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La actividad física ayuda a la formación de globulos rojos y blancos que contribuyen a un mejor funcionamiento de las defensas del organismo. Así lo revela un estudio de La Universidad de Harvard, en el que participaron cerca de 1.000 sujetos (hombres y mujeres), en cuyas conclusiones figura que aquellos que caminaron 20 minutos diarios durante cinco días a la semana padecían menos resfriados y gripe, y en caso de que enfermaran la duración era mucho más corta.
Pero no es el único beneficio que aporta al cuerpo la caminata diaria. Así, estas son otras ventajas:
1. Nos ayuda a mantenernos alejados del azúcar. Las situaciones de estrés pueden provocar que caigamos en la tentación de picar cosas dulces. Pero, los expertos aseguran que caminar a diario nos ayuda a controlar esos caprichos.
Así lo asegura un estudio realizado por la Universidad de Exeter en el que se llegó a la conclusión de que caminar 15 minutos al día alivia la ansiedad y puede frenar la ingesta de alimentos azucarados, como el chocolate. Caminar tiene un efecto ansiolítico.
2. Nos permite luchar contra el poder de la genética. Luchar contra la naturaleza parece a veces imposible. Sin embargo, los expertos de la Universidad de Harvard revelaron en un estudio para el que se analizaron 32 genes relacionados con la obesidad de 12.000 personas, se descubrió que las personas que andan una hora al día reducen a la mitad el efecto de estos genes sobre su peso.
3. Protege las articulaciones. Caminar alivia los dolores articulares, sobre todo de las rodillas y la cadera, las articulaciones más afectadas por la artrosis en las personas mayores o con sobrepeso. También se fortalece el cuádriceps, lo que ayuda a retrasar la evolución de la enfermedad.
4. Hacemos amigos. Los que salen a andar en grupo saben que en esas caminatas se tienen charlas interesantes que muchas veces generan una sólida amistad, o al menos una relación agradable que ayuda a valorar una buena compañía.
Por último, cabe destacar que, para aprovechar al máximo las ventajas de este ejerciciom hay que tener en cuenta la frecuencia recomendada. En los mayores de 65 años se recomienda entre 20 y 30 minutos de caminata diaria, para los más jóvenes se aconseja además la práctica de ejercicios de mayor intensidad, como una hora de gimnasio o de bicicleta tres veces por semana.