Cómo se conocieron Genoveva Casanova y Federico de Dinamarca: así son las cacerías para royals y millonarios donde empezó su amistad

Es la noticia de la semana y ha removido los cimientos de la casa real danesa. El encuentro de Genoveva Casanova y el príncipe heredero Federico de Dinamarca en Madrid ha estallado en mitad del viaje de estado de Felipe y Letizia al país. Muchas son las especulaciones y teorías que refuerzan una crisis en palacio tras el reportaje fotográfico.

Una de las grandes sorpresas era que existía una cercanía entre ambos. Es de sobra conocido la relación que tiene Casanova con la alta sociedad, pero no se sabía que podía llegar a nivel de realeza europea. Pero la presentadora Susanna Griso ha desvelado más detalles sobre cómo se conocieron. «Viene de las cacerías, porque yo me he enterado en las últimas horas por el entorno de Genoveva», desveló en su programa 'Espejo Público'.

Unos eventos de alto standing a los que sólo acuden millonarios, personajes de primer orden o miembros de las casas reales europeas . «Para asistir a ellas hay que pagar muchísimo dinero, pero están todos los royals, todos los hijos de las grandes familias. Se organizan sobre todo en Alemania y Austria. Ahí Genoveva, que le gusta mucho y se ve que asiste con bastante frecuencia, conoce a Federico», ha continuado. Unas jornadas que se hacen de manera privada y a las que el príncipe compagina con las que celebra de manera pública y junto a Mary .

La cacería es una de las aficiones del heredero al trono danés y en numerosas ocasiones se le ha podido ver en su práctica incluso con sus hijos. En noviembre de 2016, se encontraban disfrutando de unos días de otoño en el palacio de Fredensborg acompañados por la reina Margarita II . Los príncipes Vincent y Josephine tenían aún 5 años y ellos 12 años de matrimonio. Decidieron salir al patio de la residencia y presentar varias de las presas que habían cazado durante la jornada diurna. En total fueron 38 ciervos y dos zorros, muchos de ellos destripados.

«Yo maté al ciervo que está más lejos», señaló Federico al pequeño Vincent. Al mismo tiempo, palacio difundió las fotografías de la jornada y se desató la polémica. Multitud de organizaciones lo describieron como 'horribles' y 'chocantes' por la presencia de los niños. En este caso, no estuvieron ni Christian ni Isabella, aunque ambos han participado en otras ocasiones.

Es una tradición familiar que se ha transmitido de generación en generación. En el palacio de Rosenborg, la corona guarda su colección cinegética encabezado por la cornamenta del ciervo que causó la muerte de Christian V en 1698. Anualmente, se realiza una cacería en los bosques de Grib,cerca del palacio, donde la familia se reúne junto a aristócratas del país y el resto de Europa. El objetivo es reducir la sobrepoblación de ciervos de la zona.

Esta no sería la única polémica que ha aflorado en los últimos tiempos a Federico. Le detuvieron en 1992 por conducir en estado de embriaguez y superar el límite de velocidad junto a su novia de entonces, Malou Aamund por conducir a excesiva velocidad mientras iban alcoholizados. El «príncipe turbo» le apodaron mientras el parlamento cuestionaba su legitimidad como heredero. Tal fue la magnitud, que hasta tuvieron que emitir un comunicado donde pidió disculpas al pueblo del que se espera que un día se soberano.

Una alteza real que ha puesto en la diana su matrimonio con Mary Anderson y que puede crear un cisma. La única que se ha pronunciado ha sido Genoveva quien ha manifestado que «rotundamente» que no existe «una relación de tipo romántica entre el príncipe Federico y ella». Además, ha señalado que tomará acciones legales para defender su derecho al honor e intimidad.

Tras ello, la mexicana ha tomado distancia y se ha aislado hasta incluso apagar su teléfono móvil para no recibir ninguna llamada más, como afirmó Gemma López en el mismo programa. A miles de kilómetros, los príncipes despedían a los reyes de España dando por finalizado un viaje que pasará a la historia.