Camilla Parker cumple 76 años con un gran problema: la alargada sombra de Kate Middleton que también afecta a Carlos III

Los reyes Carlos III y Camilla han llegado al trono de Reino Unido después de superar innumerables presiones, muchas de ellas debidas a la polémica relación sentimental que les unió en los años 70. Jamás entró en los cálculos de la monarquía que Camilla Parker-Bowles , amante oficial del entonces príncipe de Gales, se convirtiera en reina. Lo ha hecho en este 2023: Camilla cumple 76 años con la corona, cetro y capa de armiño en su poder.

El primer cumpleaños de la reina Camilla tras su coronación seguro que tiene una significación especial, aunque la joven Camilla jamás deseó sentarse en el trono más importante de Europa. En cambio, aspiraba a la típica vida cómoda de cualquier aristócrata británica con gustos más bien tradicionales. Camilla Parker-Bowles es más feliz con Barbour y botas en la campiña que luciendo diamantes y vestidos de seda.

Sea como fuere, Camilla ha sabido superar todas las reticencias al respecto de su papel en la institución monárquica. Algo que se debe a su propio talante y, también, a los equipos de relaciones públicas que ha contratado el rey Carlos III para convencer al público de que es idónea como reina. Increíblemente, el rechazo que provocaba años después del fallecimiento de Diana de Gales ha desaparecido.

La reina Camilla cumple 76 años con una misión cumplida: merecerse el trono que hoy ocupa al lado del rey Carlos III . Sin embargo, no se detienen ahí los retos que ha de enfrentar como monarca. Le quedan, de hecho, los más complicados y retorcidos que pueden existir: los relativos a su adaptación a una institución que no solo es difícil, sino incluso peligrosa.

Camilla Parker-Bowles conoce de sobra las particularidades e interioridades de Buckingham Palace, pues lleva desde 1998 muy cerca de ellas. En estos meses se ha puesto por fin en las manos del equipo que dirige los destinos de los monarcas británicos y sus consortes y, lo que es más importante, ha comenzado su convivencia con Carlos como rey. Sin duda, las cosas han cambiado.

Algunos detalles de la convivencia entre la reina Camilla y el rey Carlos son de dominio público. Por ejemplo, que duermen en habitaciones separadas, una costumbre aristocrática pensada para ayudar a sobrevivir a los matrimonios más o menos arreglados, que hoy pueden adoptar las parejas sea cual sea su edad. De hecho, es una costumbre habitual entre los monarcas británicos.

Claramente, la convivencia no es un problema para Camilla y Carlos, ya perfectamente acoplados el uno al otro. Sí supone un problema la manera en la que se mueve la maquinaria de Buckingham Palace, engrasada gracias a la popularidad de los distintos miembros de la familia real. Los problemas más graves que han tenido los Windsor tienen que ver con esto: quién es el malo y quién el bueno a ojos del público general.

Sabemos de las maquinaciones de los equipos de comunicación y relaciones públicas de Buckingham Palace para convertir a los monarcas en inexpugnables: han filtrado rumores malintencionados sobre miembros secundarios de la familia real, Harry y Meghan, por ejemplo, pero también de Kate Middleton en su momento. Ahoral, al rey Carlos III le preocupa que la princesa de Gales sea más popular que Camilla.

Así lo afirma Richard Eden, editor de la información sobre la Casa Real de 'The Daily Mail', quien sostiene que Carlos III desea la atención que recibe Kate Middleton . El rey espera que Camilla sea capaz de concitar la misma expectación que la bellísima princesa de Gales. Algo muy complicado para una reina madura, que ya no dispone de las ventajas de la juventud para reclamar su sitio en los medios de comunicación. La monarca tendrá que usar otras armas.

Esta envidia del rey Carlos hacia Kate Middleton no es nueva. La reveló el príncipe Harry en 'Spare', su polémico libro de memorias. De hecho, desveló que Carlos y Camilla llegaron a reprender al príncipe Guillermo porque su esposa «desviaba la atención de las causas que abanderaban».

Si Carlos III espera que la reina Camilla eclipse o, al menos, compita con la princesa de Gales puede haber un problema. El público lo tiene claro: Kate Middleton es la más popular de la familia real, muy por encima del príncipe Guillermo, la princesa real Ana y el rey, que ocupa el cuarto lugar. Camilla les sigue a mucha distancia: se queda en el número 10 de la lista.