La infanta Margarita junto a la reina Sofía. /
No fue una reunión tan multitudinaria como la celebración de los 60 años de la infanta Elena , que el pasado diciembre lograba congregar en la capital de España a la familia Borbón casi al completo, pero la infanta Margarita pudo rodearse de gran parte de sus seres queridos para una ocasión muy especial. La hermana del rey Juan Carlos soplaba 85 velas en un restaurante a las afueras de Madrid en la mejor compañía, pero en un momento muy triste para los suyos.
A la felicidad del momento se sumaba la tristeza por la reciente muerte a los 49 años de su sobrino, Fernando Gómez-Acebo , tras mucho tiempos sufriendo una insuficiencia respiratoria crónica. Si hace unos días veíamos a los Borbón y a los Gómez-Acebo dedicando el último adiós al fallecido en el tanatorio madrileño de La Paz, ahora han tratado de poner al mal tiempo buena cara para celebrar una ocasión especial.
Como ha desvelado 'La razón', el lugar elegido para festejar el cumpleaños de la infanta Margarita ha sido El Chalet Suizo, un restaurante especializado en cocina helvética y que según reza su página web, dispone de tres salones decorados al estilo chalet alpino que trasladan a los comensales a Suiza, pero contemplando la Sierra Nevada de Madrid.
Fue en uno de esos salones donde la hermana del rey emérito, que en esta ocasión no pudo asistir a la cita, reunió a un grupo de veinte invitados entre los que se encontraban la reina Sofía , la infanta Elena , sus sobrinos Gómez-Acebo y sus hijos, entre ellos María Zurita , que en su reaparición ante los medios se limitaba a manifestaba a manifestar a los reporteros que la familia está pasando por «momentos muy complicados».
La que fuera participante en 'MasterChef Celebrity' se despedía de su fallecido familiar compartiendo una tierna foto de ambos en su cuenta de Instagram que acompañaba de este mensaje: «Te has ido demasiado pronto, Coquito, demasiado joven. Te vamos a echar muchísimo de menos porque eras un ser de luz, lleno de alegría y de bondad. Descansa en paz, primo».
El local presume sobre todo de la clásica fondue de queso suiza entre sus especialidades, que preparan al modo tradicional pero también en alguna modalidad diferente como las que incluyen boletus o trufa. La Bündnerfleisch (cecina), la raclette valaisanne o el rösti son algunos de los platos más demandados por los clientes.
Los ingredientes perfectos para que la familia pudiera compartir una velada tranquila y llena de confidencias y buenos recuerdos. A buen seguro no faltaron la tarta, los regalos y el clásico «cumpleaños feliz» para la gran protagonista del almuerzo.
La propia homenajeada también realizaba unas escuetas declaraciones a los compañeros de la prensa. «Muchísimas gracias. Son bastantes años, una maravilla. Lo voy a celebrar, vamos a comer por ahí y se acabó. Millones de gracias», decía la infanta Margarita poco antes de la celebración de su cumpleaños.
Respecto a la posible presencia de su hermano en el funeral de Fernando Gómez-Acebo , tiraba de humor y cierta ironía para lanzar esta advertencia: «Que se os meta en la cabeza que nosotros no es que no queramos decir las cosas. Es que sinceramente no es que seamos idiotas, es que no las sabemos».
Invidente desde su nacimiento, la infanta Margarita llegó al mundo en el Hospital Anglo-Americano de Roma el 6 de marzo de 1939. Hija de Juan de Borbón y Battenberg y de María de las Mercedes de Borbón y Orleans, sus hermanos son el rey Juan Carlos y la infanta Pilar .
Con la discreción que la ha caracterizado toda su vida, la duquesa de Soria renunció a sus derechos de sucesión al trono español al contraer matrimonio con Carlos Zurita en 1972. Margot, como la llaman en familia, está dotada de una fuerte personalidad, que ha hecho de ella una mujer independiente y luchadora, y es una gran aficionada a la música.
Le gusta todo tipo de música, desde la clásica al pop o incluso la electrónica. Se la ha visto en conciertos de Bruce Springsteen, uno de sus músicos favoritos, pero también de Bon Jovi porque es una fan declarada de la música rock. También se la ha podido ver asistiendo a festivales como el de Rock in Río.
Pese a que se ve obligada a desplazarse en silla de ruedas y necesita la ayuda de alguno de sus familiares, sigue llevando una vida activa y además de verla coincidir con su familia en el cumpleaños de la infanta Elena, también se reunía el año pasado con el rey emérito en las regatas de Sanxenxo .