La visita sorpresa de Catalina Amalia de Orange a Madrid con sus amigas: sabemos dónde ha estado de compras

Desde finales del año pasado, Catalina Amalia de Orange está amenazada por el crimen organizado de Holanda. Una intimidación a la seguridad de la heredera al trono que le obligó a dejar su piso de estudiantes y trasladarse a palacio junto a sus padres.

Pese a este duro momento, la hija del rey Guillermo no duda en mantener un ritmo de vida que fuera lo más normal posible. Entre sus aficiones se encuentra viajar y uno de sus destinos favoritos se encuentra en España. Madrid se ha convertido ya en sitio clave para la nueva vida de la princesa Amalia, quien antes de que finalizara este año, ha vuelto a la capital por Navidad, tal como confirma Vanitatis.

La princesa fue vista paseando por la plaza de la Independencia, presidida por la Puerta de Alcalá, según las imágenes publicadas por Europa Press. Pese a ser una de las zonas más concurridas de la capital, Amalia pasaba desapercibida y podría disfrutar de un anonimato que le tiene en jaque durante estos últimos meses. Eso sí, acompañada en todo momento por su equipo de seguridad que, pese a ser alto riesgo, pasaba también desapercibido.

Una de las paradas obligatorias de Catalina Amalia de Orange es siempre en la cafetería Cappuccino Grand Café. Ubicado en la misma plaza, disfrutó de su amplia terraza que, a pesar del frío, está equipada con estufas. No acudió sola, ya que fue en compañía de una amiga con quien se tomó un refresco.

La hija mayor de Máxima de Holanda escogió un look cómodo y casual para su visita. Para resguardarse del frío, optó por un abrigo largo sastre en color caqui con solapa y botones en negro. Asimismo, se decantó por unos vaqueros wide leg que daban cierta soltura al estilismo. No hacía sol, pero lo acompañó de unas gafas de sol marrones que ocultaban su rostro al natural, sin ninguna gota de maquillaje.

No es de extrañar que la princesa se encuentre en esa zona, ya que es una de sus favoritas. A principios de año, junto a su madre, volvieron a visitar Madrid y aprovecharon para irse de compras por la milla de oro donde se pasaron por diversas firmas de lujo.

En otras ocasiones, Amalia también aprovecha para reencontrarse con amigos íntimos que parece que ya tiene en Madrid. Como cuando Amalia volvió tras su viaje al Caribe y paró de nuevo por la capital española, donde quedó con su grupo, tal y como confirmó Vanitatis. Entre ellos, españoles y holandeses, con los que habló en ambos idiomas debido a los orígenes argentinos de su madre que le permitió ser políglota.

Su última aparición fue en el posado navideño de la familia real holandesa hace menos de una semana. Tanto Guillermo como Máxima y sus tres hijas salían a la entrada del Palacio Huis ten Bosch , residencia oficial de los reyes y que da cobijo, por el momento, también a Amalia. Una imagen divertida y a la que les acompañó su perrito al que sorprendieron hablándole en español.

De momento, el gobierno Holandés mantiene que las visitas de la princesa Amalia son de carácter privado y no preceden a una posible mudanza a nuestro país. Un vínculo muy estrecho al que una vez más la princesa aprovecha para disfrutar de la calma y anonimato del que carece en su país natal.