La mujer eclipsada por Kate Middleton en el Trooping the Colour: el discreto regreso de Lady Gabriella Windsor tras la tragedia

Lady Gabriella Windsor, hija de los príncipes Michael de Kent y, por tanto, prima segunda del rey Carlos III, estuvo presente en las celebraciones de Trooping the colour de este pasado fin de semana.

Invitada por el monarca, la joven viuda – su marido, Thomas Kingston, murió el pasado 25 de febrero en lo que parece que fue un suicidio– acudió por primera vez a un acto público aunque, en su caso, de forma casi imperceptible.

Nadie reparó en que Ella, como se la conoce en sus círculos más cercanos, fue la protagonista de otra de las reapariciones, con permiso de Kate Middleton , más esperadas. La joven royal estuvo en el balcón del palacio de Buckingham aunque no salió a saludar.

Hace unas semanas se supo que el rey Carlos III, que andaba aún con los preparativos de los actos de Trooping the Colour, había cursado una de sus invitaciones más especiales en la edición de este año. La destinataria era Lady Gabriella Windsor, hija de su primo Michael de Kent y a quien tanto el hijo de Isabel II como los príncipes Guillermo y Harry quieren como casi a una hermana. La relación entre los jóvenes royals es la de primos unos primos muy cercanos que han compartido muchas ocasiones familiares y especiales a lo largo de los años. De ahí la importancia destacada de esta invitación.

Y sobre todo teniendo en cuenta que Ella, como conocen en sus círculos más familiares a Gabriella, atraviesa uno de los peores momentos de su vida , si no el peor. La royal, que cumplió 43 años en pasado mes de abril, se quedó viuda en febrero tras la muerte de su marido, Thomas Kingston. Al financiero le encontraron muerto en al residencia de sus padres en los Costwolds en extrañas circunstancias y, según se supo después, con una pistola al lado. Todo apunta a que Kingston, que tenía 45 años, se suicidó, dejando sumida en la más profunda de las tristezas a su viuda y al resto de familia y amigos.

Quiso la casualidad que la inesperada muerte fue anunciada por el palacio de Buckingham el mismo día que se celebraba en Londres en funeral por el rey Constantino de Grecia , un acto solemne que congregó en la capital inglesa a la plana mayor de las casas reales europeas, incluida la española. Desde entonces, la querida prima segunda del rey no ha vuelto a aparecer en público hasta que este sábado, su presencia en los fastos de conmemoración del cumpleaños del monarca, conocidos como Trooping the colour, pasó casi inadvertida.

Hace falta fijarse mucho y muy bien en las fotos que han circulado de los actos del pasado sábado para poder caer en la cuenta de que la mujer vestida de rosa que aparece dentro del balcón y detrás de la princesa Ana es Lady Gabriella Windsor. Ataviada con un vestido y tocado en tono rosa empolvado, uno de sus colores preferidos en los actos públicos, por cierto, Ella aparece dentro, pero visible desde fuera, justo por detrás de la princesa Ana y su segundo marido, Sr Timothy Laurence, que sí salieron a saludar al público.

Este insólito hecho pone de manifiesto varios importantes asuntos. El primero es que, según parece, Lady Gabriella Windsor va recuperando la normalidad en su vida tras el trágico fallecimiento de su marido Thomas Kingston, con quien se casó en una boda de ensueño en 2019. Ella quedó devastada con su desaparición, pero con el cariño de su familia y amigos está superando este trance que la marcará de por vida.

Además, el hecho de que la hija de los príncipes Michael de Kent acudiera a los fastos en los que también reapareció Kate Middleton, invitan a pensar que se trata de un bonito y respetuoso gesto hacia la Familia Real en la celebración del cumpleaños del monarca. Si la princesa de Gales, que atraviesa un duro tratamiento para curarse de su cáncer , hizo el esfuerzo de volver a un acto oficial tras meses alejada del foco público, cómo no iba a hacer lo mismo la prima segunda del rey.

Su presencia dentro del balcón ha sido, como vemos, muy especial y significativa. Es sabido que el rey Carlos III mantiene una estrategia clara y firme en lo referido a qué personas de su familia pueden o no acceder al famoso balcón del palacio de Buckingham.

Es su forma de establecer los límites entre el ámbito institucional y el familiar. Pero en algunas ocasiones el monarca invita a miembros de su familia en clave privada. Como ha ocurrido con eso, Gabriella Windsor, presente pero, al mismo tiempo, casi imperceptible.

Un modo de agradecer al rey su gentil invitación y, al mismo tiempo, de volver poco a poco a esos actos institucionales de la Familia Real de los que tanto ella como sus padres, María Cristina y Michael de Kent, forman parte en importantes ocasiones. Y aunque su presencia apenas fue visible –llegó al palacio antes de lo previsto para no ser captada por los fotógrafos–, demuestra que su respeto y cariño a la Familia Real está por encima de todo.