La curiosa educación que Kate Middleton y Guillermo están dando a su hijo Jorge para que se convierta en un rey moderno

A diferencia de sus hermanos, Charlotte y Louis , que iniciaron su vida escolar en Londres, Jorge o George (como le conocen en su país), el hijo mayor de Guillermo y Kate y segundo en la línea de sucesión al trono de Inglaterra , desde el fallecimiento de su abuela Isabel, el pasado mes de septiembre, comenzó su escolarización, en 2013, en Norfolk, donde entonces vivían sus padres, mientras el príncipe Guillermo trabajaba en el servicio de ambulancias aéreas.

Su primera escuela fue la Westacre Montessori School Nursery. El pequeño príncipe fue fotografiado por su madre con un anorak azul marino y una pequeña mochila azul celeste a la espalda en su primer día de clase. Cuando su hermana Charlotte empezó en el jardín de infancia, en 2018, la familia ya se había instalado en el Palacio de Kensington , en Londres, y ambos asistían a la Escuela Thomas Battersea, con sus uniformes azul marino, y los vivos rojos. Louis comenzó más tarde, debido al encierro de la Covid, y asistió, por primera vez, a un curso de verano en la escuela Willcocks, en la que luego continuó.

Jorge tiene ya diez años, desde el pasado 22 de julio, y ha mostrado un cambio bastante perceptible en los últimos meses. Se le ve más seguro y relajado. Su padre acudió desde muy temprano a un internado, Ludgrove School, pero, de momento, George sigue sus estudios en un exclusivo colegio privado, en régimen abierto, algo que le diferencia de los demás herederos antes que él. Hasta ahora, y salvo ese comienzo, cuando era casi un bebé, George ha compartido escuela con sus hermanos. George tiene 10 años y ya sabe que será rey.

Sus padres se instalaron el pasado verano en Adelaide Cottage, cerca de Windsor, para estar más cerca de la reina Isabel y proporcionar a sus hijos una vida más sencilla. Los príncipes comenzaron sus estudios en una escuela cercana, Lambrook School, a 15 minutos de su nueva casa, que asegura una orientación «moderna» a la educación, mezclada con enseñanzas más tradicionales y la práctica del deporte. Los alumnos también tienen la posibilidad de unirse a varios clubs, como el de polo, el de natación o el de submarinismo, deportes tradicionalmente practicados por la familia real.

Los Gales quieren dar a sus tres hijos una educación «lo más normal posible». Pero George ya sabe que tiene un futuro distinto. Lo supo en una conversación que tuvo con sus padres, hace ya un par de años. Parece que le hablaron de sus «futuros deberes» y de su espíritu de «servicio». Pero lo importante para los Gales ha sido siempre proporcionar seguridad, estabilidad y amor al futuro rey, que no sienta que tiene una carga sobre sus hombros.

De momento, parece que George continuará en Lambrook School durante tres años más, hasta los 13, la edad límite de sus estudiantes. Entonces comenzará la segundaria. Su padre fue al internado masculino de Eton y permaneció allí hasta el final de su escolaridad, con 18 años. Es de esperar que George también pase por este prestigioso centro en el que se educa la aristocracia británica, pero, de momento, pasarán todavía algunos años, según los planes de los príncipes de Gales para su hijo mayor. Eton está, además, muy cerca de la nueva casa familiar de Windsor. Después podrá escoger una universidad. ¿Quizá St Andrews, en Escocia, a la que acudieron sus padres?

De momento, lo que preocupa a William y Kate es que George no reciba un tratamiento especial en el entorno escolar o en la familia. No quieren tampoco que se le diferencie, de momento, de sus hermanos menores, como heredero al trono, a pesar de que los niños ya tienen conciencia de que George «tiene algo diferente». Pero los príncipes de Gales quieren priorizar la vida familiar sobre la preparación futura del príncipe, que, de momento, no incorporará ninguna responsabilidad especial a su rutina infantil, algo que su abuelo, el rey Carlos III , parece que sí desearía, al igual que es partidario de llevar a los jóvenes «royals» a un internado, como ha ocurrido siempre en la familia real británica. Por otra parte, en este aspecto, prima la opinión de Guillermo y Kate.