El rey Carlos III de Inglaterra en una imagen reciente. /
Las palabras alentadoras de la reina Camilla , su intención de participar en el desfile Trooping the Colour, los preparativos para su largo viaje a Australia en otoño... Las señales de que el tratamiento contra el cáncer de Carlos III marcha por buen camino eran suficientes como para que sus compatriotas respiraran tranquilos sobre la salud del monarca.
Los medios ingleses coincidían incluso en que el padre de Guillermo y Harry está «impaciente por tomar las riendas» de nuevo al frente de la monarquía de su país». Pero nuevas informaciones han hecho que la buena salud del soberano se vea ahora en entredicho.
Según publican el medio 'The Daily Beast', el estado de salud del rey Carlos III preocupa a su círculo más cercano y al palacio de Buckingham, mientras sigue luchando contra un tipo de cáncer no revelado. «Hablando con amigos del Rey en las últimas semanas sobre su salud, la respuesta más común es 'no es bueno'», se puede leer en este diario.
Una fuente cercana al monarca afirmaba también que Carlos III «está decidido a superarlo y está poniendo toda la carne en el asador», añadiendo posteriormente que «todo el mundo se mantiene optimista, pero él está realmente muy mal. Peor de lo que parece«.
Otra cronista habitual de la realeza británica como es Tina Brown también hablaba sobre los problemas de salud del monarca recientemente desde sus redes sociales, escribiendo que el cáncer de Carlos III ha puesto al príncipe Guillemo y a Kate Middleton y a «en una aterradora proximidad al ascenso al trono, justo cuando esperaban un lapso de varios años para criar a sus hijos lejos del foco mediático. Esa perspectiva, según me han dicho, les está causando una intensa ansiedad».
El 'Daily Beast' también sorprendía al informar de que se están revisando los planes funerarios en el caso de una hipotética muerte del Rey, cuyo nombre en clave es 'Operación Puente Menai' . Al parecer, también estaría circulando entre las atas instancias británicas otro documento en el que se expone lo que salió bien en el funeral de la reina Isabel en septiembre de 2022 y lo que se podría hacer mejor la próxima vez que muera un monarca.
Aunque es habitual que los planes funerarios reales se revisan constantemente, un antiguo miembro del personal admitió en particular al citado medio que los problemas de salud de Carlos han dado a estos documentos «un matiz y una urgencia diferentes».
El rey Carlos III junto a su hijo, Guillermo de Gales y su nuera, Kate Middleton. /
«Se han sacado de nuevo a la luz los planes y se están actualizando activamente», explicaba esta fuente. «No es más de lo que cabría esperar, dado que al Rey se le ha diagnosticado un cáncer. Pero su difusión sin duda es un asunto importante«.
El palacio de Buckingham anunció en febrero que, tras ser operado de un agrandamiento benigno de próstata, se descubrió que Carlos III padecía cáncer. En un comunicado se señalaba que el actual ocupante del trono, de 75 años, se sometería a un tratamiento y que los médicos le habían «aconsejado que pospusiera sus obligaciones de cara al público».
Mientras sus problemas de salud siguen alejándole de recuperar a tiempo completo sus compromisos oficiales, el monarca sigue preocupado también por la salud de su nuera, Kate Middleton, y en medio de su larga guerra fría con su hijo Harry. En ese sentido, Carlos III había tratado de estrechar lazos con los Sussex invitándoles a pasar las vacaciones de verano en Balmoral, con el gran deseo de ver a sus nietos Archie y Lilibet.
El rey Carlos III y su hijo, el príncipe Harry en una imagen de archivo. /
Pero los cronistas habituales de la actualidad de los Windsor dudan que ese reencuentro familiar vaya a ser posible. Durante una entrevista en 'TalkTV', la periodista Charlotte Griffiths dudaba de que Meghan Markle acepte la invitación. «Incluso si Harry viene, no puedo imaginar un mundo en el que Meghan venga con los niños, es realmente triste».
Para Griffiths, «de ninguna manera» la antigua actriz estará interesada en ir a Balmoral. «A ella nunca le gustó mucho la vida rural de la realeza. ¿Te imaginas a Meghan paseando por las Highlands todo el verano? La verdad es que no», afirmaba tajante, echando por tierra las esperanzas de un monarca al que se califica de «desesperado» por volver a ver a unos exiliados nietos a los que apenas conoce.