Los cinco cambios drásticos que ha hecho la reina Letizia en Marivent y por qué nunca se ha sentido cómoda veraneando en Mallorca (aunque vuelve este fin de semana)

La reina Leticia nunca ha estado especialmente feliz de tener que veranear en Mallorca y no considera su estancia en la isla como vacaciones, lo ve como parte de la agenda oficial.

La reina Letizia con sus hijas cuando eran pequeñas: con los años ha conseguido empezar a disfrutar de sus estancias en Mallorca. / Getty

Elena Castelló
Elena Castelló

Doña Letizia nunca encajó bien en los veranos de Mallorca . Aquella pregunta retórica sobre si se podían considerar «vacaciones privadas», que lanzó a una periodista, causó revuelo y marcó a fuego su relación con la isla en los primeros años de casada.

Quizá el problema era que, en realidad, en lo que no encajaba era en la vida familiar de los Borbones y quiso imponer sus propias reglas en cuanto le fue posible. Ya convertida en reina, en 2014, se ha mostrado más a gusto en compañía de Don Felipe y de la princesa de Asturias y la infanta, cuando en la foto familiar ya solo salen ellos.

Marivent es un lugar soñado para la reina Sofía. Suele llegar allí a finales de julio y quedarse en el palacete que se yergue sobre el mar hasta septiembre, en compañía de su hermana, la princesa Irene y su amiga Tatiana Radziwill con su esposo. Juntos pasan las tardes en Marivent y pasean por la isla o van de compras por Palma.

La reina Letizia, no parece que tenga ningún lazo afectivo significativo con Marivent, o al menos no tan fuerte como el de doña Sofía, para quien ese mar le recuerda a su niñez en Grecia. Ni siquiera parece que le traiga buenos recuerdos. Allí tenía que convivir con sus cuñadas, cuando la relación empezó a enfriarse, tras el caso Nóos, y con su suegro, con el que parece que nunca tuvo gran sintonía, según se ha sabido después.

Los reyes Felipe y Letizia con sus hijas en Mallorca. / gtres

En Mallorca también ha vivido momentos difíciles, como la crisis matrimonial de la que se habló, a principios de agosto, en 2013, cuando llegó tres días más tarde que su marido y se fue tres días antes a Madrid. Mallorca fue también el escenario de su público desencuentro con la reina Sofía , a la salida de la misa de Pascua, en 2018.

Quizá por todo ello, desde su llegada al trono, doña Letizia se hospeda con el rey Felipe y sus hijas en Son Vent, una de las tres casas que alberga el recinto de Marivent, además de la casa principal. Pero, sobre todo, ha ido efectuando, poco a poco, algunos cambios en la vida del palacete, con discreción pero con firmeza.

A pesar de que, según dicen, considera su estancia en la isla como parte de su agenda oficial, aunque lejos de Madrid, ha intentado que esos días sean agradables para don Felipe y sus hijas. Estos son los cinco cambios que han llegado a Marivent y al verano mallorquín de la mano de la reina:

Los reyes Felipe y Letizia con la reina Sofía en una recepción en Marivent. / gtres

Un séquito mucho más reducido

En la época del rey Juan Carlos, se trasladaba a Marivent todo el equipo de La Zarzuela. El rey emérito pasaba en Mallorca un mes. Las vacaciones mallorquinas de los actuales reyes se han acortado a algo más de una semana y el equipo que necesitan los reyes es menor. Viajan únicamente el personal de seguridad y las personas más cercanas al Rey Felipe VI.

Una mayor independencia

La reina Sofía se aloja en el edifico principal del palacete de Marivent, mientras que, en las otras tres construcciones del recinto, con jardines y piscinas propias, se alojan Don Felipe y su familia y las infantas Elena y Cristina (cuando iban). Las familias tenían más intimidad y podían hacer vidas por separado.

Sin embargo, doña Letizia y don Felipe dejaron muy claro desde que accedieron al trono, e incluso desde antes, que solo coincidirían en Mallorca con la reina emérita. Querían mantenerse lejos del escándalo del caso Nóos y de las polémicas protagonizadas, más tarde, por el rey Juan Carlos. Aquellas fotos de los Reyes eméritos rodeados de hijos y nietos en los 2000 ya solo están en el álbum familiar.

La reina Sofía de compras por las calles de Mallorca. / gtres

Nada de clases de vela, ni de club náutico

La princesa de Asturias y la infanta Sofía no han participado nunca en las clases de vela de la famosa escuela de Calanova donde las tomaba su padre con sus hermanas y todos sus primos. A doña Letizia tampoco le gusta el Club Náutico. No es afín a este tipo de deportes y, como consecuencia, don Felipe, redujo bastante su participación en las regatas de principios de agosto.

Últimamente parece que ha retomado con más asiduidad su protagonismo en la Copa del Rey de Vela, que esta año cunple 40 años. La poca afición de doña Letizia por el mar ha abierto, sin embargo, una nueva oportunidad a las visitas al interior de la isla, lo que ha supuesto una promoción como destino turístico de lugares que antes habían quedado un poco oscurecidos.

Salidas sí, paseos no

A diferencia de lo que siempre ha hecho y sigue haciendo la reina Sofía, a la que los palmesanos se encuentran haciendo compras en el centro o tomando un helado con su hermana en el casco histórico, las salidas de los reyes actuales no son casuales.

Son pocas, pero siempre se anuncian a la prensa, como parte de su agenda, aunque transcurran en un ambiente más distendido. La Familia Real mantiene, sin embargo, a los periodistas más alejados de lo que estaban en décadas pasadas. Quieren mantener las distancias.

Nada de pandilla de amigos

Salvo Jaume Anglada, a cuyos conciertos acuden con frecuencia los reyes, don Felipe ya no suele frecuentar al grupo de amistades que se consolidó en su adolescencia. Dicen los rumores que doña Letizia no se siente a gusto entre ellos, pero que tampoco quiere que acuda a reuniones sin ella. Sin duda, la relaidad de estas afirmaciones solo las conocen ellos..

20 de enero-18 de febrero

Acuario

Con el Aire como elemento, los Acuario son independientes, graciosos, muy sociables e imaginativos, Ocultan un punto de excentricidad que no se ve a simple vista y, si te despistas, te verás inmerso en alguno des sus desafíos mentales. Pero su rebeldía y su impaciencia juega muchas veces en su contra. Ver más

¿Qué me deparan los astros?