ARRASÓ EN LA BODA EN JORDANIA Cómo se ha convertido la jequesa de Catar Moza bint Nasser al-Missned en la mujer más poderosa de Londres (con más propiedades que Carlos III)

Ni la novia, vestida de Elie Saab, ni la madrina, Rania de Jordania , pudieron compararse con la jequesa de Catar Moza bint Nasser en la última gran boda 'royal'. La aristócrata catarí paseó, imperial ella, un impagable abrigo del archivo de Valentino (de la colección de Alta Costura de 1989, específicamente) inspirado en el arquitecto vienés Josef Hoffman y, más tarde, un vestido verde limón de la misma firma que fulminó los looks de todas las reinas presentes. Fue una demostración de poder brutal.

La jequesa Moza bint Nasser entra en los salones del mundo como Putin debe irrumpir en las reuniones de la Duma rusa: como una apisonadora del estilo. A sus 63 años y sin agenda oficial que motive un seguimiento al dedillo, acumula más de un millón de seguidores en su cuenta de Instagram. La alta costura es su patria, pero su poder va mucho más allá del archivo de las leyendas de la costura.

Hay que aclarar que el título de jequesa con el que habitualmente se identifica a Moza bint Nasser es del todo mediático, pues en realidad es la segunda mujer del padre del actual emir (que tuvo tres) y la primera consorte en ser vista en público. Bajo su influencia en palacio, Catar aprobó las leyes que han hecho avanzar en derechos a las mujeres: derecho a voto, derecho a postularse en las elecciones, derecho a un salario igualitario.

La jequesa de Catar Moza bint Nasser estuvo casada con el emir de Catar 27 años y tuvo siete hijos, uno de ellos el actual emir, Tamim bin Hamad Al Thani. A lo largo de casi tres décadas, apoyó todo tipo de iniciativas para el avance de la mujer, motivó un uso de la moda para la concienciación en sostenibilidad y se dedicó, también, a los jóvenes. Su protagonismo en la vida social del país fue tal, que la apodaron la princesa Grace del mundo árabe.

Evidentemente, estamos ante una mujer capaz de ejercer su influencia incluso en las condiciones más adversas, allí donde la costumbre y las instituciones religiosas se oponen a la igualdad. Como vimos en Jordania , la jequesa de Catar Moza bint Nasser supo utilizar todas las armas a su alcance para acumular poder, empezando por el ascendiente de la belleza y la elegancia, dos cualidades incuestionables en cualquier mujer. Importante: sin ayuda de ninguna estilista.

«Mi estilo se basa en respetar la tradición y, a la vez, respirar modernidad y ser práctico», ha confesado la jequesa Moza bint Nasser en varias entrevistas. «No tengo estilista porque veo imposible encontrar a una persona que entendiera lo que busco. Además, la moda me relaja. Cuando estoy exhausta, me meto en mi vestidor y me pruebo ropa».

Los imponentes looks de la jequesa de Catar no pueden ocultar, sin embargo, sus credenciales universitarias: título en sociología, master en Política Pública, Doctor Honoris Causa en Letras Humanas y Doctorado Honoris Causa de la Universidad de Georgetown. Su formación no es menor que su olfato para los negocios: se ha convertido, propiedad a propiedad, en la mujer más poderosa de Londres.

Moza bint Nasser posee más propiedades en la capital financiera de Europa que el mismísimo rey Carlos III . En realidad, la jequesa de Catar participa de las incalculables inversiones de la familia Al Thani que, evidentemente, inciden en uno de los mercados inmobiliarios más lujosos y alcistas del mundo. Posee, por ejemplo, los icónicos almacenes Harrods, que pertenecieron a los Al Fayed hasta 2010.

También se cuentan como propiedad de los fondos de inversión cataríes asociados a la familia real edificios como el Shard, el rascacielos más alto de europa, obra de Renzo Piano. La villa olímpica, construida para las Olimpiadas de 2012, también es suya. Lo mismo que el edificio de la embajada estadounidense, en Grosvenor Square, parte del mercado de Camden, la mitad del bloque de apartamentos más caro del mundo (en Hyde Park) y Chelsie Barracks, un terreno listo para el lujo en Belgravia.

El estado de Catar o, lo que es lo mismo, la familia real catarí posee el 8% de lo que se mueve en la bolsa de Londres, un montante similar al que gobierna el Barclays Bank. La jequesa Mozar bin Nasser ha sido señalada, sin embargo, como la responsable directa de la entrada de las inversiones de la familia Al Thani en la moda. Mayhoola Group, su fondo de inversión, posee Balmain, Valentino o Pal Zileri.

Que no se escape una adquisición residencial de la jequesa de Catar y su hijo, tres edificios contiguos de la época de la Regencia, con imponente estilo grecoromano y vistas a Regent's Park. Se reformaron para construir una gran mansión que y se cuenta como la casa particular más cara de Reino Unido. Con sitio de sobra para alojar a toda la familia Al Thani.