El origen de la gran amistad que une a la reina Sofía y Margarita Gómez-Acebo: exilio, tragedias y veranos felices

Sin duda, fue una celebración feliz la del 90 cumpleaños de Margarita Gómez-Acebo, mujer del rey Simeón de Bulgaria. Lo hizo en Madrid rodeada de sus hijos y sus nietos con la excepción de la princesa Kalina de Bulgaria , que no habría podido llegar a la capital española desde Bulgaria por un contratiempo.

Entre los invitados se encontraba la reina Sofía, gran amiga de Margarita Gómez-Acebo, como también lo es el rey Juan Carlos del matrimonio. Sus lazos se remontan al exilio de Simeón de Bulgaria y su mujer, que llegaron a nuestro país en julio de 1951, admitidos por Francisco Franco y procedentes de Alejandría, donde habían recalado al salir del país.

Es importante destacar los vínculos familiares que existen entre ellos. El rey Juan Carlos y Simeón de Bulgaria comparten lazos Borbón y Orleans, mientras que Margarita Gómez-Acebo es prima hermana de Luis Gómez-Acebo , marido de la infanta Pilar. De hecho fue en casa de Simeón y Margarita donde se conocieron y se desbarataron las pretensiones de don Juan de Borbón de que su hija se casara con Balduino de Bélgica .

Tenemos que señalar que Simeón de Bulgaria y Margarita Gómez-Acebo se casaron en su casa de Madrid en una ceremonia privada el 21 de enero de 1962, después por lo civil en Lausana y por último por el rito ortodoxo en la iglesia rusa de Vevey, también en Suiza. Los príncipes Juan Carlos y Sofía contrajeron matrimonio poco después, el 14 de mayo de 1962, por lo que generacionalmente llevaron vidas paralelas.

Los lazos entre ambas familias siempre fueron muy estrechos, también sus hijos han mantenido excelentes relaciones entre ellos. Simeón y Margarita vienen con frecuencia a su segunda casa, España, donde vivieron muy felices. Después llegó el reto de Simeón de presentarse a las elecciones y se convirtió en primer ministro de Bulgaria, aunque no logró revalidar el puesto en los siguientes comicios.

Simeón de Bulgaria había regresado a su país con la caída del telón de acero unos años antes de su salto a la política, en 1996, y lo hizo con el avión oficial de Juan Carlos I , lo que evidenciaba una vez más los estrechos lazos de cariños existentes entre ambas casas reales, aunque, en el caso de la búlgara, no reinante.

Su amistad, sin embargo, se remonta a algo más atrás, al crucero de jóvenes de la realeza que Federica de Hannover, la madre de la reina Sofía, organizó en 1954 con la intención de encontrar pareja a sus tres hijos casaderos. Allí se conocieron Juan Carlos y Sofía, y también estaba Simeón, compañero de caza años más tarde en innumerables ocasiones del ahora rey emérito en su casa de campo.

La reina Sofía fue sin duda un gran apoyo para Margaríta Gómez-Acebo en la muerte de su hijo Kardam de Bulgaria, el golpe más duro que ha recibido el matrimonio e incluso no podemos olvidar que Kyril de Bulgaria, ahora divorciado de Rosario Nadal, vivió una temporada en Zarzuela.

Tampoco podemos pasar por alto los veranos en Mallorca, donde se estrecharon aún más lazos y se generaron recuerdos indelebles. Ambas familias han estado unidas en los mejores y peores momentos. Por eso la reina Sofía no podía faltar a la celebración del 90 cumpleaños de su gran amiga, Margarita Gómez-Acebo.