interValos de alta intensidad
interValos de alta intensidad
Entrenar la velocidad es uno de los métodos más divertidos, efectivos y prácticos para mejorar la rapidez y la potencia corporal total, además de ser un estímulo muy potente para cambios rápidos en la composición corporal (porcentaje reducido de grasa corporal). Por eso no es de extrañar que se haya convertido en un ejercicio viral.
Con algo tan sencillo como «esprintar en colinas» vas a conseguir no solo moldear unas piernas duras y envidiables, sino también trabajar la velocidad si eres atleta o quitarte kilos de más a toda prisa con un ejercicio HIIT. Con otro añadido: te obligará a salir de un espacio indoor para alentar la realización del ejercicio al aire libre.
El hill sprint no es otra cosa que elegir una pendiente inclinada o colina al aire libre y realizar series de velocidad controladas. Son sprints cortos en colinas procurando hacer entre dos y diez sprints (dependiendo del nivel) de 10 a 12 segundos cuesta arriba en una pendiente empinada al 95% de esfuerzo con recuperación completa.
Los sprints en cuesta son esencialmente una forma de entrenamiento por intervalos, probablemente una de las opciones más intensas (pero atractivas). Encuentras una colina adecuada y haces algunas repeticiones de carrera cuesta arriba, seguidas de un trote ligero cuesta abajo (recuperación).
Al igual que otras formas de entrenamiento por intervalos, las carreras de velocidad en colinas introducen en tu cuerpo factores estresantes o cargas, en este caso el ritmo intenso y la subida, durante un corto periodo de tiempo y luego le permite recuperarse antes de repetir lo mismo nuevamente. Alucinarás con los beneficios…
Los sprints en colinas son una excelente manera de aumentar drásticamente el gasto calórico de una actividad que ya quema de por sí un montón de calorías cuando se realiza en terreno llano. Piensa en el hill sprint como un cruce entre las carreras de velocidad y el levantamiento de pesas.
Te proponemos una idea para que te des cuenta del tipo de físico del que hablamos. La próxima vez que vea una carrera de velocidad en la televisión, presta mucha atención a las velocistas de baja estatura: posiblemente tengan los mejores físicos del planeta... culturistas incluidos.
Debido a la superficie inclinada, no se puede alcanzar la velocidad máxima de las extremidades y, por lo tanto, sirve como una barrera de seguridad para esfuerzos exagerados. Sin embargo, en el proceso, los músculos de la cadena posterior (espalda baja, glúteos, isquiotibiales y gemelos) obtienen un increíble efecto de fortalecimiento.
También debido a la superficie inclinada, te ves obligada a inclinarte hacia adelante mientras corres, lo que te enseña la mecánica de aceleración adecuada que querrías al correr en una superficie plana. Los sprints en colinas se convierten en tu entrenador de velocidad porque casi no puedes evitar hacerlo bien.
Los sprints en colina ofrecen un gran potencial multitarea. Puedes entrenar, broncearte, trabajar el corazón y quitarte kilos mientras escuchas tus canciones favoritas. Es una forma sanísima de realizar un entrenamiento de exigencia sin aburrirte y en contacto con la naturaleza.
A diferencia de casi cualquier otra forma de entrenamiento, el hill sprint es un ejercicio que te va a obligar a trabajar duro. Una vez que hayas generado un impulso, no querrás perderlo, por lo que en realidad te verás obligado a mantenerlo o incluso aumentarlo. Una vez más, la colina se convierte en tu entrenador personal.