Carlos de Gales y Lucía Santa Cruz en su etapa de novios /
La historia sobre cómo se conocieron el actual rey británico, Carlos III , y la actual reina consorte, Camilla de Cornualles, no es como te la han contado en las películas y Netflix. La protagonista real de este romance de final regio y felicísimo tiene nombre y apellidos propios: Lucía Santa Cruz, ex novia de Carlos de Gales, íntima de Camilla Parker Bowles y cupido ocasional.
Corría el año 1971 y Lucía Santa Cruz, que acababa de debutar como historiadora y escritora con su participación en el libro «Tres ensayos sobre la mujer chilena», actuaba de anfitriona en su casa londinense.
No hubo, por lo tanto, partido de polo en el primer encuentro de Camilla y Garlos de Gales, sino mucha charla de salón y una descarada hija de diplomático que procedió a pronunciar la frase que años más tarde todo el mundo le asignaría a Camilla de Cornualles: el famoso « ¿sabíais que vuestros antepasados fueron amantes?».
Lucía Santa Cruz fue quien presentó a Camilla a Carlos en aquella cena, fue quién les recordó lo que hacían juntos su ancestros cuando se quedaban solos y la que les dejó atrás mientras les sugería que «mezclaran sus genes».
Para aquel momento Lucía ya había superado con creces su ruptura con el propio príncipe Carlos. La prensa británica y algunos biógrafos reales la definen como el primer amor imposible del heredero de la corona.
Lucía Santa Cruz era la bellísima y agasajada hija del embajador chileno en Londres, Víctor Santa Cruz, durante los mandatos de los presidentes chilenos Ricardo Froilán Lagos Escobar.
Su estancia en Reino Unido le permitió acceder a la educación más elitista que existe y formarse en las dos áreas que más seducen al actual rey británico, la historia y el arte. De hecho su idilio comenzó cuando coincidieron en Cambridge.
Carlos llegó a estar tan enamorado de ella que incluso presentó a la joven a la reina Isabel II en Balmoral, pero Lucía Santa Cruz tenía un gran hándicap: era católica y el príncipe estaba obligado a casarse con una mujer protestante o, de loc ontrario, renunciar a la corona.
Para cuando se produjo aquel primer encuentro entre Carlos y Camilla que propició Lucía Santa Cruz, esta ya había superado desde hacía mucho la ruptura con el príncipe y estaba dispuesta a ejercer de cupido.
Su vida estaba destinada a discurrir por otros derroteros que poco tenían que ver con las familias reales europeas. En su faceta más profesional Lucía Santa Cruz puede presumir de haber conseguido todo lo que se propuso y, de paso, ser considerada la «musa» de la derecha en su Chile natal.
Ha escrito libros, transitado por grandes empresas como Nestlé y el Banco Santander y ejercido como docente en dos universidad chilenas. También consiguió fama como columnista y el propio presidente de su país, Ricardo Froilán Lagos Escobar, le pidió que dirigiera la televisión nacional chilena durante su mandato.
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En lo personal vive en una villa de reminiscencias italianas y concede pocas entrevistas, pero los que tienen el privilegio de compartir mesa y mantel con ella, como le pasa a la socialité Carmen Lomana que la conoció a atrvés de su esposo, se pueden llevar la sorpresa de compartir también su tiempo con los actuales reyes británicos.
Lucía Santa Cruz se casó con el ex político Juan Luis Ossa y tuvo tres hijos con él (aunque ha dado a luz en cuatro ocasiones, su primogénita murió al nacer). Ni el paso del tiempo ni las vicisitudes de la vida han afectado a su amistad con los royals: su amistad con Camilla y Carlos permenece intacta así como los retratos que tiene de ellos colocados en el salón de su casa. Una amistad que marcó la vida del heredero de Isabel II para siempre.
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