Las intolerancias y sensibilidades alimentarias son extremadamente comunes. De hecho, se estima que entre el 2 y el 20 % de las personas en todo el mundo pueden sufrir intolerancia alimentaria. Las dietas de eliminación son el estándar de oro para identificar intolerancias, sensibilidades y alergias a través de la dieta.
Lo que se hace es tan sencillo como eliminar ciertos alimentos que se sabe que causan síntomas incómodos y los vuelve a introducir después mientras se evalúan los síntomas. Los alergólogos y los dietistas han estado usando dietas de eliminación durante décadas para ayudar a las personas a descartar los alimentos que no se toleran bien.
Si experimentas síntomas que crees que pueden estar relacionados con tu dieta, una dieta de eliminación podría ayudarte a descubrir qué alimentos los están causando. Sin embargo, debes saber que las dietas de eliminación no son para todo el mundo. Deben estar supervisadas por un médico o dietista.
Una dieta de eliminación consiste en eliminar los alimentos que sospechas que tu cuerpo no puede tolerar bien. Posteriormente se reintroducen los alimentos, uno cada vez, mientras se buscan síntomas que muestren una reacción. Solo dura entre cinco y seis semanas, y se emplea para ayudar a las personas con intestino sensible, intolerancia o alergia alimentaria a identificar qué alimentos contribuyen a sus síntomas.
De esta forma, una dieta de eliminación puede aliviar cosas tan incómodas como distensión abdominal, gases, diarrea, estreñimiento o náuseas. Una vez que hayas identificado con éxito un alimento que tu cuerpo no puede tolerar bien, puedes suprimirlo de la dieta para evitar síntomas incómodos en el futuro.
La dieta de eliminación consiste en prescindir de alimentos que son sospechosos de causar intolerancias o alergias/UNSPLASH
Hay muchos tipos de dietas de eliminación, que implican comer o eliminar ciertos tipos de alimentos, pero si tienes una alergia alimentaria conocida o sospechada, solo debes probarla bajo la supervisión de un profesional médico. La reintroducción de un alérgeno alimentario puede desencadenar una afección peligrosa llamada anafilaxia. Los síntomas de una alergia incluyen erupciones, urticaria, hinchazón y dificultad para respirar.
Una dieta de eliminación se divide en dos fases: eliminación y reintroducción. En la primera, suprimes los alimentos que sospechas que desencadenan tus síntomas durante un período corto de tiempo, generalmente entre dos o tres semanas. Algunos de estos alimentos incluyen frutos secos, maíz, soya, lácteos, frutas cítricas, vegetales de solanáceas, trigo, cosas que contienen gluten, carne de cerdo, huevos y mariscos.
La siguiente fase es la de reintroducción, en la que poco a poco vuelves a incorporar los alimentos eliminados a tu dieta. Cada grupo de alimentos debe introducirse individualmente, durante dos o tres días, mientras se buscan síntomas. Estos van desde erupciones y cambios en la piel hasta dolor en las articulaciones, dolores de cabeza o migrañas, fatiga, dificultad para dormir, cambios en la respiración, hinchazón, dolor de estómago o calambres.
Si no experimentas síntomas durante el tiempo en el que vuelve a introducir un grupo de alimentos, puedes dar por hecho que está bien comerlos y pasar al siguiente grupo. Pero si experimentas síntomas negativos, como los mencionados anteriormente, entonces es que has identificado con éxito un alimento desencadenante y debes eliminarlo de su dieta.
Las mejores dietas de eliminación suelen ser las más restrictivas. Cuantos más alimentos elimines durante la primera fase, más probable será que descubra aquellos que desencadenan síntomas incómodos. Es una simple lista, pero que es útil que siempre incluyan un a supervisión experta.
Los alimentos que comúnmente se eliminan durante la fase de eliminación incluyen cítricos, solanáceas, como tomates o pimientos, frutos secos, legumbres, alimentos ricos en almidón como el trigo o la cebada, carnes procesadas, fiambres, carne de res, pollo, cerdo, huevos, mariscos, lácteos alcohol, café, especias o azúcar.
Existen opciones sanas y variadas para comer en las dietas de eliminación/UNSPLASH
Aunque una dieta de eliminación es muy restrictiva, hay suficiente variedad para hacer comidas saludables y deliciosas. Algunos alimentos que puedes comer incluyen la mayoría de frutas y verduras, arroz, pavo, cordero, pescados de agua fría como el salmón, sustitutos de lácteos como la leche de coco o la de arroz sin azúcar o aceite de oliva.
Lo fundamental al iniciar una dieta de eliminación es que detectes síntomas que hacen que tus digestiones y sensaciones sean malas después de comer. Quizá es que estés desarrollando una intolerancia o sensibilidad especial hacia algún alimento. Si es así, no dudes en ponerte en manos de un profesional acreditado que diseñe tu dieta.