Kate Middleton en el anuncio de su concierto de Navidad. /
La princesa de Gales «no ha vuelto a la normalidad», pero hay signos inequívocos de «luz al final del túnel». Esas son las palabras de una fuente cercana a los príncipes de Gales que ha recogido la revista estadounidense 'People'. Esta persona ha querido resaltar que el regreso a las funciones completas de Kate Middleton como miembro de la familia real es todavía prematuro, pero su estado de salud sigue mejorando.
La presencia de la esposa del príncipe Guillermo entre los 1.600 invitados a la grabación del concierto Together at Christmas en la Abadía de Westminster fue una de las imágenes más agradables (y tranquilizadoras) para sus muchos fans. Al verla radiante con su largo abrigo rojo diseñado por Sarah Burton para Alexander McQueen, junto al heredero al trono y sus tres hijos, se podría pensar que los largos meses de ausencia marcados por las enfermedades habían llegado a su fin.
No en vano, era la primera vez que se veía a la familia al completo en público desde su aparición en el Trooping the Colour , el desfile de cumpleaños de Carlos III, en junio. Para apoyarla en esta importante cita también estuvo presente todo el clan familiar Middleton, así como otros miembros de la familia real, como Zara Tindall, la princesa Beatriz y la duquesa de Edimburgo.
A esto hay que sumar el hecho de que la propia princesa anunciara el pasado mes de septiembre que su tratamiento contra el cáncer había llegado a su fin y que, desde su hermano James Middleton , hasta su propio esposo, su entorno no ha dejado de transmitir buenas noticias sobre su estado de salud en las últimas semanas.
Según esta persona cercana al entorno de Kate, en estos momentos la royal está concentrada en sí misma y en su familia, «y con razón», añade esta fuente, añadiendo que, si bien su camino hacia la recuperación aún no le permite «volver a la normalidad», se perciben síntomas de que pronto estará completamente bien.
Kate Middleton durante la visita del emir de Catar. /
Estas palabras coinciden con los mensajes de prudencia destilados por el entorno de Kate y por ella misma en el emotivo (y criticado) vídeo con el que anunciaba el fin de su tratamiento. «El viaje del cáncer es complejo, aterrador e impredecible para todos, especialmente para los más cercanos. Aunque he terminado la quimioterapia, mi camino hacia la recuperación y la plena salud es largo y debo seguir tomando cada día como venga«.
Otra fuente mencionada por 'People' también valora positivamente la cautela de Kate a la hora de reanudar sus compromisos oficiales: «Las circunstancias acabarán cambiando. Pero sería muy sensato dar prioridad a pasar más tiempo con su familia«. Estos compromisos los está eligiendo la royal con esmero y además de en el concierto de villancicos y en las celebraciones del Domingo del Recuerdo , a principios de diciembre, fue anfitriona junto al príncipe Guillermo de la visita de Estado del emir de Catar , el jeque Tamim bin Hamad Al Thani, y de su esposa, la jequesa Jawaher.
En un discurso dirigido a los invitados al concierto de grabado en 2023, Kate Middleton aseguró que «no sabía» lo que le esperaba en el año que estaba por venir. El año pasado por estas fechas, la princesa de Gales estaba centrada en su trabajo y en sus hijos, y esperaba con ilusión la llegada de las fiestas navideñas sin saber que se avecinaban algunos de los peores meses de su vida.
La princesa de Gales en su concierto de Navidad de 2024. /
Semanas después se le pracricaba una operación abdominal en el hospital, tras la cual los médicos le comunicaron que habían detectado indicios de cáncer y le aconsejaron someterse a un tratamiento de quimioterapia preventiva. La vida de los príncipes de Gales dio un vuelco. Pero ahora, una vez finalizado su tratamiento, la princesa está empezando a reincorporarse a sus obligaciones y vuelve a sonreír con optimismo.
Sin embargo, el biógrafo de los Windsor, Robert Hardman , advierte que los fans de la royal no deben esperar mucho de ella a corto plazo. En declaraciones al 'Daily Mail', el escritor ha asegurado que «se nos anima a que no veamos esto como un capítulo que se acaba y luego volvemos a la normalidad, porque el cáncer no funciona así. No tiene sentido intentar pasar por alto la realidad de que es una enfermedad impredecible».