moda Quién es Dominnico, el diseñador detrás de los looks más rompedores y atrevidos de Rosalía, Lady Gaga o Beyoncé

La trayectoria de Domingo Rodríguez Lázaro (Alicante, 1994), el talento que se oculta detrás de Dominnico, comienza como la de toda firma del momento que se precie: en Instagram . Cuando apenas pasaba los mil seguidores en la red social, la estilista de Lady Gaga se topó con él y le contactó para vestir a la artista en el festival Coachella, un innegable escaparate de moda. Corría el año 2017 y era solo el inicio de lo que estaba por venir.

En 2019 su fama se consolidó cuando vistió a Rosalía para la gira de El mal querer. La última artista en recurrir a él ha sido la mismísima Beyoncé, que lució unos guantes de la firma en la sesión de fotos promocional de su último álbum, Renaissance, lanzado el pasado verano. Otras como Dua Lipa, Aitana, Lola Índigo o Chanel también visten de forma habitual las creaciones de Domingo.

Como él mismo comenta con Mujerhoy, contar con el apoyo de estas personalidades de renombre internacional le ha servido para abrirse las puertas «a millones de personas en todo el mundo». Su colección para la próxima primavera la presentó en la 080 Barcelona en octubre y, si bien la estética motomami ya estaba presente en su imaginario antes de que Rosalía la pusiera de moda, esta temporada da un paso más y rinde homenaje al universo e imaginario de los camioneros, la profesión de su padre.

Subversivas. Así podríamos definir en una palabra sus colecciones, por atrevidas, rompedoras y modernas. El escenario de su desfile lo confirmaba con cool kids y drag queens ocupando la primera fila y ataviados con sus creaciones. El espectáculo lo abría una embarazadísima Neus Bermejo –una de las modelos más importantes del panorama nacional– confirmando la máxima del diseñador: «en moda tenemos la obligación de abrazar a todas las personas, independiente de su condición física».

Su desfile en Barcelona, la ciudad en la que fundó la firma, fue aplaudido por la prensa internacional y, aunque para él «fue fantástico», no le importaría desfilar en Londres o presentar alguna colección en Japón. Un diseñador siempre dispuesto a expandir fronteras.