Tras varios años viviendo en Londres, en el barrio de Chelsea, en una mansión del siglo XVIII, con su familia, Marie-Chantal Miller y su esposo, el príncipe Pablo de Grecia , se instalaron hace tres años en Nueva York. La casa es una espectacular vivienda de varias plantas situada en una de las zonas más selectas de la ciudad. Sus interiores de colores suaves y decorados con obras de arte contemporáneo han salido en las más prestigiosas revistas de estilo de vida.
Sin embargo, la «socialité» y su familia podrían escoger instalarse en cualquiera de las otras cuatro mansiones que poseen en lugares como Las Bahamas, Los Costwolds, en Gran Bretaña, o Londres, y que Marie Chantal y sus hijos muestran en sus cuentas de Instagram, al tiempo que dan noticia de sus vacaciones de verano, sus celebraciones de Pascua o sus fiestas de cumpleaños.
Marie-Chantal, o MC (pronunciado Emsi), para los íntimos, es la mediana de las hermanas Miller, las hijas del multimillonario estadounidense Robert Miller, que hizo una inmensa fortuna con la creación de los duty free de los aeropuertos asiáticos, y de la «socialité» ecuatoriana María Clara Chantal Pesantes.
En 1995 se casó con Pablo de Grecia, el primogénito de los reyes de Grecia Constantino y Ana María, al que conoció en una cita a ciegas, y Marie Chantal, que había crecido en Hong Kong y en Nueva York, se trasladó recién casada a Londres, donde nacieron sus hijos.
El cuartel general de la familia estuvo durante años en la capital inglesa. Tras vivir en una primera mansión en Chelsea, se trasladaron a una más grande, frente al río Támesis, construida en el siglo XVIII sobre el terreno que en su día ocupó la casa de campo de Ana Bolena y Enrique VIII, y con uno de los jardines más grandes de la zona. La casa está decorada por el interiorista François Catroux, muy reclamado por la élite artística y empresarial internacional.
La princesa lo conocía desde la infancia y adora su estilo. Catroux escogió una armósfera clásica contemporánea, en tonos beiges, y con exquisitas obras de arte. La casa contaba con una gran cocina en el sótano y una más pequeña en la planta principal, bajo una claraboya de cristal que iluminaba la mesa en la que se reunía la familia.
Sin embargo, el matrimonio decidió regresar a Nueva York, para facilitar los estudios de sus hijos. Situada en el Upper East Side, la zona más exclusiva de Manhattan, la casa en la que se instalaron fue construida en 1913, y en ella había vivido Marie Chantal de adolescente con sus padres, a quienes perteneció en su día. La primera reforma la hizo el restaurador Renzo Mongiardino, que respetó su estilo histórico.
Marie Chantal puso a punto de nuevo la decoración para albergar a sus cinco hijos y recurrió al decorador François Catroux de nuevo. Al ser muy buenos amigos, todo el proceso fue muy natural, según confesaba a la edición norteamericana de la revista AD. El blanco, el gris y el marrón y los tonos neutros fueron los colores elegidos para las paredes, en la que se conservaron las molduras antiguas y los paneles, que le dan su personalidad.
En ellas brillan obras de artistas como Jean-Michel Basquiat, Damien Hirst, Andy Warhol –para quien Marie Chantal trabajó como becaria– o Rob Pruitt, entre otros. Las habitaciones de sus hijos – los príncipes Olympia, Constantino, Achileas, Odysseas y Aristides– están en las dos plantas superiores y han sido decoradas por Michael S. Smith, el marido del ex embajador de Estados Unidos en España James Costos.
Pero esta no es la única vivienda que posee la familia en Estados Unidos. También es propietaria de una mansión en Los Hamptons, en Southampton, adquirida en 2020 en una de las zonas de veraneo más exclusivas del estado de Nueva York, a 150 kilómetros de Manhattan, por 16 millones de euros.
La casa, enclavada en una propiedad de cuatro kilómetros cuadrados, es un diseño del arquitecto Peter Schult, con 10 dormitorios, ocho baños, pista de tenis, piscina exterior e interior, gimnasio, biblioteca y rodeada de enormes jardines y de las propiedades de Gwyneth Palrow, Jennifer Lopez o Steven Spielberg.
La cocina de estilo victoriano, con suelo de madera y dos grandes islas, acoge los desayunos y las cenas de la familia. El comedor, con un mirador sobre el jardín es otra de las estancias favoritas de Marie Chantal, porque le encanta ejercer de anfitriona.
Pero si hay un lugar en el que le guste a la familia terminar el verano o celebrar Pascua y Fin de Año ese es su casa de Harbour Island, en Las Bahamas. Allí, los Miller, la familia de Marie-Chantal, tiene una pequeña mansión con vistas a la playa, famosa en todo el mundo por su arena rosa y sus atardeceres de cine. Es uno de los destinos favoritos de la Alta Sociedad para despedir el año.
Fue la hermana de la reina Isabel II, la Princesa Margarita, quien lo puso de moda hace más de 40 años, y, desde entonces, este paraíso caribeño se ha convertido en un discreto refugio para los más adinerados. Marie-Chantal de Grecia se reencuentra en Bahamas con sus padres y con sus hermanas , Alexandra von Fürstenberg y Pia Getty y sus sobrinos: Talita y Tassilo von Fürstenberg, e Isabelle, Conrad, Maximus y Robert Maximilian Getty. La princesa fotografía sus puestas de sol, que muestra en Instagram, cuando se encuentra allí.
Pero, cuando quiere disfrutar de la campiña inglesa, Marie Chantal se dirige a su preciosa mansión en los Costwolds, en Adlestrop en Gloucestershire, donde posee otra residencia, con coto privado de caza. Fue en esta casa, de exquista decoración campestre británica, donde Marie Chantal organizó una fiesta de cumpleaños de ensueño para su hija Olympia, cuando cumplió 21 años.
Rodeada por Lauren Santo Domingo, Eugenie Niarchos, Poppy Delevigne o Nicky Hilton y varios miembros de la realeza europea, entre ellos el Rey Felipe VI, la primogénita de Marie Chantal disfrutó de un ambiente festivo en el que los invitados se vistieron con vistosos disfraces y coronas iluminadas.
Pero la familia podría haber elegido el «cottage» del siglo XVIII que posee en West Sussex, llamado Beale House. Decorada de forma rústica, está situada sobre un vasto terreno verde que se aprecia desde sus grandes ventanales. Esta casa también fue testigo de una histórica fiesta.
En junio del 2007, Marie-Chantal organizó una celebración de disfraces con el leitmotiv de «angeles y diablos» para celebrar el 40 cumpleaños de su marido, el príncipe Pablo. Entre los invitados, las Infantas de España, la princesa Mette-Marit y el príncipe Haakon de Noruega, la modelo Naomi Campbell, la actriz Elizabeth Hurley, miembros de la familia Murdoch y el príncipe Andrés de Inglaterra.
20 de enero-18 de febrero
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