Tomar el sol cada mañana puede ayudarte a acelerar el metabolismo, quemar grasa y adelgazar

La primavera ya está aquí y la luz del sol comienza a brillar. Esto suele traducirse en una mejora del estado de ánimo, pero recientes estudios han descubierto de que la luz azul del sol también puede ser clave para transformar por completo tu metabolismo . Y sí, esto también puede ayudarte a adelgazar.

No te vuelvas loca. La luz solar no es una solución mágica para adelgazar. Si quieres perder peso tendrás que poner algo de tu parte, comiendo de manera saludable y realizando ejercicio físico, pero sí es cierto que puede contribuir significativamente a controlar el peso regulando el almacenamiento de la grasa .

Un estudio de la Universidad de Alberta (Canadá) ha descubierto que la luz azul del sol puede hacer que las células grasas que se encuentran debajo de la piel se encojan, lo que reduce el almacenamiento de grasa en el cuerpo. Y, por tanto, una exposición insuficiente al sol puede contribuir a un aumento de peso debido a un mayor almacenamiento de grasa.

Por otro lado, un ensayo clínico publicado en la revista Obesity Facts señala que la exposición al sol también ayuda a equilibrar la salud hormonal femenina y a transformar su metabolismo. Los datos del estudio muestran cómo el sol puede acelerar el metabolismo hasta multiplicar por 3 la pérdida de peso.

Y no creas que sólo puedes aprovechar estos efectos los días soleados, ya que incluso cuando está nublado estás absorbiendo los rayos del sol. Quizá con menos intensidad, pero su función la cumplen igual. Deja entrar la luz en tu casa, desayuna frente a la ventana y ve andando al trabajo, todo suma.

1. Ayuda a reducir el almacenamiento de grasa: como hemos comentado, la luz azul del sol puede afectar a las células grasas que se encuentran debajo de la piel. Según este estudio, la luz azul puede hacer que las células grasas se encojan, reduciendo la cantidad de grasa almacenada.

2. Regula los ritmos circadianos: la exposición al sol, sobre todo por la mañana, ayuda a regular el ritmo circadiano, lo que influye en la producción de hormonas como la melatonina y el cortisol, que afectan el metabolismo y los hábitos alimenticios. Además, también ayuda a mantener unos ciclos de sueño regulares, lo que es crucial para evitar el aumento de peso.

3. Produce vitamina D: la vitamina D juega un papel importante en la regulación del metabolismo y en la función de las células grasas, y el sol tiene mucho que decir en su producción. Algunos expertos relacionan los niveles bajos de vitamina D con un mayor riesgo de obesidad y dificultades para perder peso.

4. Mejora el estado de ánimo y reduce el estrés: cuando te expones al sol, se aumenta la producción de serotonina, un neurotransmisor que mejora el estado de ánimo y ayuda a reducir el estrés. Al reducirse la producción de cortisol, los antojos de comidas insalubres también disminuye, lo que ayuda a controlar el peso.