La opinión pública ve a los dos duques de Sussex como un peligro para la monarquía británica: sus maniobras por la espalda no gustan nada ni en Buckingham ni fuera de palacio. / getyt images

COMERCIALIZAN LA REALEZA

Por qué Carlos III no les quita sus títulos a Meghan y Harry: aumenta la presión para expulsar a los Sussex

El rebranding del website de los duques de Sussex, con escudo de armas y el azul real, ha indignado a la opinión pública del Reino Unido. Muchos que se preguntan por qué el rey Carlos no pone fin a la ambición de Meghan y Harry.

Las maniobras al límite de lo admisible de los duques de Sussex pueden estar tocando techo en lo que se refiere a la opinión pública británica. Lo que ha terminado de elevar la tensión al respecto de Harry y Meghan es su nuevo website, una reactivación de Sussex.com que incluye un lavado de imagen prácticamente presidencial, por no decir directamente real.

Sobre un fondo azul pavo real, el azul monárquico por excelencia, el polémico matrimonio se anuncia como príncipe Harry y Meghan, precedidos por un escudo de armas que es el que ella recibió al entrar en la familia Windsor. Todo ello se ha interpretado como una flagrante ruptura del compromiso que los duques de Sussex acordaron con la reina Isabel II cuando abandonaron su actividad de representación de la familia real británica. Entonces, aseguraron que no utilizarían su estatus con motivos comerciales. Esto puede abrir otra guerra interna.

La famosa reunión de Sandringham sirvió para que Meghan Markle y el príncipe Harry renunciaran, además, a utilizar el título de Alteza Real para sus negocios o a facilitar ningún contacto de los miembros de la familia Windsor con el mismo objetivo. También tuvieron que renunciar a desactivar su website oficial, sussexroyal.com. De ahí el lanzamiento de Archewell, su fundación, para servir de plataforma para sus negocios.

Sussexroyal continúa suspendido, pero Archewell ha sido descartado y ahora todo lo que se refiera a Harry y Meghan pasa por sussex.com, un website cuya imagen parece querer reforzar el rango 'royal' de la pareja. Además, justo durante un tour por Canadá para publicitar los Juegos Invictus, una visita polémica porque el rey Carlos III ha tenido que suspender su visita al país por el tratamiento contra el cáncer y se teme que Harry pretenda, de alguna manera, sustituirle desde cierta 'institucionalidad' de sus mensajes.

La opinión pública pide un correctivo para los Sussex

Evidentemente, la opinión pública a reaccionado a este panorama con intensidad. Y, de hecho, medios de comunicación tan influyentes como 'The Telegraph' o 'Daily Mail' han lanzado piezas periodísticas preguntándose hasta qué punto puede detenerse la rentabilización de los símbolos propios de la Corona en un website privado. Crece la presión sobre el rey Carlos III para que tome cuentas en este asunto. Hugo Vickers, biógrafo real, confirma que la impresión en Buckingham Palace es que «tratan de comercializar con su estatus real».

Los columnistas estrella del 'Daily Mail' han sido los más duros contra los duques de Sussex y han pedido, directamente, que el rey Carlos les desposea de sus títulos. No es la primera vez que esta petición llega a la prensa, pero ahora no son los comentaristas más radicales, como sucedió con el estreno en Netflix del famoso documental de los Sussex. Entonces, Piers Morgan dijo: «El rey Carlos necesita despojar a estas dos ratas venenosas de todos los títulos y lazos restantes con la familia real y debe hacerlo rápido antes de que destruyan la monarquía».

Los duques de Sussex, Harry y Meghan, trataron de triunfar como 'celebrities' con un plus aristocrático. Ahora ven claro que lo que les funciona es su conexión con la familia real. / getty images

¿Por qué no toma Carlos III la iniciativa para retirar el título a los duques de Sussex? Desde 'The Telegraph' sostienen que Buckingham Palace no quiere ser la mano que ejecute lo que puede ser considerado «una venganza». De hecho, se sobreentiende que el uso del escudo de armas no entró en el famoso cónclave de Sandringham y, aunque estén indignados, «sus manos están atadas». También es importante considerar lo que sucedió con el otro 'royal' cuestionado por la opinión pública británica: Andrés, el duque de York, acusado de participar en una red de abuso y tráfico de menores.

Isabel II despojó a Andrés del título de Alteza Real y de sus títulos militares y patrocinios reales, pero no del ducado de York. Con el agravante de que 9 de cada 10 residentes de York defendían que fuera desposeído del mismo y una diputada representante del distrito pidió directamente al hijo de la monarca que renunciara a su título. Es cierto: no es tan fácil revocar un título como concederlo. Esto puede hacerlo directamente el soberano, pero para revocarlo se requiere la aprobación de una ley en las dos cámaras del Parlamento. Cosa bastante pantanosa y difícil.

Meghan se presenta a sí misma como influyente global

Lo cierto es que los Sussex no se privan de presentarse de forma llamativamente idealizada al mundo, superando con mucho las atribuciones que se les supone a los monarcas. Harry se describe como «humanitario, militar veterano, defensor de la salud mental y activista medioambiental», mientras que Meghan Markle se ve como «feminista y defensora de los derechos humanos y la igualdad de género», además de « una de las mujeres más influyentes del mundo».

La inmodestia ha inspirado a los comentaristas reales más ácidos a reformular esta visión idílica de sus propias personas. «Sin la familia real, Harry sencillamente sería un 'ligeramente grueso y calvo ex soldado', mientras que Megan se quedaría en 'moderadamente atractiva y no muy exitosa actriz», ha considerado Sarah Vine, columnista estrella en 'Daily Mail'. Parece que Carlos III, concentrado en el tratamiento contra el cáncer, va a pasar página de esta nueva jugarreta de los Sussex. Desde la prensa, se observa como «una manera de menoscabar la autoridad del rey».