Andrew Parker Bowles junto a Camilla, en una imagen de 1992. / /
Camilla, mujer de Carlos III , es ahora reina consorte y para llegar a ese punto tuvo que sortear numerosos obstáculos. Y no podemos decir que uno de ellos haya sido su exmarido, Andrew Parker Bowles , a quien engañaba con el entonces príncipe de Gales, pues su relación ha sido siempre excelente y, prueba de ella, es la presencia de este en la coronación.
El pasado 4 de julio se cumplieron 50 años de la boda de Andrew y Camilla Parker Bowles , que estuvieron casados hasta 1995. Verle llegar a la abadía de Westminster, en el día en el que su mujer era coronada, fue todo un ejemplo de fair play y afecto que es poco habitual en parejas que fueron tan longevas como la suya. Fue un orgullo para él ver también a sus nietos, Freddy Parker Bowles, de 13 años, y Gus y Louis López, de 13 , hijos de Tom y Laura Parker Bowles, respectivamente, ejercer de pajes de honor y salir al balcón del palacio de Buckingham a saludar a la gente que les aclamaba desde abajo.
La relación de Andrew Parker Bowles con la familia real viene muy de lejos. No en vano jugaba al polo en el mismo equipo que el príncipe Carlos e incluso fue pareja de la princesa Ana . Su ruptura fue amistosa y, de nuevo, nos encontramos con otro gesto que así lo evidencia, fue padrino de bautismo de la hija de esa, Zara Tindall.
Su historia no se oficializó y, por lo tanto, no hubo anuncio de compromiso. Según la especialista en casas reales Sally Bedell Smith, una de las razones por las que no habría prosperado fue que Andrew era católico, lo que no le convertía en el candidato más idóneo para unirse a los Windsor. Cuando su historia terminó, apareció en la vida de la princesa Mark Phillips, de quien está divorciada.
Andrew Parker Bowles es conocido popularmente como el general de brigada, incluso ahora que está retirado del ejército desde hace tantos años. Se casó por el rito católico con Camilla Shand, ahora reina consorte del Reino Unido , en 1973, y fueron padres de dos hijos, Tom, que es un reconocido escritor y crítico culinario, y Laura Lópes, que tienen en la actualidad 48 y 45 años, respectivamente. Su matrimonio estuvo salpicado por las infidelidades de ambos, por lo que no fue un factor decisivo para que entre ellos quedara la sombra del rencor.
Andrew y Camilla Parker Bowles, el día de su boda con Carlos III. / /
Tras su divorcio en 1995, Andrew Parker Bowles volvió a casarse al año siguiente con Rosemary Pitman, mientras que Camilla vivió un auténtico calvario mediático, especialmente tras la muerte de su eterna rival, Diana de Gales, en un accidente de tráfico en París el 31 de agosto de 1997. Finalmente, tras muchos años de espera y un silencioso trabajo para mejorar su reputación ante la opinión pública, Carlos y Camila se casaron en la capilla de San Jorge, en el castillo de Windsor el 9 de abril de 2005.
Entre los invitados a esta boda, que dio la vuelta al mundo, se encontraban precisamente Andrew y su segunda mujer. Rosemary Parker Bowles enfermó de cáncer y murió el 10 de enero de 2010. Se ponía punto y final de manera trágica a su historia de amor y para Parker-Bowles fue uno de los golpes más duros de su vida.
Su segunda mujer también había estado casada anteriormente, con el teniente coronel Hugh Pitman, con quien contrajo matrimonio cuando tenía 21 años, y tuvieron tres hijos, Henry, William y Tom. De nuevo, moverse en los mismos círculos resultó determinante para que Andrew Parker-Bowles rehiciera su vida después de su divorcio de Camilla. En este caso, porque era oficial en el mismo regimiento que el primer marido de Rosemary, a quien conocía desde entonces.
El 25 marzo de ese año se celebró un servicio religioso en memoria de Rosemary Parker-Bowles en la Guards Chapel de Londres al que acudió Camilla, quien se mostró muy afectuosa con su exmarido y arropó a los hijos de la finada, muy afectados por la pérdida. También acudió la princesa Ana, que mantiene una estrecha relación con la familia.
Camilla el día de su boda con Andrew Parker Bowles. / /
Parker Bowles es una figura de enorme relevancia pública en el Reino Unido. Como ejemplo podemos subrayar que en 2003 posó para el cuadro El brigadier de Lucian Freud, una obra que se vendió en la casa de subastas Christie's por la astronómica cifra de casi 35 millones de euros. Una década antes, el actor Simon Wilson le interpretó en el telefilme What Love Means y Andrew Buchan se metió en su piel en la serie The Crown, en 2019.