La nueva aventura de Froilán: su polémico nuevo trabajo como defensor del clima en la ONU que no va a gustarle a Letizia

La polémica persigue a Felipe Juan Froilán , aunque el nieto más díscolo de los reyes eméritos Juan Carlos y Sofía no haya hecho gran cosa para provocarla. Tras muchos meses de quejas por la vida ociosa del hijo de la infanta Elena, más dedicado a la noche y las fiestas que a desarrollar su carrera profesional, por fin conocemos algo más de su nuevo trabajo en Abu Dabi. Digámoslo con un eufemismo: es complicado.

Sabíamos que Froilán , con una formación universitaria en Business (o sea, negocios), trabajaba para una de las compañías petrolíferas más importantes del mundo Emiratos Árabes. Se trata de la Abu Dhabi National Oil Company (ADNOC), la petrolera estatal de Emiratos Árabes, cuyo presidente, el sultán Ahmed Al-Jaber, es amigo íntimo del rey emérito Juan Carlos .

Previsiblemente y dada su formación, Felipe Juan Froilán podría estar desarrollando su talento en los departamentos más relacionados con el desarrollo de negocio, más implicado en los vectores económicos, financieros o de inversión de la compañía. Hoy sabemos que no es así. Parece que el nieto del emérito puede inclinarse más por las relaciones públicas.

Eso es lo que parece indicar su nuevo destino profesional, un reto planteado por la compañía petrolífera en la que trabaja y que no es menor. Froilán participa ya en la organización de la participación de ADNOC en la próxima Cumbre del Clima de Naciones Unidas, que se celebrará en Dubai desde el próximo 30 de noviembre.

Las noticias que llegan desde Abu Dabi sobre la nueva vida en Oriente de Froilán no puede ser más esperanzadoras: la implicación del joven en su nuevo trabajo es total. De hecho, parece que va a renunciar a sus vacaciones de verano para responder al máximo nivel con el reto que le han planteado su empresa y que su propuesta de cara a la COP28 sea irreprochable.

El reto es gigantesco, claro, y aquí es donde entra el factor polémico que rodea a este nombramiento de Froilán como figura pública al frente de la participación de ADNOC en la COP28. A nadie se le escapa de la difícil posición que una empresa petrolera tan relevante ocupa en una Cumbre del Clima en la que la supresión del uso de los combustibles fósiles es el tema más caliente.

La polémica que va rodear a la Cumbre del Clima de Dubai puede ser la más escandalosa que hayamos visto en los últimos tiempos de emergencia climática. De hecho, ya se está pidiendo la dimisión de Al-Jaber, el jefe máximo de Froilán, por liderar a la vez la COP28 y una petrolera.

En su defensa, el director general de la COP28, Majid Al-Suwaidi, ha dicho a ABC: «Es la persona mejor situada para desafiar al sector del petróleo y el gas para que ofrezcan los resultados que necesitamos (…) Tiene la capacidad de ayudar a resolver este problema como nadie en nuestro sistema y por eso tiene sentido para nosotros».

Sin duda, ni al rey Felipe ni a la reina Letizia va a hacerles mucha gracia que se sitúe a un miembro de la familia como cara visible del asunto más controvertido que han de dirimir las potencias mundiales. Todos los esfuerzos de Casa Real por cultivar una posición de neutralidad en las cuestiones más polémicas de este tiempo quedan comprometidas por la inesperada posición del sobrino de los reyes.

Desde la Unión Europea, la posición que más compromete a los reyes Felipe y Letizia como monarcas españoles, se defiende ya una lucha frontal contra los combustibles fósiles que representa, también en la Cumbre del Clima, Froilán. El pasado mes de marzo, todos los países acordaron promover «una eliminación global».

Aquí está la clave de la polémica: La Unión Europea va a plantear en la COP28 un acuerdo mundial por la eliminación de los combustibles fósiles regido por el consenso científico. En la anterior cumbre, más de 80 países incluida la UE apoyaron una propuesta para hacerlo. Se opusieron las naciones ricas en petróleo, entre ellas Emiratos Árabes, en cuya representación ahora se designa a Froilán Marichalar Borbón.