Qué fue de Angela Kelly, la amiga de Isabel II desahuciada por Carlos III: nueva casa, ley del silencio y cameo en 'The Crown'

Corría el mes de mayo de 2023 cuando la que durante veinte años fuera modista y fiel mano derecha de la reina Isabel II, Angela Kelly, recibía la noticia de que Carlos III la iba a expulsar de su casa a la sombra del Castillo de Windsor, donde llevaba años residiendo por cortesía de su antigua patrona. Del mismo modo, el nuevo ocupante del trono le cortaba también la línea de su teléfono de trabajo, según confirmaba ella misma.

Kelly, de 65 años, publicaba una conmovedora foto de su jardín en una cuenta de Instagram que ahora aparece como desaparecida, diciendo a sus amigos: «Preparándome para decir adiós. Por fin me mudo a mi nueva casa, a la que podré llamar Mi Casa. Mi teléfono del trabajo ha sido desconectado, estoy deseando empezar mis nuevas aventuras».

Entre crípticos mensajes en sus stories, supuestamente destinados al nuevo jefe de la Casa Real, unas fotos publicadas por el 'Daily Mail' mostraban a la modista al borde las lágrimas cargando sus pertenencias en una furgoneta blanca cuando por fin realizó su mudanza. Almohadas, un colchón y árboles de su jardín fueron algunos de los objetos que se llevó de su residencia de Windsor.

Sin embargo, pese a la relación de Carlos III con la asistente de su madre , este decidió cumplir la promesa de la fallecida monarca de alojar de por vida a su entregada empleada mandando comprar discretamente una casa para ella.

Pero este regalo no le salió gratis a Kelly. Se cree que forma parte de un acuerdo que le prohíbe compartir más secretos reales, después de que ya publicara dos libros con intimidades sobre su trabajo junto a Isabel II y trascendiera que tenía el permiso de la reina para escribir un tercero. Una fuente bien informada calificó el acuerdo de confidencialidad de «orden de silencio» que prohibía a la modista utilizar las palabras «rey» y «palacio» con fines comerciales.

La nueva residencia de Angela Kelly se encuentra a unos 250 km al norte de Windsor y goza de unas vistas impresionantes de las colinas. Pagada con cargo a la Familia Real, se cree que la propiedad revertirá a la Corona cuando Kelly fallezca.

El bungalow, valorado en medio millón de euros, cuenta con tres habitaciones, un amplio salón con chimenea de gas, un acogedor comedor y una cocina abierta. Como ella misma aseguró en otra publicación en sus redes sociales, la casa en la que habita ahora está «más cerca de Sheffield y de mi familia».

Desde su mudanza, la modista ha permanecido lejos de los titulares y no ha concedido entrevistas. Lejos quedan los tiempos en los que era una de las más fieles confidentes de la difunta Reina. Nacida en Liverpool, comenzó su carrera como modista de la reina en la década de 1990 y ascendió hasta convertirse en la funcionaria de mayor rango a cargo del vestuario, las joyas y las órdenes oficiales de la monarca. En 2018 incluso se unió a ella y a la editora de 'Vogue' Anna Wintour en la Semana de la Moda de Londres .

También fue una de las pocas personas que pasó junto a ella el confinamiento de 2020. Pero cuando regresó a Windsor tras la muerte de su jefa, cargada con las pertenencias de la reina, las cerraduras de los apartamentos reales del castillo habían sido cambiadas, poniendo fin a su acceso sin restricciones.

Nombrada miembro de la Real Orden Victoriana en 2012, fue uno de los pocos miembros del personal que estuvo al lado de la Reina durante sus últimos días. Pero Kelly a menudo molestaba a sus compañeros y era apodada «AK-47» por su mal genio.

Angela Kelly, a la que los expertos en la realeza consideraban más cercana a la difunta reina que cualquier otro miembro de su personal, hizo una breve aparición como personaje en el final de 'The Crown' . Una especie de cameo que llegaba tras la polémica generada cuando el príncipe Harry detalló un enfrentamiento con ella por una tiara en sus memorias, 'Spare'.

Apodada como el 'Tiaragate' por la prensa, los rumores de un supuesto encontronazo con la modista sobre la tiara de boda de Meghan Markle prestada por la reina Isabel habían circulado desde 2019, pero el duque de Sussex dio su propia ersión de los hechos en su autobiografía, describiendo a Kelly como una «buscapleitos».

Su estrecha relación con Isabel II se reflejó en el último episodio de la serie de Netflix, aunque no se hacía referencia a ella por su nombre. El capítulo comienza con la reina Isabel, interpretada por Imelda Staunton, despertándose en el palacio de Buckingham antes de que una ayudante rubia con un marcado acento de Liverpool seleccione, planche y arregle su ropa.

La actriz Lizzie Hopley se mete en la piel de la modista, a la que vemos hablar con la reina sobre su agenda del día de una manera informal, muy diferente a las interacciones de la royal con otros miembros del personal en la serie, aludiendo a la cercanía que se rumorea de sus homólogas en la vida real.