Doña Letizia junto a los futuros reyes de Dinamarca. / / GTRES

ROYALS DE SU TIEMPO

Cómo es la relación de la reina Letizia y Mary de Dinamarca: vidas paralelas, tragedias superadas y un momento delicado

La reina Letizia y la futura consorte de Dinamarca, Mary Donaldson han pasado por caminos muy parecidos. En su tránsito, llenos de críticas y dificultades, pero de las que han salido airosas y con mayor peso para la sociedad.

Dinamarca tiene un significado muy especial para la reina Letizia. Fue en Copenhague, la víspera de la boda del entonces príncipe Federico y la abogada australiana Mary Donaldson, pocos días antes de su propio enlace, en mayo de 2004, cuando la futura princesa de Asturias desfiló ante la realeza y la prensa internacional, vestida de gala por primera vez.

El diseño de Lorenzo Caprile, en seda roja y con corpiño brocado, fue un gran éxito. Pero fue, al día siguiente, en la iglesia de catedral Vor Frue Kirke de Copenhague, cuando la nueva futura princesa deslumbró con un vestido rojo «caprile» de gasa y joyas art déco de la reina Sofía. Todos coincidieron: el estilo de la novia del príncipe Felipe era impecable. Había nacido una estrella de la realeza.

Pero aquí no acaba la relación especial que une a doña Letizia con Dinamarca y con los futuros reyes Federico y Mary. Ambas parejas anunciaron su compromiso con pocos días de diferencia, en noviembre de 2003 y se casaron casi al mismo tiempo, el 14 de mayo de 2004 los daneses y el 22 de mayo, los españoles. Por esta razón, Federico y Mary no acudieron a la boda de Felipe y Letizia, porque estaban de luna de miel.

Sus primeros hijos — Leonor y Christian — nacieron el mismo mes de octubre, con dos semanas de diferencia, en 2005. Sus segundos hijos, Sofía e Isabela, nacieron en abril de 2007, también con días de diferencia. Y ambas, aunque con una década de por medio, han accedido al trono tras la abdicación de un rey y de una reina. Don Felipe y el príncipe Federico mantienen una íntima amistad. El rey de España era uno de los «royals» presentes en el local, el día que se conocieron Federico y Mary, en Sidney, durante los Juegos Olímpicos de 2000.

Doña Letizia y Mary de Dinamarca tienen mucho en común

Esta íntima amistad entre los dos príncipes ha marcado también el camino en la relación entre doña Letizia y Mary de Dinamarca. Tienen la misma edad y proceden de familias de clase media y sus trayectorias, ya antes de conocerse, habían transcurrido casi paralelas. Ambas eran dos brillantes profesionales –periodista, doña Letizia; abogada, Mary Donaldson–, independientes y decididas. Y ambas escogieron dejarlo todo por el amor de dos futuros reyes.

El noviazgo de don Felipe y doña Letizia fue breve, pero no así el de Federico y Mary, que tuvieron que enfrentarse a la reina Margarita durante cuatro largos años, hasta que ésta decidió que Mary era la mujer adecuada como futura reina de Dinamarca. Doña Letizia tuvo que demostrarlo también, durante varios años, aunque después de casarse. La llegada de dos plebeyas al corazón de dos de las monarquías más importantes de Europa causó conmoción, y ambas demostraron su gran capacidad para abordar un reto tan importante.

Las críticas persiguieron a ambas. Mary fue acusada de gastar demasiado en ropa y de tener una gran querencia por las marcas de lujo, así como de no tener una agenda comprometida con el interés de los daneses. Doña Letizia aguantó las críticas por su extrema delgadez, por su supuesta frialdad y por un supuesto caracter «demasiado» controlador y autoritario.

Ambas querían aportar su propia personalidad a la Corona, pero tuvieron que pasar años hasta que tanto una como otra encajaron como un guante en dos monarquías renovadas. El peso de Mary en las causas LGTBI o en la sostenibilidad de la moda y el reciclado de sus propias prendas es hoy indiscutible. Ha quedado claro que es una mujer seria, responsable, discreta e inteligente.

Su actitud tras el escándalo provocado por las fotos de su marido con Genoveva Casanova en Madrid lo demuestra: ni un mal gesto, ni una actitud seria o condenatoria. No sabemos lo que pasó realmente. Federico siempre ha llevado una vida muy relajada lejos del protocolo. Pero lo que está claro es que Mary confía en él, al menos de puertas para afuera, y que es su apoyo.

Los reyes de España junto a Mary Donaldson. / GTRES

La monarquía es más importante. Casualmente, don Felipe y doña Letizia estaban en visita oficial en Copenhague, el pasado noviembre, cuando estalló el escándalo. ¿Fue Letizia un apoyo para Mary en aquel momento tan delicado? Puede ser, puesto que a ambas las une una relación de confianza, pero muy probablemente fue sin palabras. Las fotos siempre han mostrado que les une una gran complicidad.

Doña Letizia es hoy, casi diez años después de convertirse en reina, un apoyo sin fisuras para don Felipe y una figura de referencia en numerosas causas sociales, como las enfermedades raras, la nutrición, la lucha contra el cáncer, el apoyo a la Formación Profesional o la lectura. Ha demostrado con tesón y entrega que es una persona empática, cariñosa, inteligente y muy trabajadora. Ha conseguido, como Mary, forjar su propia personalidad como «royal» y, al mismo tiempo, adaptarse a una tradición de siglos, con un protocolo estricto que, en general, ha hecho sombra a las consortes.

Pero, además, ambas han vuelto a su favor un elemento que, antes, les irritaba: los comentarios sobre cómo iban vestidas. Tanto Letizia como Mary han entendido que podía ser un reclamo sobre su trabajo y su figura y han sabido darle la relevancia justa. Hoy son dos de las mujeres más elegantes y alabadas por la prensa internacional.

Además, han dado a conocer a diseñadores de ambos países y han entendido que su vestimenta puede ser un gran mensaje en sí misma. Y, a pesar de fijarnos tanto en sus estilismos, todos sabemos que su trabajo no es sólo fachada, sino que es una contribución muy seria al bienestar de muchas personas.