La infanta Cristina ni perdona ni olvida: la insostenible tensión que mantiene con la reina Letizia

No resulta fácil resolver la pregunta del millón de euros acerca de la familia real. Cuando pensábamos que el rey Felipe VI y su hermana mayor se llevaban a las mil maravillas, un artículo en Hola desveló que la infanta Elena guarda reproches al monarca. Pero quien supuso que lo sucedido a propósito de Nóos había roto por completo la hermandad entre el monarca y la infanta Cristina , tampoco acertó. Lo vimos en la boda de Victoria López Quesada: lo suyo ha vuelto.

Con todo, acudir a la evidencia de un comportamiento familiar más o menos afectuoso en los eventos públicos no prueba gran cosa. Los Borbón están más que habituados a escenificar normalidad y, sobre todo, a ocultar tras la máscara de la buena educación sus tensiones. Si el rey Felipe guarda algún rencor hacia alguna de sus hermanas , no se advirtió durante su último encuentro en Sevilla, en la misa funeral de Fernando de Borbón y Medina.

Las crónicas de aquel encuentro relataron un relación fraternal al uso: Felipe de Borbón charló con su hermana mayor y se le fotografió besando a la infanta Cristina , con la que en teoría ha tenido más motivos de distanciamiento. Todo sucedió en presencia de la reina Sofía y se infiere que ninguno de sus hijos desea darle un disgusto a su madre, ya bastante dolida por las revelaciones al respecto de la vida sentimental del rey Juan Carlos.

Gracias al digital Monarquía Confidencial, sabemos además que el rey Felipe tiene una buena razón para mantener un contacto fluido con sus hermanas: obtener una información directa y confiable acerca del estado de salud en Abu Dabi del rey Juan Carlos , al que no ve más allá de dos o tres veces al año. Este medio asegura que, además, hablan por teléfono con alguna frecuencia. «Felipe VI está muy pendiente del estado de salud de su padre. Es lógico, es su familia», aseguran las fuentes consultadas.

Siempre según este medio digital, lo que le han contado sus hermanas es que su padre, «aun teniendo los achaques propios de la edad, está tranquilo y bien». Tampoco la reina Sofía causa preocupaciones de salud física , aunque algunas informaciones aseguran que no están siendo meses fáciles para su estado de ánimo. Aún así, cuenta con la compañía diaria de Miguel Urdangarin , la visita diaria de su hijo Felipe y las visitas semanales de sus hijas.

Así las cosas, solo la relación entre los tres hermanos Borbón continúa en la cuerda floja de la rumorología. Y como buscar pistas en sus apariciones públicas es fútil, insistimos, solo queda subrayar la significación de las ausencias. Y, efectivamente, a nadie se le ha escapado subrayar que cada vez que el rey Felipe se reúne con sus hermanas , la reina Letizia no le acompaña. Una ausencia que no puede ser ninguna casualidad.

Si nos atenemos a la opinión de 'insider' y experta de Pilar Eyre, novelista y experta en Casa Real, la desaparición de la reina Letizia de las reuniones fraternales de los Borbón tiene todo que ver con la infanta Cristina . Es comprensible: la hermana favorita del monarca se convirtió en la principal aliada de la entonces princesa de Asturias en Zarzuela. Fueron más que cuñadas, amigas. Hasta que sucedió lo peor.

Al estallar el caso Nóos, Letizia pudo ponerse en modo alerta, sin duda, pero resulta un poco raro imputarle a la reina las difíciles decisiones que tuvo que tomar Zarzuela al respecto de Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin. Uno de los más humillantes, despojarles del título de duques de Palma de Mallorca, en 2015. Uno de los más difíciles, insistirle a la infanta para que se divorciara del olímpico antes de que fuera declarado culpable y entrara en la cárcel.

La desaparición de la reina Letizia de los alrededores de la infanta Cristina hace pensar que la Reina se ha convertido en la cabeza de turco de una situación familiarmente diabólica. Culpar a la mujer, más aún si resulta ser 'la extraña' en la familia, resulta de lo más conveniente para ser benevolente con personas más poderosas cuya amistad interesa más, en este caso el rey Felipe. Eyre asegura que Cristina y Letizia «no se pueden ni ver». No parece que la Reina haya sido nunca realmente popular en la familia real.