Retrato del príncipe heredero de Marruecos, Moulay el Hassan /
En la misma semana en que varios reyes europeos han tenido que pasar por el quirófano ( Margarita de Dinamarca , Carlos Gustavo de Noruega y la princesa Beatriz de Holanda) la hermética corte marroquí ha dado una noticia preocupante: el rey Mohammed VI ha tenido que anular un viaje oficial a Senegal por enfermedad.
El monarca de 59 años lleva años arrastrando y encadenando problemas de salud. En 2018, y a raíz de una operación de corazón que tuvieron que practicarle de urgencia en París, el mundo entero supo que el rey de Marruecos padecía desde haceía años sarcoidosis, una enfermedad que ha acabado afectando a los pulmones del monarca entre otros órganos.
La mala salud del padre ha marcado la agenda de su heredero, el joven de 20 años Moulay el Hassan, al que el propio rey se ha encargado personalmente de formar y que le acompaña a las cumbres internacionales más relevantes desde que tenía apenas 15 años. ¿Pero quién es realmente Moulay El Hassan?
Como si fuera Jaime, el heredero de Alberto II de Mónaco el príncipe marroquí Moulay el Hassan se estrenó en los actos oficiales muy pronto: cuando apenas tenía siete años de edad.
A los ocho ya estaba dando discursos (como el que ofreció en la Real Academia Militar de Meknes), a los 10 representó a su padre vestido con un traje impecable en el entierro de un expresidente francés y ahora que ya ha cumplido los 20 años todo el mundo le vigila como sucesor inminente de su padre.
Como otros futuros herederos al estilo de Hussein de Jordania , ser el favorito de su padre ha dotado a Moulay el Hassan de algunas ventajas, como la de festejar su nacimiento (que tuvo lugar el 8 de mayo de 2003) con más de 100 cañonazos o poder lucir en la muñeca relojes de más de 30.000 euros.
Pero qué duda cabe que ser el heredero de un reino también presenta algunas desventajas. Cuentan los escasos rumores que circulan sobre la corte marroquí que el joven heredero del trono estaba muy apegado a su madre, la caída en desgracia princesa Lalla Salma y que el divorcio de sus padres le colocó en una difícil situación.
El príncipe de niño a los pies de su padre. En el extremo su madre, la princesa Lalla Salma. /
En el país norteafricano todo el mundo supone que, más pronto que tarde, Mohamed VI abdicará a favor de su hijo que ascenderá al trono convirtiéndose en el rey Hassan III.
Se supone que comenzará entonces una lucha de poder silenciosa en la trastienda de palacio entre los regentes del joven príncipe, con dos bandos enfrentados: de un lado las tres princesas hermanas del rey actual y del otro la madre del nuevo rey, la princesa Salma.
Hasta que ese momento llegue y descubramos quién manda de verdad en la dinastía marroquí, el siempre bien educado y contenido Moulay se conforma con encarnar al más correcto de los príncipes que hablan árabe protagonizando cero escándalos.
De hecho, los incidentes más graves que ha protagonizado ocurrieron cuando en Tiktok se viralizó un vídeo suyo riéndose hasta no poder más o cuando se filtró una foto junto a su padre en la que se le veía con un botón mal abrochado de la camisa.
A pesar de su constante presencia pública acompañando o incluso sustituyendo a su padre (como cuando fue el encargado de recibir en Rabat a Meghan Markle y el príncipe Harry cuando aún ejercían de duques de Sussex), poco o nada ha trascendido de quién es en realidad el príncipe heredero de Marruecos.
Sabemos que se graduó con honores en el bachillerato internacionalque escogió (rama de economía y ciencias sociales) antes de regresar a la universidad marroquí. También que le apodan Smyet Sidi y que ha convertido su estilo de corte de pelo en trending topic en su país.
Antes de sus incursiones fuera de palacio Moulay el Hassan permaneció la mayor parte de su vida dentro de los muros de palacio, en la escuela real de Rabat formada para él y que contaba tan solo con cinco niños como compañeros. Niños escogidos por los adultos de la corte por «representar» diferentes extracciones sociales y que procedían de distintos puntos del país.
Para cumplir su futura función como emir (cabeza visible del islam en su país y jefe de los creyentes) Moulay ha sido educado también por la escuela coránica del palacio real. Y por supuesto ha recibido formación militar en el mismo lugar en el que la recibió su padre: el Royal College.
Para cumplir su futura función como emir (cabeza visible del islam en su país y jefe de los creyentes) Moulay ha sido educado también por la escuela coránica del palacio real. Y por supuesto ha recibido formación militar en el mismo lugar en el que la recibió su padre: el Royal College.
De él han trascendido pocos datos, aunque algunos sirven para humanizarle un poco. Como que era un gran seguidor del futbolista Lionel Messi, que adora la hípica y que habla cuatro idiomas con fluidez.
Hasta que no cumplió los 18 años Moulay el Hassan no pudo salir de su zona de confort palaciega, aunque la ampliación de la burbuja, en su caso, fue pequeña: tras su paso por el bachillerato internacinal deció continuar su formación en su país en vez de en otro lugar.
Se matriculó en Ciencias Económicas y Sociales en la universidad politécnica Mohamed VI. En principio la idea era que el heredero se instalara en un costoso chalet ecológico situado en el campus de Ben Guerir, a 250 km de Rabat, para que acudiera a la sede que la universidad tiene en esa ciudad.
Vídeo. Quién es quién en la familia real jordana
Pero en aquel momento Moulay decidió que prefería quedarse en la capital de Marruecos en vez de instalarse 250 km lejos de su madre, una mujer que lleva desaparecida de la escena pública años pero que los medios aseguran que aún vive en Rabat criando a la hermana de Moulay el Hassan, la princesa Lalla Khadija.
Que Moulay El Hassan, decida cuando sea rey recuperar o no a su querida madre como figura pública es solo una de tantas incógnitas que rodean al heredero del trono marroquí.