Pablo de Grecia y Marie-Chantal Miller ejercen de jefes de la casa real griega y reyes en el exilio, aunque la primogénita de Constantino de Grecia y Ana de Dinamarca fue Alexia. /
La describen como «princesa en chanclas» y no se trata de ninguna maldad. Alexia de Grecia (57 años) puede presumir de un doble parentesco royal, por parte de su padre, el fallecido rey Constantino, y por parte de su madre, la hermana de la reina Margarita de Dinamarca. Sin embargo, su día a día sucede más cerca del mar y las instalaciones deportivas que de las fiestas de lujo, alfombras rojas VIP y cacerías en la campiña británica que frecuenta Marie-Chantal Miller , con muchas menos credenciales royal.
A los efectos, Pablo de Grecia y Marie-Chantal Miller parecen dispuestos a tomar el relevo como jefes de la casa real griega, un papel que tiene mucho que ver con su constante presencia en los alrededores de la familia real británica y en los círculos de la élite de Londres y Nueva York. Alexia de Grecia , aunque primogénita de la familia y heredera, prefiere no figurar. Su vida es otra.
La presencia pública de Alexia de Grecia se incrementó ya en su juventud, en cuanto se visualizó como amiga y confidente de la infanta Cristina , en sus locos años en la Barcelona olímpica. Ambas compartieron piso antes de casarse y vivieron sus aventuras por tierra y, sobre todo, por mar. Aficionadas a la vela y, en general, a todos los deportes relacionados con el agua, Alexia encontró en el entorno deportivo a su gran amor: el arquitecto canario Carlos Morales (52).
Para entender un poco la decisión de Alexia de Grecia, esta retirada total de sus hipotéticas obligaciones como jefa de la casa griega, conviene quizá tener en cuenta el conservadurismo de esta familia real, donde las mujeres van siempre dos pasitos por detrás de ellos. También su infancia, marcada por la tragedia de un exilio muy doloroso. La niña Alexia vivió en Londres en una familia doliente por haber perdido su país.
Al llegar a Barcelona y reintegrarse en la familia real española, Alexia tuvo que compatibilizar sus ganas de divertirse con la constante vigilancia de la prensa rosa. Estudiaba Magisterio, aunque ya se había titulado en Pedagogía, y sobre todo salía con la infanta Cristina y su pandilla. Vivió los años dorados de la ciudad condal y allí se enamoró de Carlos Morales, guapísimo y de una poderosa familia canaria. Fue en unas regatas en 1996: él era integrante del equipo preolímpico en la categoría Tornado. Se casaron en 1999.
Desde 2003, Alexia de Grecia y familia viven en Yaiza, una localidad de la isla de Lanzarote, en la que se refugiaron de la constante atención de la prensa barcelonesa. Junto a Carlos Morales y sus cuatro hijos, disfruta de una gran mansión frente al mar en Puerto Calero y de la práctica de todo tipo de deportes. Alexia compite además en triatlones (con pruebas de natación, bicicleta y atletismo), mientras sus hijas se decantan por la natación artística en un club canario. Pero, ¿trabaja?
El que trabaja, y con relativo éxito, es Carlos Morales, quien ha abierto su propio estudio de arquitectura con trabajos ya reconocibles como el Palacio de Congresos, la marina de Lanzarote y varios resort de lujo. Con un activo superior a los dos millones de euros, su estudio declaró en el ejercicio de 2018 beneficios cercanos a los 80.000 euros. Además, participa en otra compañía dedicada al mercado inmobiliario, del que no constan datos económicos.
Alexia de Grecia no desempeña empleo conocido, algo que sí sucedía en su etapa barcelonesa. De hecho, la princesa griega estuvo trabajando en la Fundación Catalana de Síndrome de Down, dada su especialización en la docencia para estos niños. Ahora, la hija mayor de Constantino de Grecia y Ana de Dinamarca parece entregada al universo deportivo: es presidenta del club de natación artística donde nadan sus hijas Arrieta (21), Ana María (20) y Amelia (15): el CD Pingüinos de Arrecife.
Debido a su papel como presidenta del club, Alexia suele conceder entrevistas a medios locales, relacionadas sobre todo con las competiciones y actividades relacionadas con la natación. «La isla te pide a hacer deporte», suele explicar la confidente de la infanta Cristina, que ha completado varias travesías a nado a mar abierto en las distintas islas canarias, además de sus triatlones.
Con todo, ha habido también sobresaltos en la vida de Alexia y Carlos, pues este fue investigado en 2009 por un posible delito de corrupción inmobiliaria, que terminó con una condena de siete años al expresidente del Cabildo insular, Dimas Martín, y al alcalde de Yaiza, José Francisco Reyes. Este otorgó a Morales la licencia para construir su mansión en un terreno que no era urbanizable. El problema continúa abierto, pues en 2020 la Guardia Civil volvió a denunciar la construcción.