Es indiscutible que la reina Letizia fue una de las invitadas más elegantes en la Coronocaión de Carlos III. Su traje rosa , (uno de los colores favoritos de la reina y que mejor le sientan ) diseñado por Carolina Herrera, impactó a todos los asistentes, pero fue, sin duda, su sombrero, el accesorio que transformó el estilismo y la coronó como la mejor vestida de la ceremonia. Un acto en el que, precisamente, no todas acertaron .
La artífice del éxito de este tocado se llama Isabel Terroso y con su firma Balel Luxury Hats ha conseguido darle a la sombrerería española el nombre y la fama que se merece. En Mujerhoy la entrevistamos y visitamos su taller cuando aún no vestía la cabeza de nuestra reina, pero ya apuntaba maneras.
Una diseñadora sencilla, apasionada de su trabajo que quiere devolverle a la sombrerería española el papel protagonista que tuvo hace décadas. Desde luego, va por buen camino porque gracias a diseños como el de la reina, ahora todas queremos llevar tocados.
El sombrero que ha enamorado al mundo es un diseño inspirado en los años 50. Está realizado en un material llamado sinamay, un tipo de paja que se utiliza para hacer sombreros desde la II Guerra Mundial. Sobre la base de paja en color almendra, un velo vintage en un tono de rosa a juego con el color del traje de Carolina Herrera, un diseñado creado especialmente para ella por Wes Gordon, el director creativo de la firma.
Isabel Terroso, la creadora y diseñadora de Balel Luxury Hats, también ha elaborado este modelo exclusivamente para doña Letizia. Está hecho a mano, en el taller que tiene en la calle Claudio Coello de Madrid, con herramientas y hormas de sombrerería clásica.
Es la segunda vez que la reina apuesta por un diseño de Isabel Terroso para pisar tierras inglesas: la primera vez fue para el funeral del Duque de Edimburgo . En aquella ocasión, fue una especia de casquete elaborado en terciopelo que también llevaba una redecilla vintage. Todo en un tono verde similar al del traje que lució en aquella ocasión.
Isabel Terroso no es solo famosa por haber diseñado los últimos tocados de la reina. Por su taller de Madrid han pasado muchas clientas vip, pero ella es muy discreta y prefiere que sea su trabajo el que hable por ella. «Para una sola pieza puedo tardar de dos a tres semanas», nos cuenta. Y es que en cada una de ellas utiliza los mejores materiales, aunque no sean fáciles de encontrar. «No me conformo con fieltros malos, paja o papel», asegura.
Isabel tiene el ojo de la profesional y su criterio es clave para que cada clienta acierte, como doña Letizia, con el diseño del sombrero. «Normalmente se dejan aconsejar porque vienen bastante perdidas. En España hay poca cosa, sombreritos de calle o, como yo los llamo, artefactos exagerados para ir de boda. Así que cuando llegan aquí se sorprenden y me dicen que esto no lo veían desde hace 40 o 50 años. Y precisamente eso es lo que quiero recuperar».
«Siempre me inclino hacia la sombrerería antigua, al encanto de lo sencillo, de lo bien hecho. No por recargar más los diseños eres más original o innovador. Para mí, es una falta de ideas: cuando ya no saben qué hacer y lo ponen todo. Un buen diseño es algo en lo que ni sobra ni falta nada. Es equilibrio y eso es difícil de conseguir. Pero se puede, solo hay que dedicarle muchas horas«.
Isabel lo tiene claro. «Hay que encontrar el que te siente, te guste y te quede bien. Y llevarlo mucho, hacerlo tuyo; porque cuanto más lo usas, más cómodo te parece. No te tienes que acordar de que lo llevas puesto, por eso hay que sujetarlo muy bien, ahí está la clave«, aconseja.
Lo cierto es que en España no estamos acostumbrados a llevar sombreros o tocados, y menos a diario. Algo que Isabel lucha por cambiar. «En nuestro país hemos perdido la costumbre de llevar sombreros. Es como quien lleva años sin usar tacones y un día se pone unos zapatos de 16 centímetros: cuesta. Pero cada mujer tiene el suyo. A mí me gusta saberlo todo de una clienta, sus gustos y su personalidad. Cuanto más sepa sobre ella, mejor lo llevará. Creo que todas deberíamos tener el nuestro, desde una niña de tres años hasta una señora de 80. Lo paradójico es que la gente joven se atreva a vestir cualquier cosa, pero se asuste con los sombreros. Estoy convencida de que para llevarlo bien hace falta un punto de madurez«, asegura.
La calidad de los materiales, un diseño de los que duran toda la vida y una forma de ver la moda, tanto en la ropa como en los accesorios, muy alejada del modo de consumo rápido en el que vivimos ahora son las claves de su buen trabajo. «Las firmas de low cost se han encargado de que se nos olvide lo que es un buen patronaje, un buen corte. Una prenda que se adapte a ti y te acompañe toda tu vida, que tenga tu esencia, tus recuerdos y tus vivencias. Hay que tener menos cosas y que evolucionen a tu lado, comprar menos y quererlas más», asegura.
20 de enero-18 de febrero
Con el Aire como elemento, los Acuario son independientes, graciosos, muy sociables e imaginativos, Ocultan un punto de excentricidad que no se ve a simple vista y, si te despistas, te verás inmerso en alguno des sus desafíos mentales. Pero su rebeldía y su impaciencia juega muchas veces en su contra. Ver más
¿Qué me deparan los astros?