Kate Middleton y el príncipe Guillermo tienen un lugar en Escocia para evadirse de todo. /
Kate Middleton y el príncipe Guillermo tienen un hogar lejos del hogar que incluso muchos británicos desconocen: Tam-Na-Ghar, un cottage, es decir, una casa de campo, en la enorme finca escocesa de Balmoral, en Escocia. Aunque los príncipes de Gales pasan la mayor parte del tiempo entre su vivienda habitual de Adelaide Cottage y Anmer Hall , su residencia campestre en Norfolk donde la royal se ha refugiado a menudo durante su tratamiento contra el cáncer, este rincón escocés guarda recuerdos especialmente felices para la pareja. No en vano, este era un lugar que visitaban a menudo cuando eran novios para escapar de miradas indiscretas.
Es habitual que los príncipes de Gales, como muchos otros miembros de la famila real británica, acudan sobre todo en verano al que fue el lugar favorito de descanso de la reina Isabel II . Es el perfecto refugio para hacer picnics familiares, pescar y cazar ciervos en la más absoluta intimidad.
Es allí, en la extensa campiña del noreste del país, donde se oculta Tam-Na-Ghar, una casa de cuento de hadas que fue el primer nidito de amor de Kate y Guillermo tras conocerse en la Universidad de St Andrews . Allí es donde el futuro rey del país la cortejó después de la que joven llamara su atención en un desfile de moda benéfico en 2002. Un episodio que hemos visto recreado recientemente en la última temporada de 'The Crown'.
Situado en los majestuosos terrenos del castillo de Balmoral, en Aberdeenshire, aquel fue el escenario perfecto para que floreciera el romance de los jóvenes tortolitos.
Tam-Na-Ghar fue a parar a las manos del príncipe Guillermo como un regalo de la Reina Madre antes de su muerte en 2002, y los medios británicos coinciden en que allí ha pasado la pareja algunos de los días más felices juntos. El cottage es tan privado que apenas hay fotos de su exterior y ninguna de su interior. De hecho, tan solo se sabe a ciencia cierta que cuenta con tres dormitorios.
Los príncipes de Gales ya han pasado allí algún verano junto a sus tres hijos –George, Charlotte y Louis– y durante las próximas semanas podrían refugiarse de nuevo allí. Sin que aún conozcamos los planes estivales de los royals , sin duda este apartado rincón escocés sería ideal para que Kate Middleton continuara con su recuperación antes de reintegrarse a su agenda oficial seguramente en otoño.
Los príncipes de Gales en su última aparición púbica para celebrar el Trooping the Colour. /
La extensa finca de Balmoral cuenta además de su castillo principal, con unos 150 edificios –algunos se pueden alquilar– entre los que destaca Birkhall, que el rey Carlos describió en su día como «un remanso de paz único». Fue allí donde Carlos y Camila disfrutaron de su luna de miel en 2005 y también ha sido el refugio perfecto para el monarca durante su tratamiento contra el cáncer.
La granja de Bodorgan fue el primer hogar de unos recién casados Kate y Guillermo . Situada junto a la costa norte de Gales -en una playa privada, nada menos- se dice que les encantaba, y los paparazzi no paraban de fotografiar a Kate comprando en el súper local. Con un modesto alquiler de unos 800 euros al mes en aquel momento, la pareja permaneció allí de 2011 a 2013 mientras el príncipe Guillermo estaba destinado en la Real Fuerza Aérea.
Tras una restauración de un millón de libras, Kate y Guillermo dejaron Gales para volver a su residencia real en el palacio 1A de Kensington. Previamente había sido el hogar de la princesa Margarita y contaba con espacio suficiente para la familia de cinco miembros, repartidos en cuatro plantas con múltiples salas de recepción y espacio para el personal.
Look at how gorgeous Tam-na-Ghar is, the house where the Cambridge’s stay when visiting Balmoral.
Kayla Adams (@KaylaAdams___) 29 de agosto de 2020
William was given the three bedroom cottage, by his great-grandmother the Queen Mother just before she died ❤️ pic.twitter.com/ebPcFAYaKw
Luego tenemos Anmer Hall, la casa de los príncipes de Gales en Norfolk, que está considerada como una de las más bellas de toda Inglaterra. Situada a unos 3 kilómetros de la mansión familiar en Sandringham, esta residencia de estilo georgiano tiene diez dormitorios y fue construida en 1802. Fue regalada de Isabel II a Guillermo y Kate cuando se casaron en 2011. Antes de que la pareja se mudara aquí, se embarcaron en una serie de reformas que incluyeron un nuevo tejado, una cocina y un invernadero, además de una redecoración total del interior.
Finalmente, Kate y Guillermo se mudaron a Adelaide Cottage en 2022. Se trata de una casa de cuatro dormitorios situada en los terrenos del castillo de Windsor que en su día se propuso para el príncipe Harry y Meghan Markle. Edificada en 1831, debe su nombre a la esposa de Guillermo IV, la reina Adelaida. Se trata de una 'cottage orné' o cabaña decorada, y por lo poco que ha trascendido sobre su interior, sabemos que cuenta con adornos del yate real, HMY Royal George, así como una chimenea greco-egipcia de mármol.