fuera de foco en reyes

La vida al margen de la infanta Sofía: por qué la hermana de la futura reina Leonor merece una agenda propia

Todas las pistas que va dejando la infanta Sofía apuntan a un encaje institucional que tiene más que ver con la obligación que con la devoción. Y con una asunción resignada del papel de escudera de su hermana.

La infanta Sofía el pasado diciembre, durante la entrega del premio de fotografía convocado por Patrimonio Nacional que preside. / getty images

Elena de los Ríos
Elena de los Ríos

No ha terminado el primer mes del año y la prensa española, francesa y alemana ya avanza que este puede ser el gran año de la infanta Sofía . No van descaminados: con una princesa Leonor embarcada, surcando mares a bordo del Juan Sebastián Elcano , su hermana podrá hacer valer su suplencia al menos hasta junio. Sobre todo el 29 de abril, día de su 18 cumpleaños. La mayoría de edad de la hija menor de los reyes Felipe y Letizia lo puede cambiar todo.

En realidad, el destino inmediato de la infanta Sofía tendrá que ver con el de Leonor, pues ambas deberán anunciar dónde cursarán estudios universitarios y qué grado elegirán. ¿Podrían enrolarse en alguna universidad madrileña o buscarán un mayor grado de privacidad (y seguridad) en el extranjero? ¿Querrán estudiar en la misma institución o en la misma ciudad, o se separarán de nuevo? Lo sabremos, seguramente, al filo del verano.

La agenda colegial de la infanta Sofía marcará, sin embargo, lo mucho o poco que vayamos a verla de aquí al verano. En principio, las próximas vacaciones escolares serán en abril, del 11 al 21, con lo que su fiesta de cumpleaños probablemente se adelantará. Un mes después, el 24 de mayo, será su ceremonia de graduación y, si la agenda oficial lo permite, volveremos a ver la emoción de los reyes Felipe y Letizia en Gales, cerrando una etapa clave en la vida de su hija. Y, si tenemos premio, la reina nos regalará de nuevo un 'selfie' real .

La infanta Sofía parece más cómoda cuando acompaña a su hermana, la princesa Leonor, y ocupa un papel secundario. / casa real

La agenda debemos tomarla con reservas, pues esta misma semana hemos visto cómo Sofía de Borbón acudía a la famosa fiesta de Reyes del abuelo Jesús, padre de la reina Letizia, cuando todo el mundo la suponía ya en Gales. Hasta se apuntó a que habría 'videollamado' desde allí a su otro abuelo, el rey emérito Juan Carlos, para felicitarle el cumpleaños. Algo imposible si, como vimos, estaba en Madrid con sus padres y hermana.

Efectivamente: la infanta Sofía no comenzó el curso en el UWC Atlantic College de Gales a tiempo, pero bien lo vale un roscón. Y, sobre todo, unas fotos robadas de la familia real en el coche en el que alcanzamos a ver a las hermanas sin pose institucional. Tras los cristales vimos sonrisas más espontáneas que congeladas y una sintonía fraternal encarnada en el 'lipstick': ¿compartieron la misma barra de labios?

La infanta Sofía no compareció en la Pascua Militar

La cuestión no es, claro, que la joven estudiante se haya tomado unas horas extra con permiso de sus comprensivos padres. Lo que ha llamado la atención es que no compareciera en la celebración de la Pascua Militar , junto a los reyes Felipe y Letizia y una princesa Leonor militarmente uniformada. Pudo acudir, pero prefirió disfrutar de su tiempo libre alejada de las cámaras que sumarse al apuntalamiento de la Corona.

Se insiste en que el papel de la infanta Sofía solo puede subrayarse de aquí en adelante, algo inevitable si atendemos al exiguo número de personas que integran nuestra familia real y a la creciente necesidad de presencia pública que requiere mantener la popularidad de la Corona. Evidentemente, la más joven del clan Borbón Ortiz va a ser requerida por la agenda oficial. Otra cosa es que a ella, esta circunstancia, le haga más o menos gracia.

La infanta Sofía protagonizó su primer acto oficial en solitario el pasado diciembre. / casa real

El pasado diciembre, la infanta Sofía salió de su sempiterno segundo plano, ese papel de escudera en el que se encontraba ta cómoda, para reclamar los focos en solitario. Presidió unos premios de fotografía que llevan su nombre, convocados por Patrimonio Nacional, sin esa funcionalidad de apoyo y sostén de su hermana para el que la llevaban entrenando años. No fue un desastre, pero tampoco un éxito. La aún estudiante de Bachillerato lució glacial, por no decir tiesa.

La Infanta no tiene responsabilidad en esto, claro, pues se le requiere una inversión de interés que difícilmente pueden producir este tipo de actos, tan alejados en forma y fondo del universo de una adolescente. El envaramiento generalizado de las escenografías de estos eventos deja fríos hasta a sus espectadores. Pueden encajar con el ejercicio puramente profesional de una monarca o una emérita, pero no conectan con la sensibilidad aún vivísima de los 17. Sofía de Borbón merecería una agenda acorde a su edad.

La infanta Sofía se implicaría mejor en una agenda propia

No cabe esperar que en los próximos meses, incluso años, dé un vuelco la disposición de la infanta Sofía a la hora de cumplir con una agenda propia, alejada de sus funciones de apoyo a la princesa Leonor. Sobre todo, si ha de limitarse a recoger las citas institucionales que llevan años en la agenda real y que comenzarán a repartirse entre las hermanas y la reina Letizia. Otra cosa sería si se diseñara, con un propósito afín a la joven, una agenda a su medida.

¿Cabría esperar que Sofía de Borbón pudiera tener una misión elegida, como pudo elegirla la reina Letizia, para configurar su propia agenda? Sería deseable, sobre todo si se pretende que su figura pueda atraer a las generaciones más jóvenes, esas que aún ni saben para qué sirve una monarquía. Puede que no conozcan el funcionamiento de la Corona, pero sí dominan los contenidos que les llegan a través de las redes sociales. Y detectan inmediatamente lo que es 'real' y lo que no.