Los vestidos de Letizia y la reina Sofía en la fiesta de de Juan Carlos en Abu Dabi: ¿mensaje oculto o error imperdonable?

La polémica está servida a raíz del 86 cumpleaños del rey Juan Carlos , una fiesta que ya había levantado ampollas desde que se anunciara hace unas semanas. Entonces sonaron todas las alarmas ante su supuesta intención de organizar una gran fiesta que reivindicara su figura. No ha resultado tal, aunque el emérito se las ha arreglado para encontrar su sitio con una exclusiva inesperada e histórica que parece compensar su bajo perfil institucional. Narra una fiesta 'petit comité' con ausencias clamorosas e indirectas en forma de vestido.

Los cronistas que siguen la actualidad de la familia real no han podido esconder su sorpresa ante las fotografías que, por primera vez, entran en la vida privada, la más privada, de la familia del rey Felipe VI. En ellas contemplamos el bloque familiar que se alinea junto al rey Juan Carlos al menos en lo sentimental: las dos infantas, sus hijos y sus conocidos amigos (de Pedro Campos a Álvaro de Orleans). Evidentemente, la ausencia más clamorosa es la de la reina Sofía: se confirma que la emérita no forma parte de los afectos de Juan Carlos de Borbón.

La ausencia de los reyes Felipe y Letizia y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, no solo se justifica en el cordón sanitario que aún separa al rey Juan Carlos de la familia real. Además, coincidió con la celebración de la Pascua Militar , la primera en la que la princesa Leonor aparecía en calidad de dama cadete, una foto que en otras circunstancias habría aparecido en la portada de 'Hola' que se dedicó al cumpleaños del emérito .

Sí estuvieron íntimos de este, como Pedro Campos y su esposa, el armador valenciano Vicente Boluda, Fernando Almansa, Vicente Cebrián-Sagarriga, presidente de las bodegas Marqués de Murriet, el empresario Blas Herrero, Miguel Arias, dueño del restaurante Flanigan de Palma de Mallorca, el abogado Jerónimo Páez y el doctor Eduardo Anitua. Sorprendentemente, acudió también Hugo Arévalo, inversor de 'start ups' conocido por su breve romance con Tamara Falcó, poco después de su polémica ruptura con Iñígo Onieva .

Las presencias quedaron claras gracias a las fotos de la exclusiva: mientras el rey Juan Carlos cortaba su tarta con un sable, le miraban sus dos hijas, las infantas elena y Cristina, Froilán y Victoria Federica Marichalar e Irene y Pablo Urdangarin, este acompañado por su novia, Johanna Zott. Llamó muchísimo la atención el atuendo de la nieta mayor del emérito y de su hija pequeña. Los vestidos que llevaban los habíamos visto antes y, a decir de muchos, portaban un mensaje o una indirecta para la familia real.

El primer vestido polémico lo lució la muy discreta infanta Cristina , normalmente alérgica a provocar cualquier tipo de comentario alrededor de su presencia. Sorprende, por eso mismo, que eligiera un vestido de su madre, la reina Sofía, para acudir a esta fiesta de cumpleaños a la que no se la ha invitado o no ha aceptado acudir. Se trata de un camisero con silueta envolvente y estampado de flores, que su madre lució en gosto de 2010.

Efectivamente, la reina Sofía eligió este original vestido para acudir a la recepción previa a la boda del príncipe Nicolás y Tatiana Blatnik en la isla de Spetses. Delata cómo parte del armario de la emérita se va trasladando al de sus hijas, algo bastante habitual en todas las familias. Sin embargo, queda la duda de si esta ocasión era la idónea para lucir un vestido como este. ¿O acaso la infanta Cristina quería reclamar en aquella fiesta la presencia de su madre?

La presencia de este vestido puede ser, efectivamente, un mensaje encriptado a Casa Real, una simple coincidencia o un error en toda regla. Y lo mismo puede decirse del segundo vestido polémico de la fiesta de cumpleaños del rey emérito Juan Carlos, este lucido por la influencer de la familia, Victoria Federica Marichalar. ¿De verdad no se lo pensó dos veces antes de llevar un diseño que ya se había puesto la reina Letizia?

Victoria Federica llevó a la fiesta de cumpleaños de su abuelo un vestido negro de Charo Ruiz, la conocida diseñadora ibicenca de moda 'ab-lib', con sus característicos encajes y volantes. Pero quien estrenó dicho diseño, pero en color blanco, fue la reina Letizia. Lo lució en el verano de 2020, precisamente cuando visitó la isla balear durante la gira por toda España que protagonizó en plena crisis del coronavirus. En el caso de Vic, no se puede decir que no sea consciente del impacto que tiene la elección de un look como este. Su profesión de influencer convierte este gesto en un error o una clara indirecta.

¿Por qué querrá citar Victoria Federica a Letizia allí donde, evidentemente, difícilmente sería bienvenida? ¿Es una ironía o, directamente, un guante disimuladamente arrojado? Su madre, la infanta Elena, también citó a la reina Sofía pero con una pieza mucho más discreta y cuya aparición está mucho más justificada al ser una joya. Se trata de un collar-fular de topacios azules e iolitas que llevó sobre su vestido azul marino y aún es propiedad de su madre.