De todas las observaciones y comentarios acerca de la aparición de la familia real británica en la coronación de Carlos III , la más repetida puede referirse a la tremenda seriedad, en algunos casos franca tristeza, de algunas de las caras reales. Ni la reina Camilla ni Kate Middleton parecían estar viviendo una mañana feliz, la verdad. Ahora sabemos que un día antes de ese momento histórico algunas royal se dieron un fiestón. Una fiesta secreta en el Oswald's.
Resulta sorprendente, esa es la verdad, que ciertos miembros de la familia real ya no tan jóvenes puedan comenzar la fiesta horas antes de un día tan ajetreado y grave como el de la coronación de Carlos II I. Lo decimos por la princesa real Ana, quien escoltó a caballo la carroza de su hermano el rey en el corto recorrido que separa Buckingham Palace de la abadía de Westminster. Ella fue una de las royal que no se perdió la citada fiesta.
La entrada al club privado Oswald's, en el elitista barrio de Mayfair de Londres. /
Otra presencia sorprendente en la inesperada reunión nocturna de VIPs invitados a la coronación fue Marie-Chantal Miller, sin duda acompañada por Pablo de Grecia. La familia real griega no perdona su asistencia en todos los eventos en los que se pueden estrechar los lazos con los Windsor, con esa inteligencia para las relaciones públicas que les ha conferido el exilio.
La coronación de Carlos III no solo supone la puesta de largo oficial de los nuevo los nuevos ocupantes del trono británico, sino una ocasión extraordinaria para que los royals hagan 'networking' entre ellos. De hecho, durante la recepción previa a la coronación celebrada en Buckingham Palace también se constató que Marie-Chantal Miller ha sabido reconectar del todo con los reyes Felipe y Letizia , pues les vimos juntos y departiendo amigablemente. Tenía que ser.
Uno de los comedores del Oswald's, el lujosos club privado que frecuentan reyes y primeros ministros. /
Después de esa recepción, que tuvo lugar en la tarde-noche del viernes anterior al sábado de la coronación de Carlos III, algunos royals se trasladaron a uno de los clubes privados más exclusivos de Londres, el Oswald's, para seguir la fiesta. El nombre no nos es desconocido: allí almorzó el rey Juan Carlos la última vez que viajó a Londres, para asistir a la final de la Champions League
Además de la princesa real Ana y de Marie-Chantal Miller, acompañadas del vicealmirante Sir Timothy Laurence y Pablo de Grecia, acudieron al Oswald's parejas reales clave: Gustavo y Victoria de Suecia, Alberto y Charlène de Mónaco , Federico y Mary de Dinamarca y Haakon y Mette-Marit de Noruega. También el príncipe Andrés, los duques de Edimburgo, Eduardo y Sofía, las princesas Eugenia y Beatriz de York, con sus respectivos esposos, los príncipes de Kent o Zara y Mike Tindall.
El Oswald's no es cualquier club, como sabemos. Allí intentó encontrarse Juan Carlos I con el rey Carlos III , en un almuerzo que hoy sabemos jamás se celebró. Situado en el exclusivo barrio de Mayfair, es propiedad de Robin Birley, quien ya posee otro de los clubes privados más célebres de Londres, el 5 Hertford Street, donde Harry y Meghan tuvieron su primera cita. Su padre, Mark Birley, abrió también en Mayfair el Annabel's, un clásico frecuentado por Carlos de Inglaterra, Diana de Gales y Sarah Ferguson.
Refugio de reyes y primeros ministros, en el Oswald's se citaron Boris y Carrie Johnson cuando aún eran amantes o novios o se ve frecuentemente al matrimonio Blair. Los Beckham son habituales y la princesa Eugenia celebró allí varios aniversarios de boda. Es el único club del que es miembro Sabine Getty, quizá por su bodega, probablemente una de las más cuidadas del mundo. EL club no cobra descorche por los vinos que traen sus socios y éstos, incluso, pueden guardar hasta doce de sus propios vinos en su bodega.
Una de las múltiples zonas ue pueden utilizar los socios del club Oswald's y sus invitados. /
Este club privado, de los últimos en llegar a la capital londinense (abrió en 2018), se convirtió inmediatamente en favorito de la alta sociedad: se rumorea que ha admitido a alrededor de 2.000 miembros, todos pertenecientes a la élite del poder británico y las finanzas globales. La reina consorte, Camilla Parker-Bowles , o Lizz Truss, son socias del club, donde por supuesto ya se reúne de manera informal el nuevo presidente Rishi Sunak.
El interior de Oswald's club, firmado por por Tom Bell y Bruce Cavell, cuenta con candelabros de Murano, chimeneas campestres y una cúpula que se eleva hacia una terraza para fumar puros. La decoración es exquisita y el 'dress code' irrompible: si algún invitado acude sin chaqueta, tendrá que agenciarse una o no podrá franquear su puerta. Los móviles están mal vistos: allí no se va a cerrar negocios, sino a conversar.
20 de enero-18 de febrero
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