Por qué llaman La Mesías a Isabel Díaz Ayuso: las claves del misterioso jersey rojo viral de la presidenta

Tenemos nueva foto para la historia de la comunicación de Isabel Díaz Ayuso, la política que más partido le está sacando a su imagen en esta década. Mientras otras colegas se esfuerzan por vestirse institucionales e intachables, la presidenta de Madrid se presta a saltarse el guion por una buena causa: su popularidad. Su irrupción con el típico 'ugly sweater' que los anglosajones llevan en Navidad es un look para nota . Y puede convertirse en una tradición tan esperada como el desnudo vestido de Cristina Pedroche en las Campanadas.

A los efectos de 2023, la Navidad comenzó cuando la presidenta de la Comunidad de Madrid irrumpió en nuestras vidas con el típico jersey rojo con grecas, muy propio del invierno y su fin de año . Ayuso puede robarle a El Corte Inglés, incluso al alcalde de Vigo, el anuncio del comienzo de estas entrañables fechas. Puede ser nuestra Ana Obregón invernal: su posado con un 'ugly sweater' nos dará permiso para comprar turrones y desempolvar la decoración navideña.

Nada más deseable para un político que asociarse a los valores navideños, sobre todo en un contexto político tan bronco, donde el diálogo político ha sido sustituido por un intercambio de zascas a cual más bruto. Lo cierto es que Isabel Díaz Ayuso no pierde ocasión de surfear las olas de los buenos sentimientos, cuanto más tradicionales mejor. Recordemos aquella portada en la que apareció de luto y con las manos sobre el pecho, como una Dolorosa, en plena pandemia.

Aquella operación de imagen fue un ensayo para el éxito que ahora vemos. Si entonces se criticaron trazas de oportunismo por valerse de circunstancias trágicas, nada se puede reprochar por celebrar la Navidad . Evidentemente, el equipo de la presidenta de la Comunidad de Madrid tomó buena nota de cómo Manuela Carmena se benefició del poder de lo visual durante su campaña y posterior mandato. Gracias a la colaboración desinteresada de decenas de dibujantes, las redes se llenaron con cientos de retratos ilustrados suyos que dispararon su popularidad.

Isabel Díaz Ayuso no dispone de este ejército de colaboradores desinteresados, pero ni falta que le hace. Su aparición con el 'ugly sweater' de Navidad supone un golpe de efecto genial. Y baratísimo. El ya famoso jersey rojo es un diseño para Metro de Madrid que se vende como 'merchandising' por 24,95 euros. «Se trata de una prenda de edición limitada con dos diseños diferentes (los colores corporativos del rombo, rojo y azul) que captan la esencia y el encanto de la red de transporte más emblemática de la capital española», aseguran.

La Presidenta de la Comunidad de Madrid decidió ponerse el comentado jersey para inaugurar el Belén expuesto en la Real Casa de Correos, un montaje faraónico sobre una plataforma de 280 metros cuadrados que cuenta con 400 figuras, nueve escenas principales y otras tantas secundarias. Aún así, el jersey rojo de Isabel Díaz Ayuso ha conseguido eclipsarlo. No solo por la sorpresa de contemplar a la presidenta con un look tan familiar y popular, sino por el mensaje que ha dado con él puesto.

En un giro de guión que pocos vieron venir, la presidenta de la Comunidad de Madrid quiso interpretar los valores tradicionales del catolicismo y el mensaje de Jesús como «revolucionario». Algo no fue del todo bien, sin embargo, en su discurso, que evidentemente no pudo preparar. Isabel Díaz Ayuso lo leyó con dificultad y tropezó en momentos clave, de forma que el mensaje no resultó tan convincente ni comprensible como pudiera haber sido. Y, precisamente por ello, se convirtió en contenido viral en las redes.

«Su mensaje fue revolucionario, un antes y un después en la historia de la humanidad: Amaos los unos a los otros. Nuestras raíces católicas universales nos recuerdan que los hombres nacemos ante todo libres. Esa es la clave de la civilización cristina. El hombre es libre hasta para decirle a Dios que no. Incluso para el mal más absoluto que supone el terrorismo», leyó con cierta dificultad, Isabel Díaz Ayuso.

Una pena que este mensaje errático, que además interpreta el mensaje del catolicismo de manera 'sui generis', opaque la extraordinaria maniobra de imagen que se ha llevado a cabo con el jersey de Navidad. Si Isabel Díaz Ayuso se hubiera conformado con encarnar los buenos deseos de estas fiestas con un mensaje tierno, cariñoso y cuqui, se hubiera metido sin dificultad en el bolsillo a su público más crítico. Y habría puesto una pica en la iconografía pop. Algo al alcance de pocos.

La confusión de sentido entre un mensaje católico muy tradicional y un jersey de Navidad tan propio del consumismo contemporáneo global hizo que las redes calificaran a Isabel Díaz Ayuso como 'la Mesías', en una referencia a la exitosa serie de Javier Calvo y Javier Ambrosi, los Javis . Trata acerca de una madre enajenada por la religión que hace de sus ocho hijos mensajeros de Cristo. Concedamos, al menos, ironía a la imagen de una Isabel Díaz Ayuso arrebatada por el catolicismo, pero vestida a lo Bridget Jones.

El jersey rojo de Navidad que tan oportunamente ha lucido Isabel Díaz Ayuso pertenece a ese universo de los 'ugly sweaters' o jerséis feos que, sobre todo en la cultura anglosajona, se lucen en las entrañables fiestas. Denotan sentido del humor, pues se trata de que el jersey sea verdaderamente feo hasta el punto del ridículo, como bien se mostraba en la famosa escena de 'El diario de Bridget Jones' en la que Mark Darcy (interpretado por Colin Firth) aparecía en una fiesta luciendo un reno tricotado.

Aunque la versión que ha lucido Isabel Díaz Ayuso es la menos ridícula en el universo de los jerséis feos de Navidad, no deja de ser confuso que la presidenta de la Comunidad de Madrid inaugure un Belén vestida con el equivalente textil al universo simbólico que representa Papá Noel, el 'enemigo' de nuestros tradicionales Reyes Magos. Y, además, que lea un discurso que exalta su propia interpretación de las esencias del catolicismo.

Pero esa ausencia de coherencia entre lo que se dice y lo que se ve, a veces entre lo que se dice y lo que se hace, es lo que mueve la viralidad. En ese sentido, la estrategia de Isabel Díaz Ayuso para irrumpir en las redes cuando lo encuentra oportuno es perfecta. La maniobra tiene, sin embargo, su lado oscuro, pues la figura de quien ha de simbolizar lo uno y su contrario se desgasta por la vía del meme y pierde credibilidad. Sobre todo, entre las generaciones digitales que manejan a la perfección los códigos simbólicos de las imágenes. Y que ya no son solo las jóvenes: los millennials ya cumplen 40 años.