El regreso de Miriam de Ungría a España: las secuelas de su trágico accidente y el reencuentro con sus hijos

Discreta como es su costumbre, Miriam de Ungría lleva unos días de regreso en Madrid, abandonando momentáneamente su vida en la corte real de Jordania, de la que forma parte desde 2022 cuando se casó con el príncipe Ghazi bin Muhammad . Ha sido la revista '¡Hola!' la que ha desvelado su presencia en la capital y también el principal motivo de este viaje: someterse a una intervención quirúrgica en la mano derecha. 

Este paso por el hospital de la princesa, que ha sido fotografiada luciendo un aparatoso vendaje y del brazo de su hijo Beltrán, que se ha convertido en su mejor enfermero durante estos días, no se debe a ninguna lesión reciente. Según añade el citado medio, viene derivado de las secuelas que aún sufre desde el gravísimo accidente de tráfico que sufrió en 2008 junto a su entonces esposo, Kardam de Bulgaria.

El Jaguar que conducía el primogénito de los reyes Simeón II y Margarita se salía de la carretera a la altura del kilómetro 42 de la A-1 a su paso por el municipio madrileño de El Molar y, tras colisionar con un árbol, quedaba volcado. Tras el fuerte impacto, la pareja quedó atrapada entre los hierros del vehículo, por lo que fue necesaria la intervención de los bomberos. Dada la gravedad de sus heridas, el príncipe fue trasladado en helicóptero en estado muy grave al hospital donde quedó ingresado con un traumatismo craneoencefálico severo e importantes daños en ambas manos.

Miriam de Ungría sufrió tan solo daños leves tras el trágico incidente, pero a consecuencia del mismo, su marido permanecería varios años postrado en una cama. La princesa cuidó a su marido hasta el último momento, intentando encontrar terapias que pudieran mejorar su estado. Finalmente, Kardam fallecía en 2015, a los 52 años.

La visita a la capital de España de la princesa jordana ha supuesto para ella también el reencuentro con sus hijos. Como hemos dicho, ha sido el benjamín de la familia, Beltrán, al que veíamos acompañar a su madre a la salida de la clínica Ruber Internacional.

El joven príncipe se encuentra en estos momentos de vacaciones tras conseguir su doctorado en Física del Clima en el Imperial College de Londres. A sus 25 años, el sobrino de Kyril de Bulgaria es uno de los royals más discretos del viejo continente y desde 2017 vive en el Reino Unido. Gran aficionado al piano, el joven ha destacado estos años sobre todo por sus brillantes logros académicos.

Aunque de momento no les hemos visto juntos, es previsible que Miriam de Ungría aproveche estos días en Europa para verse también con su otro hijo, el príncipe Boris . Volcado en su faceta de escultor tras estudiar Bellas Artes también en Londres como su hermano, volvía recientemente a Madrid para estudiar un máster en Relaciones Internacionales en la IE Business School. En la capital se le ha visto a menudo con la princesa Amalia de Holanda, despertando incluso rumores de un romance nunca confirmado oficialmente.

Siempre muy unidos, el pasado mes de abril madre e hijos participaban en el emotivo traslado de los restos mortales del príncipe Kardam a su país de origen, que tenía lugar en la víspera del noveno aniversario de su trágico fallecimiento. En octubre del año pasado también les vimos tomar parte en la celebración de la fiesta privada por los 18 años de la princesa Leonor , ya que toda la familia real búlgara tiene una relación muy estrecha con la española.

La boda de Miriam de Ungría y el príncipe jordano Ghazi bin Muhammad tuvo lugar el 3 de septiembre de 2022 en el palacio de Raghadan y en total intimidad. Apenas un puñado de invitados, entre los que se encontraban Boris y Beltrán. El 'sí, quiero' pilló por sorpresa a la opinión pública, ya que no habían trascendido noticias previas sobre este noviazgo. El rey Abdalá, primo del novio , también asistió a la ceremonia, de la que se distribuyó una fotografía en la que aparecían los recién casados con el monarca jordano.

El marido de Miriam es hijo del príncipe Muhammad bin Talal de Jordania y ocupa el decimoctavo lugar en la línea de sucesión al trono hachemita. Divorciado y con cuatro hijos de su primer matrimonio, es consejero del esposo de la reina Rania y también responsable de varias fundaciones reales relacionadas con la cultura y la educación.

Tras comenzar su nueva vida en Jordania se llegó a asegurar que Miriam se había cambiado de nombre e incluso se había tenido que convertir al islam, renunciando al credo ortodoxo que profesa. Pero nada más lejos de la realidad. Actualmente vive a caballo entre Amán y Londres con su segundo marido y sigue manteniendo sus títulos de princesa de Tarnovo y princesa de Bulgaria. En la actualidad parece haber dejado en barbecho sus negocios de joyería y se encuentra volcadac en apoyar a diferentes organizaciones benéficas en Jordania.