida que no había tenido hasta entonces: él en la cárcel dos veces, viviendo sin pagar los alquileres, teniendo que pedir ayuda a su madre. Les cortan el teléfono, el agua caliente, le embargan el piso. Pasó del cielo al infierno. Pasa de estar en La Meca del cine, codeándose con los grandes de la pantalla, al infierno absoluto».

Carmen Cervera, la baronesa Thyssen, en su casa en los años 90. / gtres

Marujita Díaz , con quien rodó Pelusa y quien tampoco se caracterizaba por la diplomacia ni por una elegancia retórica versallesca, no dejó con sus declaraciones en buen lugar a Carmen Cervera. La intérprete de películas como La casta Susana y El pescador de Coplas aseguraba que había continuado con Santoni desde que se casaron en Venezuela hasta que él murió, lo que tampoco dejaba en mejor posición a su última esposa, Eva Medina. Es más, la mujer que interpretó con gran patriotismo «banderita tú eres roja, banderita tú eres gualda» decía sin rubor que ninguna otra le había querido como ella.

Respecto a Carmen Cervera Marujita manifestó que mientras estaba casado con la baronesa y coleccionista de arte pasaba los fines de semana con ella. También dejaba en un segundo plano durante la agonía del actor a su viuda, Eva Medina, que se había casado con él dos años antes de su muerte, en 1996, después de una larga relación. Posteriormente Eva tuvo una fugaz historia sentimental con José María Cano, ex integrante de Mecano y ahora vive completamente apartada de la vida pública.

Otras mujeres de su vida: Analía Gadé, Ursula Andress y Massiel

«Pasional», «divertido», «una persona que deja huella». Estas expresiones utilizó la recordada actriz Analía Gadé, que compartió reparto con él en la película Los melancólicos, para referirse a Espartaco Santoni , en una entrevista que concedió a El Mundo en 2011, en la que también manifestó que el que había sido su pareja ocasional «no tuvo demasiada suerte, he pasado con él momentos estupendos que guardo en mi memoria».

Analía Gadé recibió de regalo un abrigo de Pieles que Espartaco Santoni, sin reparos ante nada, habría quitado a Bárbara Rey . También mantuvo affaires con la chica Bond Ursula Andress, la actriz austriaca Marisa Mell y Massiel, a quien dedicó esta descripción: «Exuberante y ardiente, una devoradora de hombres».

No podemos dejarnos en el tintero a su primera mujer, María de los Ángeles Seijo, con quien se casó con 17 años y con quien tuvo dos hijos, y con Naty de las Casas, una sofisticada dama de la alta sociedad caraqueña, en quien se refugió tras romper con Carmen Cervera. Sus restos mortales permanecen en Marbella, ciudad de la Costa del Sol , en la que fue un gran animador de la vida nocturna y por la que pasó los que quizás no fueron los mejores años de su vida, pero puede que los más plácidos.

20 de enero-18 de febrero

Acuario

Con el Aire como elemento, los Acuario son independientes, graciosos, muy sociables e imaginativos, Ocultan un punto de excentricidad que no se ve a simple vista y, si te despistas, te verás inmerso en alguno des sus desafíos mentales. Pero su rebeldía y su impaciencia juega muchas veces en su contra. Ver más

¿Qué me deparan los astros?