Esta es, sin duda, la etapa más tranquila de todas las que ha vivido la nieta mayor de Franco, su favorita, Carmen Martínez-Bordiú. Su nuevo hogar, desde agosto de 2019, está en Sintra, en la costa de Portugal, en una casa de 600 metros cuadrados dos hectáreas de terreno, frente al Atlántico. Pero, Carmen Martínez-Bordiú, recién cumplidos los 71 años el pasado mes de febrero, no está sola.
Comparte su vida con el «coach» Timothy McKeague, un atractivo neozelandés 35 años menor que ella. La prensa española ha publicado varias fotografías de la pareja, en estos años, y en ellas hemos podido comprobar la felicidad de Carmen junto a su pareja y la tranquilidad de su nuevo capítulo vital, inaugurado hace dos años y medio. Ya lo dijo en la revista ¡Hola!, tras instalarse en Portugal: Solo pido que todo el mundo se olvide de mí. Quiero desaparecer.
Sintra, situada en un parque natural, está a media hora en coche de Lisboa, la capital, y es célebre por sus palacios aristocráticos del siglo XIX y sus jardines. En la ciudad viven o tienen casas de vacaciones estrellas de cine como Monica Belluci, Scarlett Johanson o Michael Fassbender, el diseñador de zapatos francés Christian Louboutin o el interiorista Philippe Starck. Carmen ocupa su tiempo, entre otras cosas, haciendo senderismo y paseando por la playa.
Carmen conoció a su actual pareja en 2017, durante un viaje a la Costa Azul. Ella misma lo contó en la revista ¡Hola!: «Él estaba trabajando para un amigo mío. Yo llegaba muy cansada porque me había cambiado de casa en Madrid, había vendido la de Santander y estaba mal físicamente. Así que él me puso en forma: caminamos mucho, hice yoga con él... y nos conocimos. Luego vino a Madrid y nos fuimos de viaje. Así empezó todo».
Carmen vendió sus últimas propiedades en Cantabria, donde había vivido con su tercer marido, y desapareció de España. Sin embargo, parece que la nieta de Franco no está sola en Sintra, sino que disfruta de la proximidad de varios amigos. Su pareja es un gran practicante del surf y está a una hora y cuarto en coche de la playa de Nazaré, una de las más famosas en el mundo para los surfistas.
Parece que la herencia de su madre, fallecida en 2017, le permitió también este cambio de vida. Portugal tiene muchas ventajas para Carmen: por un lado, los beneficios fiscales que otorga a los residentes no habituales, y, por otro, el total anonimato. Así que Carmen, estrella de las revistas del corazón durante toda su vida, ya no necesitaba los posados y las entrevistas exclusivas de la revista ¡Hola! para seguir adelante. Salió de la empresa familiar con la que los nietos de Franco gestionan su patrimonio. Su nueva vida le ha permitido también renovar su figura, como demuestran unas fotos suyas en bikini que se publicaron el pasado mes de febrero.
Es innegable que Carmen vive una segunda juventud. Se la ve contenta, relajada y apartada de todas las polémicas, desde hace cuatro años. Hoy es la nueva Duquesa de Franco, título que ha heredó de su madre, Carmen Franco, cuando esta falleció. Su vida diaria está centrada en la meditación, el yoga y los largos paseos. Eso sí, viaja a menudo a Madrid y a Burdeos para visitar a sus hijos Luis Alfonso y Cynthia, y a sus nietos